Capitulo 1

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Cuando Wei WuXian abrió los ojos, por un segundo se sintió confundido.

Estaba en una habitación que le era tan familiar y, a la vez, desconocida. Era un entorno que estaba enterrado en lo profundo de su memoria. Él no conseguía recordar.

Al principio se preocupó de no ver a su esposo a su lado. La cama estaba fría y era demasiado pequeña. Aun aturdido por el sueño, no se dio cuenta de este hecho, pero cuando vio que ya el sol había salido, se desinfló. Lan WangJi probablemente se había levantado hace mucho ¿Por qué Wei WuXian había despertado? Estaba seguro de que aún no era su hora de despertar.

Entonces un quejido del otro lado de la habitación lo estremeció. Wei WuXian se puso de pie un salto, dispuesto a tomar a Chenqing, pero se dio cuenta de que la habitación no tenía nada de las cosas con las que estaba familiarizado durante años de convivencia con su marido.

Sintió el pánico subir por su garganta cuando un Jiang Cheng demasiado joven le devolvió la mirada en la otra cama que estaba al otro lado de la habitación. Parecía igual de sorprendido que él. Jiang Cheng estaba congelado mientras lo miraba.

—¿Wei WuXian? —Masculló. —¿Qué...? ¿Cómo...? ¿P-Por qué estás en tu antiguo cuerpo? ¿Dónde...?

Era obvio que Jiang Cheng también estaba aturdido, porque la pregunta que hizo no debió hacerse tan fácilmente.

Wei WuXian se estremeció, captando sus palabras.

Corrió fuera de la habitación, tropezando y cayendo. Se levantó tan rápido que sintió como todo daba vueltas, pero eso no importaba. Wei Ying sabía exactamente donde estaba luego de ver a Jiang Cheng. 

Necesitaba a su esposo.

Él corrió, los discípulos Lan gritaron algo que él no entendió ni le importaba entender en ese momento. Aun en sus túnicas para dormir, Wei WuXian no se detuvo ni un segundo, corriendo entre el entorno desconocido y a la vez, familiar.

Necesitaba llegar con su esposo.

Lan WangJi apareció en su campo de visión, caminando tan rápido que casi parecía que corría. Pero en Receso de las nubes no se podía correr y Lan WangJi nunca rompía las reglas... A menos que fuera por su esposo.

Con una expresión complicada en el rostro, Lan WangJi miró a los lados, buscando algo. Cuando sus miradas se conectaron, Wei Ying supo. Su esposo también estaba aquí.

Él se lanzó a los brazos de su marido, desesperado por ser consolado y fue envuelto en un cálido y reconfortante abrazo. Él cuerpo de su marido era más pequeño, menos musculoso, pero su aroma fue suficiente para calmar su agitado corazón.

—Wei Ying — Murmuró Lan WangJi contra su cabello —Wei Ying.

Ambos se abrazaron en el suelo. Lan WangJi lo envolvió protectoramente mientras le dirigía una mirada a los discípulos jóvenes que lo siguieron. Los discípulos Lan tenían muchas preguntas en sus ojos cuando miraron al segundo joven maestro, pero nadie se atrevió a abrir la boca cuando los ojos dorados de Lan WangJi dieron una orden silenciosa. Los discípulos se miraron entre ellos y se retiraron en silencio luego de hacer una reverencia respetuosa. Rápidamente, se quedaron solo.

—Lan Zhan... Lan Zhan creo que...

Wei Ying se estremeció cuando sintió a otra persona cerca.

Lan WangJi miró a Jiang Cheng, quién tenía una expresión llena de ira en su rostro juvenil. Aun en sus túnicas de dormir, había seguido a Wei WuXian por todo el camino hasta allí. Lan WangJi enterró el rostro de su esposo en su pecho mientras le dirigía una mirada desafiante a Jiang Cheng.

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