Capítulo 10 - Contexto

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Aviso: Este capitulo esta un poco largo así que lo pueden considerar "relleno", si desean pueden saltárselo, solo es un contexto como dice el titulo . En fin, si les da flojera pueden pasar al siguiente  ya que no afecta a la trama 


Continua en el POV de Sayaka

– Pues éramos una feliz pareja, bueno, no tan feliz como ustedes – soltó una risa burlona

Abrí mis ojos de par en par

– Aunque sinceramente... creí que se quedaría con Sachiko – continuó

" Si sabe de esa 'relación' significa que las conoce de la academia, pero es imposible ya que recuerdo el nombre de todos los alumnos, ella no... " – mis pensamientos fueron interrumpidos

– Y yo creí que te quedarías en Australia – Kirari intervino

– Ese era el plan, pero... mi acompañante cambió los planes en el último momento – Karuma fijo su mirada en Kirari – Y me abandonaste

– En el mundo de las apuestas, la culpa es del engañado – me pronuncié al entender vagamente su 'historia'

– Tienes toda la razón, Sayaka – la peliverde sonrió – El engaño es parte del juego, solo debes cuidarte de no caer en el ¿no es así, Kirari?

– Todo depende del juego – Kirari contestó indiferente

– Yo diría que depende el jugador, más aún si ella te engaña

" Entonces sabe que... " – pensé

– ¿Ella? – Kirari preguntó

– Si, Sayaka

– ¿Sayaka qué? – preguntó aún más interesada

– Ya sabes, hay rumores – la peliverde se excusó

– ¿Qué tipo de rumores? – la mirada de Kirari se intensificó

– No lo sé, algo relacionado a una infidelidad, se dicen muchas cosas sobre ella

– Que curioso, parece que te equivocaste... una vez más – Kirari hizo de lado su cabeza – Ya que a Sayaka no se le conoce pareja alguna y por supuesto, no existen rumores acerca de ella... de eso me aseguro yo

– Supongo que oí mal – Karuma guiñó el ojo – Pero no descartes esa posibilidad – sonrió – Bueno, ahora si debo irme, en unos minutos tengo clases – tomó su maletín que estaba junto a Kirari y se fue sin decir otra palabra

Un par de segundos después, Kirari se levantó del asiento, acomodó su falda y se dirigió hacia la puerta, pasando por mi lado como si no existiera

– ¿Cuánto dolor más me vas a causar antes de que pienses que ya tuve suficiente? – pregunté

– Todo el que requiera hasta sentirme bien – pude sentir su respiración en mi cuello, no sé en qué momento se acercó tanto a mi – Y si es necesario... te mataré – susurró en mi oído

Mi celular sonó, lo saqué de mi bolsillo y noté que era una notificación de un mensaje.

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