¿¡Keith es bebé!? [KLANCE]

Capítulo 3.

❀Conociéndolo❀

Pequeño aviso:

En ésta historia, Keith, Lance y Hunk iban a la misma clase desde los 5 años y Keith sigue teniendo 6 años en este capítulo.

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"¡La madre que me-! ¡Pidge!" Gritó Lance.

"Bueno, bueno. Ya está bien". Tranquilizó Allura."Hay que despertar a Keith. Vamos Keith... Tienes que despertarte..."

*POV. Keith*

"No, cinco minutos más papá..."

Sin embargo, me di cuenta de que esa voz era de chica... ¡Ese no era mi padre!

"¿¡Dónde estoy!?"

Vi a una chica de piel morena, cabello plateado y orejas puntiagudas; un hombre musculado, con un mechón blanco y el resto del pelo oscuro; una persona que, en verdad, no sabría decir si era chico o chica; a un señor con el cabello naranja, que no sabría decir si era natural o teñido y con las orejas puntiagudas como aquella chica... Y por último vi a dos chicos muy parecidos a Lance y a su mejor amigo Hunk.

No eran sus padres porque a ellos les había visto en el colegio y eran más mayores. ¿Serían sus hermanos? Lance dijo que tenía un montón...

*POV. Normal*

"...¿Sois hermanos de Lance y Hunk?" preguntó el niño."Es que os parecéis mucho. Oh, no. ¿¡E-eso significa que Lance está aquí!? ¡Y yo he dormido con Lucifer!"

Con esas frases dejo a todos descolocados. Y lo que pasa es que el pequeño Keith tenía un gran crush en Lance desde los seis años.

"Amm... ¿Quién es Lucifer?" questionó Pidge, que seguía anotando cosas sin parar.

"Mi hipopótamo. ¡Pero eso ahora no es importante!" El niño salió de un salto de la cuna y fue junto al supuesto "hermano" de Lance. "Necesito saber dónde está Lance. ¿E-está aquí?"

Lance no sabía que decir. Acababa de descubrir que a Keith le importaba muchísimo su opinión, al parecer.

Miró a los demás, preguntando silenciosamente si debería decirle que estaba en el futuro o no. El resto del grupo asintió como señal de que no importaba que se lo dijera.

"Verás, Keith... Estás en el futuro."

"Ja, ja. Qué risa. ¿Dónde está Lance?"

"Es cierto". Dijo la princesa.

"¡Eso es imposible!"

"No lo es. Yo soy Lance."

Ahora. ¿Os sabéis esto de: xxxx. exe ha dejado de funcionar? Pues eso le pasó a Keith. Se creyó completamente lo que le dijo el cubano. Porque un niño de seis años era muy fácil de convencer.

"¿¡¿¡TÚ ERES LANCE!?!? ¡Oh, no!"

Por culpa del estrés, Keith empezó a llorar mientras se iba poniendo rojo.

"He d-dicho muchas cosas... V-vas a pensar q-que soy ra-raro...Pe-perdón."

"Hey, de eso nada. No te preocupes, ¿sí?" aunque Lance intentaba procesar la información que le acababan de proporcionar. Bueno, al igual que todos.

Porque que tu amigo el serio, antipático y gruñón se viera completamente nervioso al hablar con su "rival" no era algo que se viera todos los días.