Capítulo 5

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Labor era un poco diferente de Lüger. Labor era el estado de los Reisende, los aislados súper inteligentes, por lo que se notaba que estaba incluso más desarrollado que nosotros. Todo era bastante más avanzado pues seguramente todas las tecnologías que poseemos pasan por aquí antes de distribuirlas a los demás estados. Aún así cada vez nos alejábamos más y más de los altos edificios hasta encontrarnos con casas en medio de la nada y zonas cada vez más desiertas.

Un rato después de que el autobús comenzara a conducir por la zona desierta, los presentes se comenzaron a despertar. El chico castaño y yo cruzamos miradas un poco preocupados. Él me asintió y simuló tener un dolor de jaqueca intenso y pronunció un «¿Qué mierda ha pasado?» como todos los demás.

Todos a mi alrededor hablaban entre ellos y se preguntaban qué habían pasado. Todos menos nosotros dos.

Pasó el rato, me perdí en el paisaje de la ventana y el chico castaño y yo no volvimos a cruzar miradas.

Rato después de adentrarnos en un bosque atravesamos una especie de campo protector que se abrió en cuanto el autobús intentó atravesarlo. Todos los chicos y chicas se quedaron impresionados. De donde veníamos no había nada igual. Más o menos.

El autobús paró frente a un edificio enorme y moderno. El internado tenía un color bastante aburrido, un tono grisáceo amarronado que no resaltaba para nada. Ventanas espejo gigantescas adornaban la fachada.

Miré más a mi alrededor y habían tres edificios. Nosotros habíamos parado frente a uno en forma de uve. Atrás de nosotros se encontraba lo que parecía un enorme pabellón redondo igual de moderno que el edificio anterior y, detrás del pabellón circular, un edificio en forma de arco lo rodeaba hasta la mitad.

—¡Bienvenidos, gente de Lüger, al internado Vaip!—se escuchó una voz que me hizo girarme en dirección al edificio en forma de uve.

—¿Vaip?—escuché a una voz masculina preguntar. Me acerqué al grupito con el que había venido en autobús.

—Así es—nos miró sonriendo a todos—. Este instituto fue fundado principalmente por Christofer Vaip, mi difunto abuelo. Yo soy Noelle Vaip, la directora de este internado. Me visitaréis a mi despacho tanto si sois excepcionalmente buenos, como si sois excepcionalmente malos—bromeó. Pero ninguno de nosotros rió—. Este edificio que está detrás mío es llamado Ala V, son vuestras habitaciones. En la planta baja se encuentra un gran salón de ocio para vosotros con un mini bar, futbolines, mesas de billar, una sala de baile, piscina de interior, una sala de cine pequeña, etcétera, etcétera... En la planta de abajo también se encuentra el comedor y también una enfermería. En la primera planta es en donde os alojaréis vosotros. Chicas derecha, chicos izquierda. Chicos, no podéis estar en la habitación de una chica a menos que sea de día y con la puerta abierta y viceversa. Siempre habrá gente vigilando así que no os arriesguéis, no somos tontos. La segunda planta les pertenece a los de segundo año.

>>Este de aquí es nuestro pabellón—señaló al edificio cilíndrico. Aquí os entrenaremos físicamente. La mayor parte del tiempo la pasaréis aquí. Os ayudaremos a dominar mucho mejor vuestros poderes y también a hacer renacer cuantos más posibles mejor. Os enseñaremos a luchar por el bien y la justicia de los aislados.

>>Bien—comenzó a rodear el pabellón hasta parar en frente del edificio de arco. Nosotros la seguimos—. Este es el Ala C. Aquí os entrenaremos mentalmente. Necesitáis desarrollar la lógica, la independencia, la supervivencia y vuestra astucia y claro, aunque parezca que no para eso también os hará falta teoría. Mañana por la mañana tendréis una visita guiada de todos los edificios por dentro. Ahora mismo lo que tenéis que hacer es disfrutar mientras podáis antes de empezar vuestro entrenamiento intensivo. Ah, y por cierto, os recomiendo que nos la liéis ni que nos hagáis enfadar porque aquí los castigos son muy fuertes. En fin, en recepción os dirán vuestras habitaciones y su número, disfrutad—hizo señas con las manos mientras nos echaba.

𝐈𝐧𝐭𝐞𝐫𝐧𝐚𝐝𝐨 𝐝𝐞 𝐆𝐮𝐚𝐫𝐝𝐢𝐚𝐧𝐞𝐬 © [PAUSADA] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora