CAPITULO 1

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Izuku Midoriya era un pequeño niño de casi 5 años de edad, siempre feliz, riendo y jugando a ser un héroe, su gran sueño.
Él era un pequeño Ángel caído desde el cielo visto desde la perspectiva de su madre, Inko Midoriya, la cual siempre sería agradecida por tener a su pequeño con ella.

Inko se encontraba en la Sala esperando a su pequeño, le había dicho hace 5 minutos que buscara sus cosas pero este aún no regresaba — ¡Vamos Izuku, nos están esperando en el parque!.

— ¡Ya voy mamá!— escucho la respuesta de Izuku seguidamente de sus pasos — ¿vamos mamá?

Izuku había llegado con su traje de All-might puesto, ya entendía la razón de su tardanza— Awww, que lindo te ves cariño— Cargo a Izuku procediendo a abrir la puerta y salir de la casa—¿llevas todo verdad?—preguntó mientras cerraba.

— Si mamá, además llevo algunos dulces para compartir con Kacchan.

—Oooo, que rico, pero recuerda no comer tantos.

— si mami— puso una sonrisa, estaba feliz de poder ver de nuevo a su amigo.

Le devolvió la sonrisa mientras caminaba— Ya estamos cerca, Mitsuki-san dijo que nos estaría esperando en las bancas, y también dijo que Bakugo-kun había traído a unos amigos con él.

— ¿Amigos? — Eso lo había puesto un poco nervioso, normalmente solo jugaba con Kacchan.

— Oh mira, allí está Mitsuki-san y Bakugo-kun— camino un poco más rápido.

Mientras tanto Mitsuki se encontraba distraída regañando al demonio que tenía por hijo, sin darse cuenta de la llegada de los Midoriya— ¿¡Cuantas veces te he dicho que me respetes escuincle malcriado!?— le había colmado la paciencia, si no entendía a las buenas entonces entendería a las malas, pero de que entendía, entendía.

Bakugo intento apartar a su progenitora para que dejará de tirarle la oreja— ¡Ya dejame vieja bruja!

Mitsuki tenía una vena saliendo de su frente— ¡Te voy a- —Se detuvo al ver que los Midoriya ya habían llegado y soltó a Bakugo para ir a abrazar a Inko como si nada hubiera pasado— ¡Buenos días Inko!, ¿como estas?— su sonrisa parecía aplacar todo el suceso ocurrido.

Inko recibió el abrazo con una gota cayendo de su frente, al parecer su amiga nunca cambiaría su actitud respecto a su hijo— B-buen día Mitsuki, he estado bien, ¿y tú?

Dejó de abrazar a su amiga— Que bueno, me alegro, yo estoy excelente, tan sólo que el mocoso aveces me pone de malas.

Inko miró hacía la dirección en donde se encontraba Bakugo— ¿Encerio?, pero si Katsuki-kun es un buen niño— sonrió.

— ¿El mocoso?, jajajaja, talvez te estas equivocando de niño, el que yo tengo es un demonio— volteó a ver a su hijo, el cuál al escuchar lo que decía de él, le sacó la lengua haciéndola enojar más, cuando llegarán a casa lo castigaría—pero bueno, cambiando de tema, ¿dónde está Izuku?

— B-buen d-dia tía Mitsuki— Izuku estaba escondido detrás de su madre, se encontraba nervioso.

— ¡Izuku!, ahí estas, ven a darle un abrazo a la tía Mitsuki— Izuku salió de su escondite, haciendo que Mitsuki casi muriera de ternura— ¡Awwww!, ¡te ves demasiado tierno! — abrazo a Izuku casi dejándolo sin aire.

— G-gracias tía Mitsuki— agradeció con el poco aire que le quedaba mientras Mitsuki lo devolvía a tierra firme.

— De nada querido, de seguro estas emocionado por ver al mocoso, ¿verdad?— le preguntó con una sonrisa mientras se ponía a su altura.

𝔅𝔲𝔩𝔩𝔦𝔢𝔰 𝔢𝔫𝔞𝔪𝔬𝔯𝔞𝔡𝔬𝔰♡ (𝔅𝔲𝔩𝔩𝔦𝔢𝔰×𝔇𝔢𝔨𝔲)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora