Capítulo 2; Último Intento

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—Bien, ¡ahí esta nuestro objetivo! —Exclamó en un susurro Nakamura.

La rubia junto a su fiel compañero pelirrojo y su "cliente" se encontraban escondidos detras de un arbusto.

Observaban atentos todos los movimientos del joven azulino, el cuál estaba saliendo para almorzar.

parece que Karma y Kayano estan ocupados— Pensó algo desanimado de no encontrar a sus mejores amigos.

Siguió caminando sintiendo una ligera incomodidad. Algo no andaba bien.

Miro su obento, no se veia muy apetecible. Pues aunque lo hizo él mismo, fue hecho a las prisas.

Debido a que su madre había dejado de cocinarle por un desacuerdo desde hace más de una semana, tuvo que arreglarselas.

Soltó un suspiro deprimido, su mente comenzaba a llenarse de pensamientos oscuros. Porsupuesto no dejó que esto se reflejara en su apacible rostro. Acostumbrado a esconder sus preocupaciones.

—¡Es tu momento Kayano! ¡Invitalo a almorzar! — Exclamó la rubia volteandose para empujar a la más pequeña. El pelirrojo hizo lo mismo.

—¡E-espera! N-nakamura, no puedo hacerlo y-yo —

—¡Vamos!¡Vamos! —

—¡Nakamura! ¡Karma! —

La pequeña de pelo verde estaba a punte de ser tirada fuera del arbusto cuando de repente unas voces los interrumpieron.

—¡Ah!¡Nagisa kun! Perdona que te moleste en la hora del almuerzo, pero ¿podrías ayudarme a plantar esto? — Era Yada, quien cargaba unas bolsas con semilla.

El joven  de azul se acercó rápidamente soltando un amable "¡Claro!"característico de él.

Su almuerzo puede esperar.

Karma y Nakamura hicieron un puchero mirando la situación. Habían perdido una oportunidad.

Kayano solo suspiró, mirando desganada sus dos bentos los cuales preparo con mucho esfuerzo.

aún me falta valorPensó la más pequeña


...

—¡Eso es todo! Muchas gracias Nagisa, ¡Disfruta de tu almuerzo! —Se despidió Kurahashi, quien se había unido a ellos hace un rato.

Nagisa se despidió con un gesto de mano, observando como se alejaban.

Tomó su comida y se dirigió a uno de los árboles que le parecían más cómodos para sentarse.

¿Por cuanto tiempo más estaran siguiendome? — Se preguntó con una gotita de sudor en la cien.

Hace ya unos minutos que había distinguido la presencia y a los 3 pares de ojos siguiendolo.

—¡Kayano! Es tu oportunidad, no la desaproveches de nuevo—

La peliverde asintió con entusiasmo, tenía las mejillas sonrojadas.

Karma fotografió eso.

La joven se levantó y fingiendo seguridad se acercó al peliazul.

—¿mm? — Nagisa la miro desde abajo—Hola kayano.

Tiene algo que mostrarme, ¿quizas?— Intuyo

—¡Hola Nagisa! Y-yo solo quería saber sí .. —

Ambos fueron interrumpidos por el sonido del timbre, anunciando el final de la hora del amuerzo.

Ambos suspiraron con cansancio.

Ninguno de los dos pudo comer.

Nagisa estaba bien con eso, de todas formas no tenía tanto apetito.

Mientras que Kayano estaba más deprimida que antes. Otro intento Fallido.

—Parece que ya es hora de volver, ¿vamos? —Pregunto con su típica sonrisa.

La contraria asintió.

Las dos cabezas detras de esto solo suspiraron con frustración.

Y es así, como con este último intento después de miles, es como ambos llegaron a la conclusión de necesitar métodos más extremos.

15/12/23

Químicos De Amor ¦ Karmagisa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora