Capítulo 7.

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—Vive en una piña debajo del mar... —empezó a cantar Huā XīnShēng mientras caminaba directo a Yunmeng Jiang junto al jade, con Xuanyu y Xue Yang sobre el burro.

—¡Bob esponja! —gritaron los dos infantes.

—Su cuerpo absorbe y sin estallar. —siguió la canción.

—¡Bob esponja! —volvieron a gritar.

—El mejor amigo que podrías desear..

—¡Bob esponja!

—Y como a un pez le es fácil flotar.

—¡Bob esponja!

—Bob esponja, Bob esponja. Él es Booob Esponjaaaa, tarararartararatata. —empezó a reír al ver la expresión en el rostro de Lan Wangji, ahora mismo tal vez la quiera como a 6 metros de distancia, de seguro le pondría 5 órdenes de alejamiento. ¿Quién se imaginaria el jade estaría compartiendo el mismo espacio junto a alguien que va de aquí para allá? —¿Te sientes bien, Wangji? Podemos descansar un poco ya sabes, si te duelen los pies... —obviamente a quien le dolía los pies era a ella y no a Wangji.

—No es necesario, ya casi llegamos, ahora mismo estamos en Yunmeng Jiang, falta un poco para llegar a Muelle de Loto. —aseguró el jade.

—Entonces debemos viajar en ese barco pequeño, mmm, ¡no dejaré a frambuesita! Vendrá con nosotros si o si. —habló Huā XīnShēng tratando de averiguar como llevar al burro en el bote. —¡Ya sé! Frambuesita irá al fondo, en una esquina solo para él, A-Yang y A-Yu irán al costado, y nosotros iremos al frente para llegar al Muelle de Loto, ¿que opinas?

—Mh, suena bien.

—De acuerdo. —suspiró bajando a los infantes, y guiando al burro hacía el bote dejándolo en la posición que se planteó. —Suban niños, ya llegaremos a nuestro destino.

Después de que todos hayan subido el bote, Huā XīnShēng desvió su mirada al lago lleno de lotos, se veían tan hermosos de cerca, en su vida, jamás ha visto uno, pero en las fotos salían algo diferentes. Miró hacia los dos lados buscando si alguien la miraba o no, cuando notó que no había nadie más que ellos, estiró uno de sus brazos y con el otro se apoyó en el bote, tomando entre su mano un loto del lago.

—Eso es robar.

—¡Lan Zhan! No es cierto, es...¿Tomar prestado? Tal vez luego les puedo pagar, si es que volvemos. —rió nerviosamente mientras seguía agarrando el loto. —¿Cómo se come esto?

—La raíz. Come el tallo.

—¡Gracias por la información! —sonrió mientras el barco avanzaba, abrió las hojas hacía los lados, llevándose el tallo interno a la boca. —Es algo agridulce, pero se puede comer. —dijo masticando un poco, hasta que sintió que el bote chocó com algo. —Bueno, al parecer ya llegamos.

Se puso de pie rápidamente seguido de Lan Wangji, siendo el jade quién agarró a frambuesita, mientras la joven tomaba de las manos a Xue Yang y Xuanyu.

¿Será que debo usar algo para ocultar mi rostro? Ya que me vi Word of Honor, podría hacerlo...por la reacción de Jiang Fengmian y Madam Yu. Mmm, aunque si me muestro ante ellos, Wei Ying ya no sufriría ningún maltrato.

—Estás distraída, avanza. —Lan Wangji interrumpió sus pensamientos adelantándose en caminar junto al burro.

—Como diga, mi rey. —respondió de manera coqueta antes de reír para caminar a su lado con los dos niños. —A-Yang, A-Yu, ya estamos en Muelle de Loto, así que comportense bien, esta es la Secta de Yunmeng Jiang.

—¡Si, A-Niang!

—Al final si terminaré adoptandolos, supongo, son tan bonitos. Seré la mamá de muchos. —solo faltaría encontrar a Meng Yao... —¡Bien! Ya llegamos, es muy bonito, hey, ustedes, ¿podrían avisar a los Líderes que estamos aquí para algo importante?

—Segundo joven Maestro Lan, Señorita...ahora mismo el Líder de Secta no está, ayer fue a Lanling junto a la señorita Yanli, de seguro regresan en unos minutos, la Señora Yu está en el campo de entrenamiento con los demás discípulos...

—Ajá, si, si, me importa un pepino que no esté Jiang Fengmian, ¿Dónde está Wei Wuxian?

—Con la Señora Yu...

—...

Huā XīnShēng empezó a sudar de frío, sabía sobra las marcas de látigo en la espalda de Wei Ying, claramente, hechas originariamente por Zidian, el arma de Madam Yu.

—No me importa tener un maldito pase, Lan Zhan, agarra a mis pollitos, ya vuelvo, esto se hará rápidamente. —murmuró con rapidez, para patear la puerta principal e ir corriendo hacia el campo de entrenamiento. Escuchando algunos murmullos por los pasillos.

—Pobre de Wuxian, no merece ser golpeado con Zidian, solo protegió a la Señorita Yanli.

—Estoy de acuerdo...

Huā XīnShēng sintió una pequeña presión en su corazón al escuchar aquello, apresuró su caminar sin prestar atención a las palabras de los sirvientes, de que camine más lento.

—¡Mamá, ya es suficiente! ¡Wei Wuxian solo defendió a A-Jie!

—Silencio, Jinzhu, Yinzhu, agarrenlo.

—¡Alto ahí, maldita! ¡Suelta a mi retoño o yo misma te dejo pelada! —gritó Huā XīnShēng sin importarle hacer un escándalo, ya que no estaba Jiang Fengmian, tal vez podría pasar desapercibida, ya que se conoce que Madam Yu estaba obsesionada con Cangse Sanren por ser la mujer en el corazón de Jiang Fengmian. —Aleja tus manos.

—...¿Cangse Sanren? —frunció el ceño Madam Yu al ver a la mujer que tenía, mucho, pero mucho parecido a Cangse Sanren, la madre de Wei Wuxian. —Tú estás muerta. —susurró agitando un poco a Zidian.

—¿Qué? ¿Acaso tienes miedo de que este viva solo por ser el primer amor de A-Mian? —retó Huā XīnShēng, aunque claro estaba que Jiang Fengmian nunca estuvo enamorada de ella, solo era una relación de amistad con mucho cariño en el pasado.

—Tú estás muerta... —Madam Yu atacó con mucha furia a Huā XīnShēng con furia, sin notar ambas mujeres que Wei Wuxian y Jiang Wanyin se encontraban en shock con la información.

Huā XīnShēng jadeó en voz baja, tomando a Zidian con una de sus manos, sintiendo la electricidad el su palma, sinceramente ahí iba a quedar una marca, tal vez permanente. Lo soltó después de unos segundos, volviendo a esquivar el látigo que se avecinó a ella.

—¡No tienes derecho a ser madre! Ni mucho menos ser la matriarca de Muelle de Loto, cuando regrese Fengmian, A-Ying y yo nos iremos de esta maldita Secta. —gritó la fémina agarrando a Madam Yu por los cabellos, desordenando sus cabellos con mucha furia. —Para la próxima deja de meterte con mi hijo, ¡porque te destrozaré, Yu Ziyuan!

—Shēng. —llamó preocupado pero sin expresión.

—¡A-Zhan! ¡Aquí no pasó nada! —le sonrió al jade, para luego ir corriendo hacía Wei Wuxian, abrazándolo con fuerza, tal vez ya era hora de decírselo solo a él —Wei Ying, creo que es hora de que sepas la verdad, ven conmigo.

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