Sorry, wrong number! (woosan)

Lunes

Para San el día lunes en cuanto abrió no podía significar otra cosa más que "Mi primera cita con Woonie" el solo pensamiento le hizo cosquillas en el estomago, aún con los ojos cerrados busco a tientas el cuerpo de Wooyoung ya que recordaba como se habían quedado dormidos juntos con la mano del contrario en su cintura y sus narices rozándose tímidamente pero grande fue la sorpresa al no encontrar a nadie durmiendo con el en el mullido sillón. Sintió una terrible angustia, abrió los ojos de golpe topándose con la almohada de color rojo y sobre ella se encontraba una pequeña nota escrita a mano que decía.

"Duermes como todo un osito, cuando despiertes deberías ver la lámpara a tu lado"

San inmediatamente se levantó lo más rápido que su adormilado cuerpo le permitió, observó la lampara y sobre ella había otra nota que decía "Sígueme" entonces notó que en la lampara se encontraba un hilo rojo amarrado, con su dedo siguió el curso del hilo mientras recorría los diversos lugares del apartamento por donde lo estaba conduciendo el hilo rojo lo acompañaba un cosquilleo en la punta de los dedos y un calorcito esparciéndose por su pecho por supuesto que las inmensas ganas de sonreír todo el tiempo también estaban ahí. El hilo rojo se acabó teniendo como destino final el pequeño comedor sobre este se encontraba un desayuno que tenia pinta de estar delicioso, panqueques con frutas y leche achocolatada y por si fuera poco también había un florero con un tulipán amarillo. Para este punto San ya tenía la cabeza en las nubes, casi como si flotara... ¡y no era para menos, si todo indicaba que su día de cita con Wooyoung ya había iniciado! (Con tal detalle era imposible no sentir que su corazón se revolcaba de felicidad)

Estaba tan metido en su ensoñación que no se dio cuenta de la presencia y de los pasos acercándose a él hasta que sintió unos brazos rodeándolo por la cintura.

—¿Te gusta?— Susurró Wooyoung en el oído con un tono un tanto coqueto, San se estremeció ante la voz retumbándole y la leve respiración del mayor en su cuello.

—Me en..canta— dijo en tono bajo un tanto abochornado por la situación. En cuanto Wooyoung notó eso lo soltó y caminó directo a tomar asiento en el comedor para compartir el desayuno servido.

Una vez que ambos terminaron de desayunar se tomaron el tiempo para prepararse y aproximadamente pasado mediodía salieron. San se sentía doblemente nervioso porque 1) ESTABA DE CITA CON WOONIE y 2) No sabía siquiera cual era el plan, ya que Wooyoung insistía en dejar que la cita fuera todo un misterio, la idea era pasar toda la tarde juntos hasta que fuera la hora en la que él tenía que tomar el tren a Jinju. El itinerario del día fuera sorpresa mantenía a San expectante de todo, realmente se sentía intrigado y con las cabeza en las nubes (tal vez un poco más alto). Por supuesto que esto no lo sabía o debía saberlo Wooyoung moriría de vergüenza si así fuera.

Entonces finalmente salieron del dormitorio y comenzaron a caminar por aquella mini ciudad que era el campus universitario. Wooyoung iba adelante guiando el trayecto mientras contaba anécdotas de todo tipo acerca de como había sido su vida en las primeras semanas dentro de la universidad, como cuando de regreso al dormitorio tomaba otro camino que no era y acababa perdido, o lo impresionado que estaba de tener tiendas y hasta un cajero automático dentro del complejo, o cuando una vez en lugar de llegar a la biblioteca termino en la cancha de tenis. Pero de repente Wooyoung se detuvo de golpe haciendo que San chocara contra su espalda.

—¿Ocurre algo?—preguntó claramente confundido-. ¿Hay algo malo?

—Si que hay algo malo— respondió Wooyoung, extendiendo la mano frente al rostro de San.