𝙊𝙪𝙧 𝘿𝙚𝙨𝙩𝙞𝙣𝙮 ✮ 𝘞𝘩𝘪𝘙𝘶𝘷

【１】

Eran aproximadamente las cuatro de la  madrugada, nuevamente sufría aquellos episodios de insomnio.

Ya no prestaba atención al programa que estaban transmitiendo en la televisión, solo se dedicaba a pensar en lo solo que estaba.

Cuando era un niño, sus padres fueron asesinados, no sabia el porqué, y no le interesaba.

Ahora tenia amigos, a Carol, a Boyfriend y a Hex. Pero ninguno era capaz de llenar aquel vacío que sentía en su pecho.

El ruido de su puerta siendo golpeada brutalmente lo sacó de sus pensamientos.

¿Quien demonios vendría a su apartamento a estas horas?

De mala gana, caminó arrastrando los pies.

Sujeto la perija entre sus manos y la giró, tirando un poco de ella para poder abrir la puerta.

—Ah... Hola?—

—H-hola, se que esto es repentino, pero porfavor déjame quedarme aqui—

Observó a detalle a la persona parada delante suyo.

Era un chico, unos cinco centímetros mas bajo que él, piel blanca como la nieve y cabellos grises, igual que sus ojos.

Tenia puesto un gran abrigo, y uno de esos gorros que usan los rusos.

Aparte de eso, su piel blanquecina estaba manchada de rojo, y tenia algunos cortes y golpes en su cara. Un hilo de sangre resbalaba por sus labios

—QUE TE PASO?!—

El otro jóven, alarmado, le tapo la boca con ambas manos. En ella llevaba puestos unos guantes que no cubrían los dedos, también grises.

—Porfavor...—

El mas alto sintió algo de pena por él.

Se veía tan frágil y vulnerable, quien sabe que le había pasado.

—Esta bien... Pasa—

Rápidamente, el recién llegado entro en el lugar.

El dueño del departamento cerró la puerta con llave.

Miró al chico que ahora estaba apoyado sobre sus propias rodillas, respirando agitadamente.

—Oye— Lo llamó

El peligris levanto la vista, aun tenia ese semblante serio del principió, solo que ahora de veia mas relajado

—Que esta pasando? Porque estas huyendo de madrugada?—

El otro solo guardó silencio

—No piensas responderme?— insistió

—No puedo decirte— Respondió cortante

—Que? Porque?—

—No te gustaría... Llamarías a la policía, y me vería en la obligación de matarte, cosa que no quiero hacer ya que me pareces buena gente.—

Se quedo de piedra ante tal respuesta.

Quien era ese misterioso jóven? Tan malo era lo que había hecho para que lo amenazara de esa forma?

—Mira... Te prometo que no le diré nada a nadie, porfavor explícame, después de todo estas en mi casa—

El muchacho de piel nivea se quedó callado, dudando de lo anterior dicho. Él era de todo, menos un maleducado. Si, se encontraba en el hogar de su contrarío, el cual se merecía una explicación.

Suspiró pesadamente, y habló

—Esta bien, pero quiero que sepas de que el hecho de que seas mas alto o incluso mayor que yo, no te hace mas fuerte. Puedo matarte en cualquier momento si dices aunque sea una sola cosa sobre mí— Amenazó