Todo empezó 5 años atrás con una pandemia y cuando crearon la vacuna a una gran parte de la población mundial se la pusieron. Todo iba bien la gente estaba empezando a hacer vida normal, hasta que una mañana 7 rayas aparecieron en mi brazo derecho, pero no era sólo yo si no también mis hermanos, padres, todos los que se habían vacunado las tenían algunos más algunos menos. Nadie sabía que eran hasta que gente empezó a desaparecer, en mi caso el primero en desaparecer fue mi hermano menor fue al tercer día de que las marcas aparecieran. Para ese entonces solo me quedaban 4 y por intuición supe que eran los días que te quedaban con vida, pero... ¿y si había una forma de extender tu vida? Después de 3 días descubrí que la única forma de extender tu vida era quitándosela a otra persona. Ya solo quedábamos mi hermano mayor y yo a él le quedaban 5 días y a mi uno, cuando se lo dije agarro un cuchillo me lo puso en la mano agarro mi brazo y se lo ensarto en el pecho al hacerlo en mi brazo aparecieron 5 marcas más, lo último que dijo fue "es el deber de él mayor cuidar al menor, ahora sobrevive sal y sobrevive" yo solo corrí a mi habitación aun en shock agarre un maletín y lo llene de ropa, dinero, cosas valiosas y un par de cuchillos de cocina. Habían pasado 4 días una gran parte de la población descubrió que matando conseguías más días las calles eran una masacre. Era de noche y yo estaba divagando hasta que vi una silueta que sé notaba que escurría algo que no alcanzaba a distinguir cada vez la silueta estaba más cerca, yo me empecé a alejar.
Esta historia es en colaboración con
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Matar o Morir
AksiImagínense vivir en un mundo en donde o eres un monstruo o te mata uno, bueno en eso se convirtió el mundo. Pero antes de contarles cómo pasó y mi historia me presento. Soy Mathew Carrio, tengo 15 años, soy guatemalteco pero me mudé a los Estados Un...
