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" F a m i l i a r"
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Su vista se nubla y parpadea varías veces para poder acostumbrase a la luz del cuarto, cuando esta mentalmente consiente se da cuenta del techo del lugar, el hospital de Arcadia ¿Otra vez? Se recuesta rápido pero eso hace que le duela la cabeza, se tranquiliza al ver que no está conectada a ninguna máquina de pulso, suspira aliviada por el momento. Escucha el sonido de la puerta abrirse encontrándose con un médico que no había visto.
—Veo que te despertaste—es lo primero que dice al estar cerca de ella. —soy tu médico de la tarde, Hilda Eira, hable con la doctora Lake para que pudiera darme tu expediente para que ella no tuviera que venir hasta acá observarte aunque me acaba de decir que esta es la segunda vez que vienes en el día de hoy.
La doctora de cabellos cortos semi-rubios la mira esperando la respuesta de la chica. —Bueno, hoy vine por prescripción para el entrenador ayer me caí de la barra y necesito estar bien para los eventos deportivos.
—Bien supongo que solo tendría que revisarte de tu caída, por lo menos es viernes descansaras sábado y domingo lejos de los entrenamientos de gimnasia. —ella mira su tabla. —pero eso no es lo que preocupa doctora Lake. —se puso pálida ante la contestación de la fémina y se da cuenta de ellos. —me entregaron los rayos X de tus pulmones.
—L-le dije a la señora Lake que no hiciera esos estudios, le dije que a veces suele ser alergia al cambio climático de estaciones. —tartamudea ante sus ímpetu, tiene miedo que aquella doctora de nombre Hilda se diera cuenta de su extraño malestar.
—No es un malestar _______—le contesta con seriedad y eso preocupa a la joven, sabe que esta pérdida ante el tono de la noticia. Hilda coloco aquellos papeles de color negro que con la potencia de una luz podía verse las figuras de aquellos pulmones, apaga unas cuantas bombillas para resaltar la única que puede ayudarle a ver.
La enciende dejando ver las radiografías de las entrañas de la chicas, la parte baja de sus pulmones no se ve parecen estar llenos de algo incluso que pueden salir de sus costillas, nota las formas de pétalos entre ellos algo que la aterra. Da un paso atrás cubriéndose sus boca y arrodillándose al suelo, tiene miedo, tiembla de este y el pavor que inunda su cuerpo al que dirá la profesional en el área médica.
—Apenas está empezando. —habla Hilda haciendo que la chica dirigiera su mirada a ella. —las flores van avanzando poco a poco.
La respuestas que le da Hilda hacen que _____ se sienta desorientada ante el diagnóstico: —¿U-usted sabe lo que me esta pasando?
—Tuve ciertos pacientes con tu diagnóstico. —le responde mientras la ayuda a levantarse del suelo—te lo explicare, solo que tendrás miedo pero tranquila tienes una cura para ello.
