¿Te quedas conmigo? (EDITANDO)

capitulo 30

Damon e Isaac llevaban dos semanas saliendo y como era normal para ambos ( y el resto de las manadas ), luego de un encuentro mañanero, ambos amantes salieron al pueblo a pasar el rato.

Isaac se dedicaba a tomar un refresco, mientras Damon bebía sangre ( la cual estaba en un termo ) de manera disimulada. Los dos hablaban de sus hobbies y gustos, como música, series, libros y demás.

- Damon mira, una tienda de antigüedades. ¿Quieres ir a ver qué hay?

- No soy fan del olor a viejo, además muchas de las cosas que venden son falsas o copias muy malas.

- Vamos anciano no seas amargado.

- La verdad no entiendo porque eso no me ofende.

Sin más los dos seres sobrenaturales caminaron a la tienda con intención de ver lo que había dentro. De los dos Isaac era el que más se veía emocionado, mientras Damon se dedicaba a clasificar las cosas por " falso", " horroroso", "inventado", "copia"; entre otros más.

- Se acerca al chico posicionando posesivamente sus manos en la cintura del menor - todo aquí es horrible y anticuado.

- Pues al menos entraste, supongo que ya es algo - toma un anillo de los que se exhibían. -

- Al menos ese es lindo - lo toma - y parece ser algo original.

- Y aparentemente barato - mira la etiqueta - creo que traigo el dinero para comprarlo.

- Déjalo, yo lo pago.

- No. - mira incrédulo al vampiro - No como crees, no puedo aceptarlo.

- No fue pregunta. Es en muestra de agradecimiento y amistad - deposita un beso en la mejilla del contrario. -

- ¿Agradecimiento? ¿De qué?

- Bueno además de Derek eres el único que se a comportado un poco más amable que el resto.

- Damon... Eso... Es muy lindo de tu parte, gracias - menciona ligeramente avergonzado por lo dicho por el vampiro. -

Luego de comprar el anillo, el cual era de algún metal desconocido aparentemente bañado en plata y con algunos diseños, encabezado con una gran piedra naranja.

- Coloca el anillo en su dedo mirándolo - es una linda piedra. ¿No crees?

- Es lindo, hay que admitir que tienes buenos gustos.

- Gracias, es muy halagador de tu parte.

- Hablando de gustos. ¿Qué es lo que sientes por Derek?

- ¿Qué? - lo mira sorprendido. -

- Ya sabes, que ocurre contigo, él y esas nada discretas miradas cada que lo vez.

- Suspira rendido al saber que fue descubierto - no hay nada entre él y yo; pero no voy a negar el hecho de que me gusta y mucho.

- Sales conmigo porque te recuerdo a él. ¿No es así? - mira divertido al mas alto. -

- Eso suena muy mal - ríe nervioso - pareciera que quieres que parezca que te utilizo; pero si. La verdad hay mucho parecido entre ustedes dos y el estar contigo, de alguna forma una parte de mi se engaña y piensa o cree que así sería salir con él... Supongo...

- Tranquilo, la verdad no me molesta que tengas sentimientos hacia Derek y me utilices para disfrazarlos. Una de mis ex novias hizo lo mismo con mi hermano a decir verdad.

- No entiendo. ¿A qué te refieres?

- Es algo difícil de explicar.... Hace mucho tiempo hubo una chica llamada Katherine, me enamore de ella, pasaron un millón de cosas que evitaron que estuviéramos juntos, y hace unos.... Diez años talvez. Conocí a una chica idéntica a ella, mi hermano y ella comenzaron a salir, aún así trate de enamorarla. Lo logre - sonríe engreído y de manera santurrona - aun cuando ella salía con mi hermano en ese entonces; después técnicamente hice que terminarán y poco después ella y yo comenzamos salir, morí y en ese lapso en el que estuve muerto ella hizo que la hipnotizaran para que me olvidará. Reviví la volví a enamorar, salimos y después terminamos.

- Dios Damon eres de lo peor - comienza a reír. -

- Hey, tú tampoco te salvas. ¿He? Técnicamente me utilizas para fantasear con el que te gusta, que a decir verdad es un gran idiota, además eres igual o peor que yo ya que él también esta con alguien mas.

- Pero a diferencia de ti, no trato de seducirlo.

Los dos siguieron con su platica de forma divertida, haciendo bromas e insinuando cosas de la actitud del otro, como si de los mejores amigos del mundo se tratara, como si se conocieran de toda la vida.

Los dos habían congeniado de maravilla, no solo por el hecho de que constantemente tenían sexo en casi cualquier parte, sino por el hecho de que los dos tenían un pasado realmente oscuro del cual no gustaban de hablar y que con el paso del tiempo habían conseguido personas significativamente importantes a las cuales amaban y tenían gran aprecio.

Aunque no lo pareciera los dos eran muy idénticos, habían tenido padres que los habían tratado peor que a un trapo, y no solo a ellos, sino que a sus hermanos y madres también; para que después murieran de una manera realmente horrible. Una madre que había muerto a causa de una enfermedad, hermanos muertos y habían buscado asilo en personas erróneas cometiendo muchos errores, para después encontrar a personas que de verdad valían la pena, que de ser simples desconocidos se habían vuelto su familia.

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De igual forma estaban Stiles y Derek los cuales habían comenzado a tener unas cuantas peleas de causa desconocida, ninguno de los dos le tomo importancia, ya que, a decir verdad, desde que se  conocen siempre han peleado y discutido por todo. Aun mas por el hecho de que sus personalidades son completamente opuestas la una de la otra.

Otro  factor era que tanto Stiles como Derek habían dejado de prestar atención al otro. Stiles por trabajo y que la gran parte del tiempo se la pasaba hablando con Louis y Anna; principalmente el primero. No lo mal entiendan, pero para él su trabajo lo era todo, además tenia basto conocimiento en muchas áreas que los otros no conocían o controlaban a cien porciento.

Derek al contrario del mas joven, no tenia trabajo por el cual preocuparse pero sin duda alguna tenia deberes y asuntos financieros y relacionados con su manada que atender; otra cosa que no lo ayudaba era el hecho de que no tenia completa confianza en la relación que su omega y amigo alfa tenían. Era extraño pues era la primera vez que veía esa clase de comportamiento en ambos y no lo entendía, causando de manera inconsciente ciertos celos en lo profundo de su ser.

 No es que ninguno disfrutara la compañía del otro pero es que tenían prioridades diferentes a las cuales dedicarles su atención. El asunto no parecía tener un fin pronto pues de alguna manera pareciera que  esa brecha se habría cada vez  mas y mas, a tal punto de que todos se comenzaban a dar cuenta de que algo andaba mal entre ellos, pero que por respeto y cariño a los dos, ninguno decía nada.