Lover | Park Jimin |

Four

Los rayos del sol traspasaban la ventana del cuarto de la pelinegra, frotó sus ojos despacio y luego estiró su cuerpo, soltó un suspiro y se giro hacia el pequeño mueble a lado de su cama para tomar su celular, no prendió, se maldijo por no haberlo puesto a cargar, ni siquiera recordaba como había llegado a aquel cuarto, lo último que recuerda es estar con sus amigos bebiendo un poco de cerveza mientras platicaban cómodamente, seguramente le ganó el sueño y debe estar en la habitación para invitados del departamento de Hwasa.

El dolor de cabeza haciéndose presente junto a las náuseas le recordó que efectivamente había bebido más de la cuenta, se levantó rápidamente de la cama para ir a dónde supuso era el baño, vómito un poco y luego lavo su boca y su rostro.

- No vuelvas a beber cerveza.- Se dijo a si misma frente al espejo
- Tal vez otra cosa pero no cerveza.

Unos pequeños golpecitos en la puerta le anunciaron que le llamaban, la abrió despacio con vergüenza de ver a quien sea que le buscaba, era Kai, le regaló una pequeña sonrisa que fue devuelta con vergüenza.

- Que bien que ya estás despierta, hice sopa para la resaca, baja.

- Gracias.- Sonrió aún con vergüenza

- Oye Kai... podrías prestarme... un cargador por favor... mi celular se quedó sin pila.- Pidió apenada

- Claro, ahora te lo traigo.- Le sonrió y desapareció por el pasillo

Segundos después Kai regreso con un cargador en sus manos y se lo dió a tn, ella le agradeció y le dijo que ahora bajaba, Kai asintió para desaparecer nuevamente y luego tn cerró la puerta. Conecto su celular a la luz y sonrió cuando apareció la imagen de una batería anunciando que estaba comenzando a cargarse, ahí lo dejo. Luego ató su cabello en una coleta y se colocó unas pantuflas para bajar a dónde sus amigos.

Lo primero que notaron sus ojos fueron a sus dos mejores amigos más muertos que un muerto, Hwasa estaba despeinada y con rimel corrido, siquiera hizo esfuerzo por desmaquillase, le causó gracia, a su lado aún dormido y de mal humor se encontraba Yoongi, traía la misma ropa de ayer y su cabello revuelto, parecía que le habían dado una terrible sacudida con un auto o algo parecido. Y luego estaba Kai quien se veía más fresco que una lechuga, tn se preguntó si era porque no bebió mucho o tenía un muy buen aguante.

- Siéntate, ahora te sirvo.- Pidió Kai y le sonrió, tn obedeció

- Buenos días.- Saluda divertida a sus amigos

- Buenos días.- Saludo con una pequeña sonrisa

- De buenos no tiene nada.- Dijo malhumorado y Tn rió

- Tengan cuidado que está caliente.- Advirtió Kai colocando un plato humeante frente a los presentes

- Gracias.- Dijeron al mismo tiempo para comenzar a comerse la sopa

- No hay de que. Aquí hay pastillas, pueden tomar una despues de comer.- Coloco una pequeña caja en el centro de la mesa, los presentes le sonrieron agradecidos y continuaron comiendo

Después de unos minutos la resaca parecía haber desaparecido, tn le pidió algo de ropa prestada a Hwasa para poder darse una ducha, prometiendo devolversela después, su amiga sin reproche le dió lo que necesitaba y la pelinegra pudo darse una relajada ducha.

Cuando salió se sentía mucho mejor que en la mañana cuando despertó, las náuseas se fueron junto al dolor de cabeza, terminó de vestirse y desconectó su celular para después encenderlo y checar sus notificaciones, esperaba que no le hubiesen buscado de su trabajo.

Tenía mensajes de sus amigos y amigas que había hecho en sus viajes a distintos lugares, incluso de sus padres pero lo que le llamo la atención fue tener dos llamadas perdidas de un número desconocido, una de la madrugada y otra de en la mañana.