La escuela en aquel día había terminado antes, solo porque habían reportado una tormenta llegar a toda la península. Luego de que a todos le dieran las medidas de precaución que debíamos de tomar en casa. Les dejaron ir.
El cielo estaba totalmente gris y había un viento frío que decía lluvia por donde quiera que pasara.
SooJin decidió salir lo más rápido que podía para llegar a su casa. Claro luego de amarrar al bebé a su cuerpo con el abrigo que había estirado y empezar a correr a la parada.
Estaba meditando lo que haría al regresar. Tenía tarea de ingles, y de historia. Contando a que tenía que hacer una diapositiva y la reseña de un libro que no había ni empezado. La única solución de aquella chica era simplemente una: faltar a la escuela ese día.
— ¡SOO JIN! — Se escuchó el grito detrás de ella. Quien casi se cae de cara por aquel llamado. Volteo. Mirando a aquel chico acercarse a ella.
— ¡Me asustaste tonto! — Se quejó mientras que golpeaba el pecho de el alto de labios bonitos.
— Perdón. — Se disculpó pasando a caminar a su lado. — ¿A dónde ibas?
— A casa. — SooJin se rió pensando que aquella pregunta no tenía sentido. — Como todos.
— No todos. — Respondió SeokJin entrando las manos en sus bolsillos.
— ¿No? ¿Qué no ves el clima? — Preguntó señalando la atmósfera pero SeokJin se rió.
— ¡Es perfecta! — Contestó y miro al cielo cerrando sus ojos.
— ¿Por qué? — Preguntó curiosa.
— Porqué va a llover. Es perfecto. Es una descarga. Haces todo lo que quieres hacer mientras llueves. Te descargas. — SeokJin miro a la chica.
— Estas diciendo... ¿que vas a descargarte cuando esté lloviendo? — SooJin junto sus cejas.
— Aja. ¿Quieres venir? — SeokJin la invitó sin rodeos.
SooJin le gustaba la idea. Pero estaba conciente de que no podía hacerlo aunque lo quisiera. Porque uno, esta Gook. Y dejarlo solo es la peor cosa que podría hacer. También de que debía de pasar por su hermano menor.
— Aceptaré la oferta en otro día de lluvia. — Le respondió.
— ¿Me acabas de invitar a salir? — SeokJin sonrió irónico.
— Tu lo hiciste primero. — Se encogió de hombros. — Hablamos luego, Jinnie.
Respondió dando la vuelta luego de darle una sonrisa e irse caminando a la parada del autobús. SeokJin quedo mirándola aún con una sonrisa auténtica en la cara.
— ¿A dónde demonios estás mirando? — Se espantó al ver a Jimin llegar a su lado bebiendo una lata de soda.
— Imbécil, me asustaste. — Dijo llevándose una mano al pecho y luego empezando a sonreír una vez más.
— ¿Qué contigo? — Preguntó Jimin tirando una sonrisa de burla.
— ¿Uh? Nada... — Respondió SeokJin estirando los brazos. — ¿No crees que va a llover?
— Si, eso dijeron en el clima... — Le respondió Jimin girando los ojos. — Camina rápido antes de que empiece a llover.
— Este día es perfecto... — SeokJin dijo liberando un suspiro.
— Dile no a las drogas, Seok.
Jimin empezó a caminar hacía el objetivo al cual llegarían primero.