Yan Yixuan X Liu Qingge

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El peso de una promesa

Cuando llegó a la cumbre Bai Zhan, Liu Qingge le pareció lo más tierno y adorable que pudo conocer.

¿Porque alguien pensaría eso del Dios de la guerra de Bai Zhan? ¿Cómo se atreve a tener tal pensamiento vergonzoso? Y primeramente ¡¿Que lo llevo a tener ese pensamiento tan fuera de sitio de Liu Qingge?!

Bueno, todo empezó cuando entro en la biblioteca de la cumbre. Estaba buscando pergaminos o algún papel que le diera información sobre demonios.

— ¡shizun! — su shizun estaba ahí — ¡saludos a shizun! —

— deja de repetir la palabra sizhun. —

— entonces , ilumine a este discípulo, ¿cómo puedo llamarlo si no es shizun, shizun? — solo quería provocarle.

— ¡dime Liu Qingge y listo! Escuchar shizun todo el día y aparte con llegar aquí, escucharlo más. Me irrita —

— entonces... — llamar por su nombre a Liu Qingge... Liu Qingge, sus labios picaban de emoción — Liu Qingge —

— ol-olvida —

— vine buscando unos papeles sobre demonios, Liu Qingge — se acerco más a su maestro, con los ojos brillantes al visualizar nervios. — Qingge —

— ¡maldita sea! ¡Deja de repetirlo tanto! —

Ese día se ganó un golpe en la nariz  y un bonito recuerdo de un shizun avergonzado.

°°°°°°
— Liu Qingge — se acerco a su maestro, con cautela para poder esquivar cualquier golpe — este discípulo suyo — enfatizó las palabras — quiere saber cuánto a mejorado. Enfrentese conmigo, Liu Qingge —

Junto sus manos y sonrió victorioso cuando Cheng Luan ya estaba en frente.

— bien, no me hago responsable por tu muerte —

— ¡este discípulo se atreve a pedir algo a sh- a Qingge! —

— ¿crees que tanto has mejorado como para pedirme algo? — escucho una risa estruendosa —¡bien! ¿Qué quieres? —

— ¡si este gana, pide que se le otorgue algo! —

— mientras sea de la cumbre Bai Zhan o este a mi disposición se te concederá — oh, tan confiado. — si yo ganó, te retiro de tu puesto como discípulo principal y te expulsó de la cumbre Bai Zhan—

— ¡acepto las condiciones de Shizun! —

— ¡deja de decir eso! —

La pelea comenzó, Cheng Luan brillando bajo la luz del sol. Destruyendo sientos de árboles del bosque. Si, bajo al bosque de la cumbre Bai Zhan donde pensó nadie los vería. Pero olvidó que su shizun es el dios del desastre, también.

Esquivo con muchas dificultades ese golpe. Agarró su espada y corrió en dirección contraria, salto tan alto como pudo y gracias al peso de su cuerpo cayó a una velocidad increíble.

No tanto para el dios de la guerra.

— ¡muy lento! — supuso que algo así pasaría, Qingge yendo hacia atrás y preparando una patada, con la ayuda de la pierna agena se recupero y balanceo su espada. Rozando el cuello de su shizun.

Esquivando un puño, y dirigiendo su pie al rostro ajeno, intercambiaron golpes cuerpo a cuerpo. Un poco de qi espiritual puso distancia entre ambos.

—... Vas bien —

Corrió de nuevo, esta vez yendo por la izquierda, cargando de energía espiritual su cuerpo y su espada para poder hacer el siguiente golpe que hizo retroceder 2 pasos al Dios de la Guerra. ¡Hizo reteoceder al dios de la guerra! Un logro.

Shipp De La Secta De La Montaña Can QiongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora