Mi Suerte Eres Tú

11 - La cita

Loli se despertó temprano al día siguiente porque había planeado llevar a los niños y a Mariana para conocer un poco de Miami y también disfrutar un poco de la playa. Los niños estaban tan emocionados que ni siquiera se quejaron de levantarse temprano el sábado solo pensaban en en el paseo que harían con la madrina Loli. Todos se vistieron, tomaron café, y antes de las 10: 00 de la mañana ya estaban caminando por las calles de la ciudad. Después de horas de caminata se detuvieron para almorzar y cuando descansaron fueron a la playa y allí Sam y Nicky estaban aún más felices. Loli y Mariana se sentaron a tomar el sol mientras los niños se divertían en el agua.

Mariana: Ay chula, qué increíble paseo. Les encantó y a mí también.

Loli: Me da mucho gusto, chulita . Miami es increíble, y es tan agradable poder respirar un aire diferente, ¿sabes? Los Ángeles es mi hogar, pero cada vez que voy en los lugares me recuerdo de... - ella se detuvo -bueno, ya sabes.

Mariana: Pueste digo que fue una gran idea que aceptaras esta propuesta de venir a trabajar aquí.

Loli: Sí - suspiró.

Colgó su cabeza en el hombro de Mariana y se quedó allí durante minutos. Después de un tiempo decidieron meterse en el agua y se divirtieron junto a Sam y Nicky hasta que se puso el sol. Cansados se sentaron y comieron unos bocadillos que Mariana había preparado antes de salir de la casa y así vieron la puesta de sol. La noche que Loli había planeado llevar a Nicky a un parque de atracciones cercano, así que fueron directamente a la casa después de la playa para vestirse, a Sam no le gustaban mucho los parques, así que optó por quedarse en casa con Mariana, que estaba bastante cansada. Tan pronto como estuvieron listos, Loli y Nicky se fueron al parque y se quedaron allí hasta las primeras horas, el niño se quedó encantado con la cantidad de atraciones que poseía y estuvo en casi todos hasta que se cansó.

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Nicky: ¡Madrina, estoy bien cansado!

Loli: Pues claro Nickytron, usaste casi todos las atracciones - rió

Sí es cierto - gracias por traerme aquí, madrina. Te amo- dijo la abrazando.

Loli: De nada chulo. Te amo -  dijo, besando a Nicky en la cabeza.

Loli compró una comida para los dos y después de comer regresaron a la casa y como Nicky estaba cansado, pronto se duchó y se quedó dormido. Loli luego se duchó y se acostó junto a Mariana para ver su telenovela favorita.  Hacian todo el tiempo, era una de varias cosas que las unían. Ya eran más de las 23: 00 horas cuando sonó el teléfono de Loli y era un mensaje de Rafael.

Rafael: Espero que hayas tenido un sábado maravilloso. Estoy enviando este mensaje para confirmar que mañana sigue en pie.

Loli: Espero que la tuya también lo haya sido. Por mí está súper confirmado.

Rafael: Bueno. Nos vemos a las 18:30. Que duermas bien.

Loli: Arra. Que duermas bien, también. - sonrió mientras escribía.

Mariana miró a Loli y rió.

Mariana: Por Tu sonrisa.. es una mensaje de Rafael.

Loli: Sí, es él.... Lo invité a salir mañana y luego a cenar aquí en casa.

Mariana: ¿En sério? Quiero saber todo después - dijo emocionada - . Así es chulita, disfruta porque Rafael es maravilloso. ¿No tiene un hermano?

Loli: Qué payasoa eres.

Se rieron y luego volvieron a ver la telenovela hasta que se quedaron dormidas.

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El clima de la mañana siguiente era de tristeza, porque Mariana y los niños ya estaban a punto de irse así que se quedaron juntos un rato antes de despedirse. Tomaron un café fuerte y hablaron de lo maravilloso que había sido el fin de semana, luego Loli los llevó al aeropuerto y unas dos horas más tarde se habían ido. Luego se fue a casa y arregló el lío y luego se tiró en el sofá hasta que llegó el momento de prepararse para salir con Rafael. Ella ya había salido con varios hombres, pero ninguno la puso nerviosa antes de que una cita como Rafael la puso, se preguntó por qué el la hacia aí y la intrigaba, pero en el fondo le gustaba. Cuando eran las 18:30 sonó la campana y era Rafel como él había dispuesto.

Loli: Hola-sonrió- Te vees super guapo.

Rafael: Hola - sonrió - Tú estás mucho más. - Dije mirando hacia arriba y hacia abajo.

Loli: ¿Nos vamos?

Rafael: Vamonos. 

Con los brazos entrelazados caminaban lentamente hacia el bar, estaba tan cerca que no necesitaban ir en coche. En el camino hablaron de cómo había sido el fin de semana para los dos. Cuando llegaron al bar pidieron algo de beber y se sentaron en un lugar más relajado y continuaron hablando. Hablaban más de su vida, de lo que les gustaba, de lo que no les gustaba, de los viajes que les gustaría hacer, de la familia. Era evidente lo bien que se llevaban y cómo fluía la conversación cuando estaban juntos. Unos pocos se estaban conociendo más. Cuando terminó el show decidieron ir a la casa de Loli antes de que fuera demasiado tarde porque al día siguiente tenían que trabajar.

Loli: Mejor nos vamos, ¿verdad?

Rafael: ¡Sí! Pagaré la cuenta y vámonos.

Loli: Nada de eso te invité yo pago, además tú pagaste la última vez.

Rafael: Repartimos entonces. - rió.

Loli estuvo de acuerdo y después de pagar la cuenta estaban caminando a la casa de Loli. Llegaron y llegada  bebiendo un poco más de tequila mientras comían algunos bocadillos que ella había comprado antes. Se rieron toda la noche y platicaron más sobre otras cosas. El clima era super agradable.

Rafael: Eres muy divertida, Dolores. Nunca lo imaginé.

Loli: Tú no ha visto nada todavía-  dijo la con mirada fija en él.

Rafael: ¿Ah sí? Estoy loco por ver.

Se acercaron y sin demora comenzaron un largo beso mientras se acaciriaban. Rafael dejó  la boca de Loli y bajó hasta el escote de su blusa y repartió varios besos dejándola completamente sin acción. Su cuerpo se estremeció en la misma hora, y ella suspiró todo el tiempo. Finalmente regresaron a los besos y cuando Rafael levantó la falda de Loli fueron interrumpidos por el toque de su teléfono. Era Jess llamando. Contestó el teléfono y habló con Jess durante unos minutos.

Loli: Bueno.. ya es tarde. Es mejor ir.

Rafael: Perdóname por la llamada.

Loli: Todo  bien. - Dije mientras lo llevaba hasta a la puerta.

Rafael: Bueno, te veo, mañana. Y... otro día terminamos lo que empezamos aquí, por supuesto, si  así quieres -  dijo muy bajo en el oído de Loli.

Ella se estremeció de los pies a la cabeza y solo consiguió sonreír pero fue suficiente para que Rafael compriendera que ella sí quería. Le dieron un besito y luego Rafael se fue, en el sofá Loli se reía sola pensando en la maravillosa noche que tuvo. Hacía tiempo que no se divertía así. Subió a la habitación y antes de irse a dormir dejó un mensaje para Mariana dejándole curiosidad por lo que había pasado en la cita. Murió de risa y luego terminó quedándose dormida, ya estaba ansiosa por continuar lo que había pasado en su habitación esa noche.