Una Mikaelson en Hogwarts

El conflicto

Hoy era la cena de navidad y mi prima iba a cenar con mi familia, todos tenían mucha curiosidad y era normal, ya que todos pensaban que estaba muerta, nunca pensaron en la posibilidad de que estaba viva. Amelia y yo seguimos contando lo que había pasado durante estos años, y su actitud ya era mucho mejor.

Me di cuenta que las dos habíamos cambiado mucho, ya no eramos aquellas niñas que jugaban en el jardín, habían pasado muchas cosas.

-Me encanta verte así - mencionó Cedric.

-Siempre creí que era muy afortunada por lo que me toco, mi verdadera familia solo quería utilizar me, mi madre murió por la ambición de mi familia. Pero tuve tanta suerte de que Hayley salvara mi vida, gracias a ella ahora tengo una familia y como dice Elijah: familia es poder.

-Si no hubiera sido por Hayley... yo no te hubiera conocido y eso seria horrible - mencionó Cedric abrazándome

-Lo sé... mi prima no tuvo esa suerte... les debo mucho a mis hermanos, con ellos me siento feliz. Pero siempre tuve la sensación de que me faltaba algo o alguien y ahora se que era Amelia, por fin me siento completamente feliz - dije y me lance a los brazos de Cedric

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Y ahí estábamos cenando y hablando, Ron estaba fascinado con la comida, Hermione hablaba con Elijah sobre la responsabilidad que tenía de ser prefecta, Blair hablaba con Rebekah de ropa, Harry contaba sobre los partidos de Quidditch y Noora, Cedric, Freya, Klaus, Kol, Hope, Amelia y yo lo escuchábamos.

Después de terminar de comer llegaron unas lechuzas y nos entregaron cartas, pude ver la cara alegre de Blair cuando vio que Chuck le había escrito. Me enviaron dos cartas: una de Blaise y una de Draco...

-Creo que es momento de hacer una de las tradiciones de los Mikaelson - habló Rebekah entusiasmada

-¿Qué tradición ? - preguntó Harry

-La fogata - contestó Hope contenta

-Tienen que escribir deseos y los quemamos para la suerte - mencioné

Todos ayudamos a hacer la fogata y antes de encenderla escribimos un deseo. Cuando la fogata estaba encendida, uno por uno quemamos nuestros papelitos donde escribimos nuestro deseo.

-Nosotras no teníamos tradiciones como está - mencionó Amelia

-Ahora eres una de nosotros - habló Elijah

Después de que todos se fueran y Cedric me besara para luego ir a su habitación, decidí leer mis cartas, primero leí la de Blaise y después la de Draco:

Querida Rose, se que estamos un poco distanciados pero quiero desearte una feliz navidad. Me hubiera gustado estar contigo y tu familia pero lamentablemente no fue así.

Espero que te la estes pasando muy bien, en mi casa todo esta tan aburrido... nosotros no celebramos como tu familia y esto en vez de parecer navidad parece un funeral.

Te extraño mucho Rose, odio estar así contigo, necesito escuchar tu voz, tu riza, ver esa sonrisa que hace que mis días sean mejores, te necesito tanto Rose...

Feliz Navidad, no olvides que te amo...

-Yo también te necesito tanto...

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-Gracias por invitarme - me agradeció Amelia con una sonrisa

-Era lo menos que podía hacer, ahora ya eres parte de esta loca familia - dije abrazándola