Capitulo 2

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Leo ya había estado varias veces en Roma y se la sabía como la palma de su mano. En primer lugar dimos un paseo entre las calles y las plazas del casco antiguo, desde la característica Via Giulia hasta Via Margutta, la calle de los artistas, desde la monumental Plaza Navona hasta el Panteón. Roma es una de las ciudades más sugestivas y románticas del mundo, con sus antiguas calles, los callejones y los monumentos históricos. La verdad es que estaba disfrutando la visita con Leo, no era como yo me lo imaginaba. Es un chico inteligente, culto y muy divertido. Lo cierto es que yo nunca me he enamorado ni he tenido ningún tipo de relación con un chico, creo que de eso ya tendré tiempo, que en la vida hay tiempo para todo y ahora para mi era de estudiar y aprender cosas nuevas. Cuando solo nos quedaban dos horas para acabar la visita libre y irnos de nuevo al hotel Leo dijo que iríamos a un sitio muy especial pero no quiso decirme cual.

- Adele, ahora el final de esta visita guiada por Roma. Ahora para acabar te voy a tapar los ojos y tienes que confiar en mi.

- Como que tapar lo ojos? Donde me vas a llevar?

- Ven, confía en mi.

Leo me agarro por detrás y me tapo los ojos con sus suaves y calientes manos, en ese momento mi corazón iba a mil por hora, nunca había sentido nada parecido a aquello.

- Me voy a matar, Leo déjame ver!

- Que no tonta, que yo te guío. Te fías de mi?

- No!

- Como que no? A que no te digo si hay escalones y te caes.

- Vale vale me fío pero no dejes que me caiga.

- Tranquila estas a salvo conmigo. Y ya hemos llegado, vamos a finalizar nuestra preciosa tarde por Roma con.... Ponte Milvio.

En ese momento me quito las manos de la cara y vi ese puente, lleno de candados y al atardecer, con Leo a mi lado cojiendome por la cintura, fue increíble la sensación que sentí en ese momento, nada podría mejorar eso.

- Ahora supuestamente, si hubieras venido con tu novio pondríais el candadito y tiraríais la llave, así siempre estarías juntos.

- Menuda tontería, ni tengo novio ni por hacer eso estaré con él siempre.

- Es simbólico mujer, es un bonito acto, no se, a mi me parece muy bonito por eso te he traído aquí, siento que no sea de tu agrado.

- No digas eso, esta tarde ha sido fantástica, inmejorable, pero nunca he salido con nadie ni he amado a nadie, no se que es lo que puede sentir una persona al poner un candado y tirar la llave, ni nada de eso, me parece absurdo.

- Nunca has besado ni salido con nadie?

- No nunca.

- Y no te pica la curiosidad por saber que es lo que se siente al querer a alguien o besar...

- Si, pero no se que es lo que se siente, nunca he sentido eso por nadie. Es algo que nunca meha sido necesario, dejar que tu felicidad dependa de otra persona es algo que no esta en mis planes de momento aunque se que llegará un momento que no podré evitarlo.

- Pues es como que el mundo se para cuando estas a su lado, te toca y el corazón se acelera, no puedes parar de mirar a esa persona, te sientes bien con ella, agusto, puedes ser tu y entonces, cuando sientes todo eso en una misma persona, sabes que estas enamorado de ella.

En ese momento nos quedamos los dos callados, en la barandilla del punte mirándonos a los ojos. Esos ojos verdes que tiene, era embaucadores, no podía dejar dé mirarlos. Él se acerco a mi y me paso sus brazos por detrás cojiendome de la cintura y empujándome hacia él y sin darme apenas cuenta, nos estábamos besando.

Aun no existen las palabras exactas para describir ese momento, Leo, el chico más guapo, por así decirlo, de mi instituto quiso dar un paseo por Roma conmigo a solas, luego me llevo por sitios preciosos y al atardecer me beso en el puente donde los enamorados van a poner su candadito para estar siempre juntos.

Al dejar de besarme supuse que fue un acto involuntario y que no queria nada conmigo que en un momento o en otro me lo diria, pero el caso es que por fin me habian dado mi primer beso y creo que estaba empezando a sentir por un chico eso que llaman amor. Leo se echo las manos a la cabeza y se puso a mirar por el puente hacia abajo, mirando el agua.

- Sabes que pasa Adele?

- Que nos acabamos de besar?

- Si, y que me ha gustado y me ha salido solo. Adele, nunca me habia sentido así con ninguna de todas las chicas con la que he salido, contigo puedo ser yo mismo sin preocuparme por que vaya a contarle a sus amigas o si luego me tacahara decabron todo el instituto. Te da igual en la escala social en la que estas y simplemente te preocupas de las cosas importantes, eres muy fria pero yo se que tienes un corazón enorme y joder, creo que me estoy enamorando de ti Adele Andreu.

Me quede perpleja ante esa declaración de Leo, no me salian las palabras y el me miraba con los ojos humedecidos y con cara de angustia esperando mi respuesta, pero no me salian las palabras así que decidi ponerme frente a él y colocar mis brazos por encima de su cuello, me quede unos segundos mirandole a los ojos y le volvi a besar. No pude decir ni una palabra pero supongo que le deje claro que yo tambien empezaba a estar enamorada de él.

La vida de una chica cualquieraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora