Sorry, wrong number! (woosan)

Exposición

"Te amo mucho, Woonie", había dicho San, y parece como si el mundo se hubiera estancado en esa frase porque su mente no dejaba de repetirlo incluso. varios minutos después. Tal como los estallidos de un cañón, un eco intrusivo resonaba dentro de su cabeza constantemente. "¡Te amo mucho! ¡Te amo mucho! A la par los latidos de su corazón hacían "¡pum, pum, pum!" asemajándose a un montón de cañonazos dentro de su pecho que hacía picar sus manos, demonios como quería abrazar a su Choi San en ese momento. Después de escuchar a su mente tener ese pensamiento solo pudo decirse a si mismo ¿Qué le había hecho ese niño, cómo lo había hechizado de tal forma? Y sobretodo, ¿por qué no estaba a su lado en ese momento? Claro que Wooyoung había estado emocionado por ver a San todo el día (toda la semana y la otra semana, desde que subió al tren, en realidad), pero después de leer aquel mensaje sus ganas encontrarse con el chico de linda sonrisa con hoyuelos se elevaron a niveles estratosféricos. Por eso, entró casi como una exhalación a la escuela, abriéndose paso apresurado entre el bullicio de gente apartando a todos de su camino para así encontrar a San en cuanto antes.

—Más despacio, vaquero. A este ritmo me torceré un pie —pronunció Seonghwa, recordándole que no estaba solo. Por supuesto como había olvidado que estaba con él—. Mi familia está en el salón de dibujo ahora mismo.

—Lo siento, yo solo no me di cuenta que iba tan rápido- mintió él, dándose la vuelta para mirar al mayor con una sonrisa incómoda—. ¿Deberíamos ir con ellos?

—Puedes explorar por tu cuenta si quieres -dijo el muchacho, encogiéndose de hombros—. A Sannie no lo podremos ver hasta que no termine todo, igualmente.

—¿Ah,no?

¿Qué?, Diablos.

—Cuando termine la obra tendrá que cambiarse para la canción de cierre —le respondió Seonghwa luego de fruncir el ceño, comenzando a caminar en la otra dirección—. ¿No te explicó cómo era?

—Quedamos en no hablar del tema paga que no se pusiera nervioso —explicó, siguiéndolo.

—¿San, nervioso? —ironizó el chico, sorprendido—. Eso sí que es novedoso. Bueno, primero tenemos un rato para mirar los proyectos de arte, dibujo, informática y casi todas las asignaturas, y a las 7 empieza la muestra de música, baile, teatro y todo eso.

—Entiendo.

—Mis abuelos están muy ansiosos por conocerte, ¿sabes? —dijo Seonghwa entonces, burlón, mientras revisaba su teléfono —. Parece que San les ha hablado muchísimo de ti.

—Los hizo escuchar mi programa de radio una vez—presumió Wooyoung, tratando de no sonar tan perdidamente enamorado cómo se encontraba pero falló terriblemente en el intento—. Aunque eso fue con todo el mundo...

—Mi novia y yo lo escuchamos también—coincidió el mayor y Wooyoung no mencionó que ya lo sabía—. Y tengo entendido que acosó a nuestro grupo de teatro para que lo escucharan... pidió que manden pruebas, incluso.

—¿De verdad? —preguntó, sin poder evitar sonreír enormemente y es que el orgullo no le cabía dentro del pecho.

—Luego te muestro las fotos que mandaron todos al grupo de kakao demostrando que estaban escuchándolo —le aseguró Seonghwa, sonriendo casi con ternura—. El salón de arte está justo ahí, por cierto.

Dicho esto, Seonghwa señaló el salón que tenían a unos pocos pasos, las puertas abiertas y algunos chicos en la puerta, hablando. Wooyoung asintió con la cabeza, Y aunque hasta ese momento no se había puesto tan nervioso, de repente sintió que se le revolvió el estómago. Claro, pensando en que San acababa de decirle que lo amaba se había olvidado por completo de que estaba a punto de conocer a casi toda su familia, pero ahora que seguía tímidamente a Seonghwa caí en la cuenta de ello nuevamente... ¡y estaba muy nervioso!