no way out † kth † #3

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— ___... — escuché la voz de Taehyung y sus pasos viniendo hacia a la sala. Parecía algo preocupado, así que apagué el televisor y volteé a verlo para ver qué sucedía — Uhm... han pasado como veinticinco minutos y el agua aún no hierve, ¿eso es normal? — «¿Qué? ¡Es obvio que eso no es normal en absoluto!»

Lo miré con una mueca de confusión y pasé por su lado para dirigirme a la cocina con él siguiéndome por atrás. 

Hace poco más de media hora atrás Taehyung me había pedido que yo le enseñase a cocinar, así que para empezar con la lección de cocina decidí enseñarle lo más fácil posible: fideos instantáneos. Parecía que me estuviese burlando de él, pero saber hacer fideos te podía salvar en cualquier momento.

Miré el agua y efectivamente, tal y como me había comentado antes el agua estaba incluso más fría de lo que ya estaba antes, así que busqué algún desperfecto en la vitrocerámica hasta que encontré el fallo, entonces, no pude evitar reírme burlona a la vez que él se acercaba para ver cuál era el problema.

— Cariño... la vitrocerámica ni siquiera está encendida.

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Después del descuido en la cocina Taehyung decidió rendirse haciendo un pequeño berrinche porque yo no paraba de mencionar lo que había sucedido, así que le enseñé a encender la vitrocerámica. Dejando a un lado aquello, le pregunté el por qué me había pedido enseñarle a "cocinar", ya que por los anteriores años tan solo se limitó a observar desde la distancia mientras me traía los ingredientes que yo usaba, de vez en cuando salía a comprar las cosas y buscaba recetas innovadoras que le parecían interesantes. «Taehyung tiene que aprender un poco, ¿no crees?» aquella fue su respuesta, simple pero clara. Parecía tan seguro de sí mismo que en aquél momento no parecía que poco tiempo después estaría cruzado de brazos a espaldas a mí, mascullando con el ceño algo fruncido.

Y también, pasó algo muy extraño... antes.

Le pedí a Taehyung que me alcanzase el cuchillo para poder cortar un poco de kimchi, él se cortó sin querer por querer agarrar el objeto desde el lado filoso, soltó un quejido pero al mirar la herida nos dimos cuenta de que ésta no estaba sangrando. Más tarde, mientras él salía de la cocina pude ver que Taehyung observaba el corte algo sorprendido, ya que habían comenzado a salir pequeñas gotas de sangre. Sin embargo, él no se movió ni un pelo aún estando aparentemente preocupado, así que me encargué de curarlo yo misma. 

Por otro lado, él no había parado de mencionar que se escuchaban varios ruidos extraños alrededor del jardín de la casa, Yeontan no paraba de ladrar y aquello me indicaba que tal vez tendríamos que llamar al control de plagas. Ambos estaban bastante asustados y por eso Taehyung se quedó cerca de mí mientras de vez en cuando miraba por la ventana. Sin embargo, era extraño el hecho de que en el interior de la casa no hubiese ninguna rata.

— Veo que te encuentras mejor de los dedos. — comenté graciosamente al ver al pelinegro dibujando agresivamente algo en la encimera de la cocina, más bien parecía que estuviese rayando algo o haciendo garabatos — ¿Qué estás haciendo?

— Uh, dibujar. — contestó sin más, después de dirigirme una mirada rápida.

— ¿Y qué dibujas? — pregunté algo aturdida por la sequedad en sus palabras anteriores.