fui a buscar el vestido que me estaba haciendo doña Mirta, un color rojo con trozos de tela negra que salían del corsé y unos adornos plateados debajo el escote, en verdad mis padres no iban a reconocerme, me compre un collar con un colgante muy lindo tenia forma de flor, un jazmín me dijo la vendedora, pero ahora haber comprado este nuevo vestido y estas cosas ya no tiene sentido, quería conocerlo más, saber algunas cosas, preguntarle si tenia libros que me vendiera, ya que mi padre me dijo que era un comerciante salgo de la tienda un poco desilusionada con las cosas nuevas, al voltearme para marcharme a mi casa choco con algo duro, creí que era una puerta ya me veía en el suelo pero no, unas manos me agarraban de la cintura levanto la vista, sonrojada vi que era él, sus ojos café que me miraban divertido por lo que acababa de suceder
- Perdón señor no lo vi
- risita- eso es seguro señorita Karina, tanto tiempo ¿Cómo ha estado?
- Bien, bien sabe señor Belfegor, le agradezco
- ¿por qué?
- Mm, no sé, por no dejarme caer, no dejar que se ensuciaran mis cosas.
- bien, de nada entonces, disculpe mi atrevimiento jovencita ¿le gustaría tomar una tasa de té conmigo?
- claro, perdón, digo si sería un placer, ¿Cuándo y a qué hora?
- Si quiere nos encontramos a la hora del té en la cafetería de enfrente, o donde a usted mas le guste
- La cafetería suena bien, nos vemos a las 18:00 hs -al llegar encuentro a mi madre llorando desconsoladamente y mi padre estaba furioso en su estudio tenía mucha curiosidad por saber que estaba pasando, pero solo recibí una mirada enojada y una respuesta muy cortante del hombre que caminaba furioso a la puerta -cuando todos estuviéramos reunidos nos iban a contar- casi cerca del mediodía cuando mi madre nos llamo a todos
- Niñas su tía está muy enferma los médicos le dijeron que tenia pocos días de vida, con su padre hemos decidido ir a saludarla y darles el pésame a la familia, también decidimos que Karina y celeste se van a quedar a cuidar la casa las demás van con nosotras, espero no escuchar ninguna queja
- Pero madre ¿por qué la fenómeno se queda?
- ¿Por qué eres así marta? ¿Qué te ha hecho tu hermana para que la odies tanto?
- Es que por culpa de ella, todos creen que somos unos fenómenos, algunos vecinos nos miran raro
- un grito -córtala jovencita no estas en posición de reclamar nada de nada vas a ir con nosotros y no tan solo eso también vas a cuidar a tu tía en sus últimos días, que eso te sirva para que controles la forma de hablarle a tu hermana y espero que con esto aprendas modales porque te hace falta
- ¿Pero madre?
- Pero nada jovencita, espero que todo este preparado ya que en una hora nos vamos
- ¡Madre!, madre espera yo quería contarte algo
- Después si, después
-¿Pero?
Después de eso prepararon las cosas que iban a llevar a tan largo viaje con mi hermana nos miramos extrañadas sin saber por qué nos dejaron a nosotras y no a las demás ya que son las mas grandes, en eso una voz de fondo nos llamó era mi padre nos explicó por qué nos dejaban a nosotras y no a las otras, resulta que Luisa y Yesica estaban en malos pasos por seguir a la más grande, quien diría que la del medio estaba embarazada, nos contó que iba a dejarla con una tía allá para que la gente del pueblo no ande hablando solo nos miramos con celeste sin poder creer lo que estábamos escuchando
- ¿Hija que nos querías contar?
- Si Karina habla
- Tengo una cita con aquel hombre que les conté ante
- Pórtate bien hija, no vaya hacer que también te entregues antes del casamiento
- No, no padre nos estamos conociendo, él es una persona muy respetuosa y no haría nada para perjudicarme voy con mi hermana si tu así lo decides.
- No hace falta solo cuídate, confiamos en ti jovencita dile que lo quiero conocer cuando vuelva de la casa de tus tías. celeste te encargo a tu hermana
- claro padre así le diré, gracias, gracias
-Yo la voy a cuidar padre
-Lo se cariño es por eso que te la confiamos a ti. Nos vemos niñas -las dos dijimos al mismo tiempo-
- ya no somos niñas padre- solo nos miro, nos guiño un ojo y se marcho, el viaje a la casa de la abuela era alejado del pueblo se iban de día porque necesitaban llegar a la parte sur que estaba fuera de las murallas, no tan solo era un viaje largo también era muy peligro, mi preocupación ocupaba todos mis pensamiento hasta que la voz de celeste me hizo acordad la cita de esa tarde
Entrar a casa y terminamos de comer, nos pusimos hablar con cele nunca me di cuenta lo parecida que somos, a ella también le gusta leer, estar en la naturaleza y me dijo en forma confidencial que Marta ya se había acostado con ese noviecito que tenia y por eso la habían dejado sin poder creer lo que escuchaba ya que era la primera vez en hablar tanto con una de ellas sin pelear, mientras las otras no estén cada día iba hacer mejor.
Me pregunto sobre la cita le respondí que era en la cafetería de doña norma, ella hizo una cara graciosa y me remato con un chiste -ahora si todos se van a enterar- terminando de hacer ese comentario nos reímos por un rato hasta que tome valor de pedirle ayuda con mi vestido nuevo, sorprendida por lo que acabo de decir solo asintió con la cabeza.
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Rechazo
Fantasíatodo comenzó cuando rechazaron al hombre más poderoso de la tierra. La tragedia para los humanos se despertó después de eso. cuanto tiempo vamos a tener que cargar con la maldición, alguna persona será capaz de romperla.