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Capítulo 12: No te vayas

Wuxian descubrió que solo podía ver con horror cómo su arte se hacía pedazos frente a él. Había reiniciado la pieza doce veces, dedicando horas extra para hacer algo perfecto. Después de todo, Lan Zhan era nada menos que perfecto. Wuxian había entrado en pánico durante todo el programa, preocupándose de que no le gustaría.

Pero le había encantado. Wuxian había creado algo que amaba, e hizo todas las horas que lo puso. Valió la pena convencer al Dr. Le dio acceso después de horas, los calambres en las manos que finalmente lo llevaron a dejar de fumar por la noche. Su declaración de amor oculta. Fue como ver cómo su corazón se partía en dos.

Cuando los pedazos cayeron al suelo, por primera vez en mucho tiempo pudo sentir que se rompía. ¿Qué debería haber esperado? No pudo hacer nada bien, ¿por qué la pintura debería haber sido diferente? Wangji lo había colmado de amor, ¡incluso le había escrito una canción! Solo quería devolverle algo, mostrarle cuánto lo amaba.

"¿Cómo te atreves", siseó Qiren. "Haciendo alarde de su conquista, ¿verdad? ¿No fue suficiente que lo sedujeras y arruinaras su futuro? No, tenías que hacer un esfuerzo adicional y ponerlo en mi contra. ¿Es divertido? ¿Arruinar su vida?"

Wuxian sintió que las lágrimas comenzaban a formarse en sus ojos. Las palabras de Qiren lo mordieron. ¿Wangji lo colmó de regalos y ni siquiera pudo darle una pintura? Wangji lo vería tarde o temprano. Sintió un viejo recuerdo emerger, trató de apartarlo.

Salió a la superficie de todos modos, dando al papel en el suelo un tono rosado. Cuando cerró los ojos, pudo verlo, el papel de construcción rosa se hizo confeti en el piso de la cocina. Podía sentir el linóleo blanco y negro presionando contra su mejilla. El dolor de la patada no pudo igualar al de ver su trabajo esparcido por el suelo. También había pasado horas en esa pieza, había estado en el refrigerador durante toda una tarde.

El refrigerador es para miembros reales de la familia, no para mocosos adoptivos como tú .

Las palabras dolieron como si las hubieran dicho ayer. El chico tenía razón, Wuxian había sido transferido a otra familia la semana siguiente. Quería acurrucarse y esconderse, sus brazos comenzando a envolverse a su alrededor. ¿Por qué pensó que tenía la oportunidad de ser un buen esposo? Wangji lo vería tarde o temprano. Ya estaba tirando a su suerte, habían estado juntos durante más de un mes. Fue una bomba de relojería. Su mano se deslizó hasta su hombro mientras trabajaba para acurrucarse sobre sí mismo, la nueva cadena deslizándose contra la punta de sus dedos.

"¿Cómo te atreves a ponerte eso?", Espetó el tío Qiren, abriendo los ojos al ver la cadena. Wuxian no podía levantar la mirada del papel en el suelo. La señal de otro de sus fracasos. "¿Ahora te llevas reliquias familiares? ¿Crees que lo vales? Te exijo que lo devuelvas".

"No lo entiendo," dijo Wuxian. Reliquia familiar? Había asumido que era del centro comercial. ¿Por qué Wangji desperdiciaría algo tan importante en él? Sus brazos se tensaron y se enroscaron más a su alrededor. No valía la pena.

"Tú pequeño-" la voz de Qiren se cortó.

"Le sugiero que mantenga sus manos fuera de mi esposo," gruñó la voz de Wangji. Los ojos de Wuxian finalmente lograron separarse del papel. Sintió un calor florecer contra su pecho.

"Lan Zhan", exhaló al ver a su marido.

El brazo de Wangji se extendió ofreciendo un puerto del mundo. Wangji lo amaba, le recordó su cerebro. Por ahora, la otra parte de él respondió. Sacudió la cabeza, siempre había sido amado y seguro en sus brazos. Eventualmente se irá, le recordó la voz. Wuxian lo apartó y se colocó detrás de su marido. Resopló, tratando de hacer que las lágrimas de sus ojos desaparecieran.