Wedding?! || Jennie y tú

Capítulo 09

Todo iba de maravilla. La villa había sido decorada especialmente bajo la supervisión de T/n.
Luego de una larga conversación con Jennie, ella se encargó de supervisar hasta el mínimo detalle para que se cumpla la boda de ensueño de Jennie. Por lo menos quería cumplir con ese deseo.

Ahora T/n se encontraba dentro de la villa terminando de arreglarse.
La ceremonia sólo contaba con la presencia de las personas más cercanas e importantes para Jennie y ella.
En el caso de su futura esposa eran un poco más en cuanto a cantidad. Mientras que para T/n solo era su padre y hermana.

La presencia de sus guardaespaldas era lo más crucial. Al ser un amplio personal, se encargó de derivar algunos para escoltar a cada uno de los invitados y así evitar a los entrometidos paparazzis.

— ¿Ya estás lista, cariño? —su padre había entrado a la habitación.

— Yep. —se volteó— ¿Qué opinas?

El mayor sonrió con dulzura y se acercó a acomodar la corbata de su hija. Por petición propia, está vez no utilizaría un vestido. Sino un traje blanco que le acentuaba muy bien.

— Te ves tan hermosa y madura, hija. —la sostuvo de los hombros— Estoy tan orgulloso de ti.

La menor sonrió dulcemente y lo abrazó.

— Gracias por todo lo que estás haciendo por mí, papá. A pesar de-

— No lo menciones. —la interrumpió— Tú eres mi hija y daría todo lo que tengo por verte feliz.

T/n asintió y miró por su hombro. Esperaba la presencia de su hermana.

— ¿Y unnie?

La sonrisa de su padre se redujo al mencionarla.

— Le entregué la invitación, tal como me pediste. Pero, ella...

T/n suspiró con tristeza y asintió. Habían pasado varios años desde su último encuentro y aunque su última disputa no terminó de la mejor manera, esperaba que ya todo estuviera en el pasado y su hermana la acompañara. Pero al parecer no sería así.

— No importa... No estoy molesta con ella. Comprendo su posición hacia mí... —murmuró.

Chunghee se sintió mal al ver los ánimos decaídos de su hija. No planeaba ocultar la verdad, de hecho su esposa y él lo iban a confesar días antes de la tragedia. Pero al parecer aún había resentimiento por parte de Hani.

— La próxima vez que la vea hablaré con ella. Las cosas entre ustedes no pueden seguir así por algo que tu madre y yo teníamos responsabilidad. Son hermanas y deben estar la una para la otra.

— Uno de estos días iré a verla. —sonrió T/n— Extraño a mi unnie.

— Que así sea, hija. —suspiró y vió su reloj— Ya es hora. ¿Lista?

T/n asintió y tomó su brazo.

— Vamos.

~•~

T/n y su padre ya se encontraban en el patio donde se llevaría a cabo la ceremonia.
Saludaron a las personas que asistieron y su padre se sentó al lado de HyunSuk. Después de todo, él tenía que estar presente para su futura mina de oro.

T/n se encontraba al lado de juez que las casaría, por suerte era un conocido de su padre. Así que no habría problema.

De repente, la marcha nupcial empezó a sonar. Todos se levantaron y dirigieron sus miradas hacia la parte trasera.

Jennie se iba acercando con una amplia sonrisa. Su madre estaba a su lado, mientras que Jisoo, Rosé y Lisa iban detrás como sus damas de honor.

Para T/n parecía como todo desaparecía a excepción de Jennie. Mantenía su vista fija en ella. Sentía una especie de cosquilleo en sus manos y estómago.
Su rostro se sentía caliente al igual que sus orejas.
Era una extraña pero cálida sensación.

Solo podía mantener la vista en lo hermosa que se veía Jennie.
Era aún más bella de lo normal y aquella sonrisa hacia que todo su mundo se viniera abajo.

No lo entendía, pero disfrutaría cada segundo de aquel momento.

— T/n, espero que cuides, ames y respetes a mi hija. Ella es lo más preciado para mí. No permitas que sufra y mucho menos la lastimes. —habló la madre de Jennie.

T/n asintió y tomó la mano de su prometida.

— Cumpliré mis promesas y honraré a Jennie por el resto de mis días. La amaré con todo mi ser. —afirmó.

La mayor sonrió y fue a sentarse al lado del padre de T/n.

Jennie se sentía nerviosa. Sabía que las palabras de T/n solo eran por 2 años. Pero muy en el fondo, tenía la pequeña esperanza de que ese matrimonio no terminara jamás.

— Te ves hermosa, Jennie. —murmuró T/n a su lado mientras el juez hablaba— Eres lo más bello y precioso que he visto.

La nombrada se sonrojó levemente.

— Tú también te ves muy bien, T/n. —murmuró igual de bajo.

La ceremonia continuó de manera normal.
Y el tan esperado momento ya había llegado.

Jennie y T/n ya habían firmado el acta de su matrimonio. Solo faltaban las palabras del juez.

— Por el poder que me confieren, yo las declaró esposas. Pueden besarse. —sonrió el hombre.

Para ellas era un momento mágico y único.
¿Un contrato? Ya no se trataba de eso. Había un sentimiento más fuerte del cual se dejaron llevar.

Al unir sus labios por primera vez, sintieron miles de sensaciones. Era tan suave y cálido que no podían describirlo.
Lo que sí, es que fue lo mejor para ellas.

Sus invitados aplaudieron efusivamente ante tal momento.

Por fin era un hecho, Kim Jennie y Ahn T/n se habían casado.

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