Era mi libro de dibujos favoritos

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Capítulo XIX
Relato Escrito por María L Rosas

Había pasado tres días desde lo sucedido en la biblioteca. Lizzy no podía dejar de pensar en Charlotte, ella no estaba siendo educada, y lo peor; no sabía cuándo iba a comenzar a estudiar. Lizzy se decía así misma; "Yo a los 7 años ya sabía leer, también escribía, y me gustaba leer el periódico a escondidas de mi padre. La lectura siempre ha sido mi pasión."

Lizzy iba a la biblioteca para ver a Charlotte. Después del desayuno; se sentaba en la silla y detrás de ella, estaba la niña allí sentada, concentrada en su mundo. Lizzy le preguntó;
"¿Qué estás viendo?"
"Es un dibujo en blanco y negro de una Señora. Ella está bien vestida, va caminando con su hija en el centro de Londres" respondía Charlotte.
"¿Y que más vez?"
"Veo luces encendidas, tiendas abiertas, también gente que van caminando en medio de la noche" "¡Muy bien!; ¿Están hablando la mamá y la hija?" "Si, están hablando. Quizás la mamá le está diciendo que es tarde, hace frío, y es mejor ir a la casa. Pero la hija no quiere irse, las tiendas aún están abiertas para ver vestidos y sombreros con cintas de colores pasteles. Ella está pensando en el vestido para su cumpleaños."
"¡Wow, cuanta imaginación tienes! Tienes algo especial; puedes relatar solo con ver una ilustración. Al no conocer las letras; tú imaginación se ha desarrollado de otra hermosa forma. Déjame ver. ¿Puedo ver el libro?"
"Si, tómalo"
"Este libro no es para tu edad. Es para las personas adultas. Deberíamos preguntarle a el Sr. Albert donde se encuentran los libros para niños"
"¡De aventuras!, me encantan las aventuras"
"Si ya lo sé," decía Lizzy con una sonrisa. "Entonces le preguntaremos al Sr. Albert. Creo que tuvo que salir, regresará pronto. Pero si quieres; puedo leer el libro de las aventuras en el mar que tenías el otro día. ¿Quieres?"

Y los pequeños ojos se iluminaron de alegría, e inmediatamente respondió;
"Si por favor Sra. Darcy." Lizzy inclinó su cabeza, dándole una respuesta positiva, y con una sonrisa le dijo; "Ok, entonces quédate allí sentada. Espero con mi lectura puedes imaginar la historia y disfrutar de las palabras..."

Lizzy abrió el libro y empezó a leer en voz alta a la niña...
"En la mañana; el sol estaba calentando el piso del barco del capitán Williams Front..."

Durante la lectura; la imaginación de la niña volaba al infinito mientras veía el gran ventanal. El azul del cielo se asomaba; dibujando el mar, que movía de arriba abajo a los barcos con la ayuda de las inmensas olas. Los soldados ingleses vestidos con su majestuoso uniforme; se preparaban para una gran batalla. Disparaban cañones por todos lados, y por todos los ángulos, muchos de esos cañones cayeron en lo profundo mar, despertando por desgracias a las más horrendas, y molestas criaturas. Animales enormes que podían salir del mar y comerse 10 barcos sin pestañear...

Después de una hora de lectura; al terminar el cuento; Lizzy pensó que Charlotte se había quedado dormida. Ella volteó su cara para verla, y se dio cuenta que no había sido así. Charlotte estuvo sentada viendo al ventanal mientras escuchaba detalladamente el cuento. Lizzy se levantó y se sentó frente a ella en el suelo, notando en sus ojos que estaban llenos de lágrimas. Charlotte se arrodilló y en segundos, los brazos de ella se colgaron en los hombros de Lizzy, y después dijo;
"Muchas Gracias Sra. Darcy" con su voz de niña entrecortada por las emociones que la embargaban.

"Era mi libro de dibujos favoritos, ahora usted lo convirtió en mi libro favorito. ¡Fue mágico todo lo que sentí! Muchas Gracias."

Después ella se levantó, y salió corriendo de la biblioteca, quizás a ver a su mamá para la contarle lo vivido. Lizzy, por el contrario; se quedó sentada en el piso, viendo como la niña se iba corriendo, y desapareciendo en la puerta. Ella quedó con el libro cerrado en su mano izquierda, y la otra mano se movió inmediatamente a posarse sobre sus labios, dejando al corazón arrugado, y con los ojos aguados a punto de reventarse con miles de lágrimas... al rato se levantó, aún con los sentimientos encontrados de alegría, dolor, y hasta con frustración. Se estaba limpiando un poco la cara, cuando el Sr. Albert entró a la biblioteca trayendo con él, la información que Lizzy le había solicitado.

Pensamiento y Corazón / Continuación de Orgullo y Prejuicio.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora