Capítulo 13.
Suspire, de todos los momentos en mi miserable vida, este era perfecto, Roger había sido tan amable estos últimos días, y ahora estaba siendo tan dulce, pero tienen que venir a interrumpir, por lo visto todos se empeñan en cortarme los mejores momentos.
-Que haces aquí, amigo- dije casi con odio la palabra amigo.
-Vine a verte, porque Jenny llamo y dijo que estabas mal, pero ahora vengo y te veo de todo menos mal- río irónicamente.
-Mira- dijo Roger poniéndose enfrente mío- ella hace rato te necesitaba, pero no apareciste, fui yo quien se enteró primero y vino primero, así que por favor, no te hagas el idiota, estas en un hospital y si no te das cuenta estas en la guardería, ósea hay niños y tienes que guardar tu temperamento, por favor Germán, haz el favor si- dijo Roger entrecerrando sus ojos.
Germán me miro un largo tiempo, asintió resignado y se fue.
-Estas bien-se giró Roger y me observó, no pude evitar dejar caer unas lágrimas, yo le estaba haciendo cambiar a Germán, antes él no era así, Roger me miro apenado- no Angy no llores, me pones más histérico, por favor enana, no- me susurro, se acercó y me abrazo por mucho tiempo, luego se alejó un poco y limpio mis lágrimas con su pulgar- prométeme que no volverás a llorar por él, por favor - Me dijo serio.
-No se Roger, me da rabia saber que yo soy la culpable de su repentino cambio de actitud, antes no era así, verlo de esa manera me parte el corazón... - iba a continuar pero él me interrumpió.
-Lo amas- pregunto cabizbajo.
-Roger de donde sacas eso.
-Responde mi pregunta Angy- suspiro- lo amas verdad, por eso te pone así.
-Hay Roger, yo jamás amaría a otra persona, porque ya estoy enamorada, y no precisamente de Germán- Roger iba a hablar pero lo interrumpí - ni de Luis, en serio, créeme, querría enamorarme de ellos pero no puedo, porque otro tiene mi corazón, y como el no lo sabe, capaz nunca me lo devuelva- Suspire y baje mi cabeza, todo, se lo dije todo, obvio no directo, pero eso lo dije para él, y solo para él, era real, él no sabe que estoy enamorada de el, asique jamás me devolverá el corazón.
-Quien es- pregunto levantando un poco la mirada, en eso el pequeño Fred viene y le estira la mano a Roger, y lo arrastra hacia un parquecito de ahí.
-Eres tú- susurre, y corrió una lágrima por mi mejilla, no aguante y fui hacia donde era mi habitación, y me encontré con Luis un poco preocupado.
-Que pasó Angy, le visto al idiota entrar que pasó - Me abrazo.
-Es mi culpa Luis, yo lo cambie, antes no era así, y ahora está híper cambiado, su mirada, su voz, todo- caí en un llanto, hasta que alguien agarra de mis hombros.
-Tranquila Angy, tu no cambiaste a Germán, el es el que se va a beber ti no le dijiste que lo haga- dijo mi amiga tras mío, me voltee y la abrace.
-Viniste- dije sin creer.
-Y dejar a mí amiga, ni loca- carcajeo Faby un poco sobrepasada.
-Faby estamos en un hospital- susurro Luis.
-Y que, sabes lo que cuesta venir hasta aquí, si me prohíben hablar sería como ponerle a un simio en una jaula con bananas y decirle que no coma, enserio nunca rendí tanto sin hablar - río, a lo cual sonríe.
Esta era una de mis amigas más locas, ella siempre que se entera que una o uno está decaído, hace hasta las cosas más estúpidas para hacerle sonreír, por ejemplo una vez Lía había reprobado una materia, y Faby enterada de esto fue y comenzó a cantar en la calle como loca, lo que hizo que Lía casi caiga en la calle de la risa, si es la mejor.
-Hay Faby, no sabes cuánto te necesite- dije acercándola a un fuerte abrazo.
-Ya se Angy, todos me necesitan, no pueden pasar un minuto sin mí- dijo riendo presumida, yo sonreí, obvio ella solo estaba bromeando- pero hablando en serio- cambio de rostro a uno más serio- me asusté mucho, cuando llamo Roger llorando, guau, enserio creí que te había ocurrido algo muy serio- dijo observándome detenidamente, como si fuera que iba a encontrar algo raro en mi rostro.
-A ti también te llamo Roger llorando- cuestionó Luis poniéndose al lado mío.
-Sí, y enserio que me asustó muchísimo, sabe llorar ese chico- dijo Faby riendo.
-A mí también me llamo llorando, parecía toda una magdalena- río Luis, lo cual causó que recibiera un codazo, esta vez no fue Faby, fui yo.
-Auch!!!- se froto la parte afectada con su otro brazo- ahora tú también me golpeas, vaya amigas que tengo- dijo con sarcasmo, ahora no recibió un golpe, recibió dos, uno de Faby y otro mío- Triple Auch!!! - casi grito, pero Faby le tapó la boca.
-Recuerda mi querido Lucho, estamos en un hospital- reí por lo que dijo Faby, hace rato Luis le dijo casi lo mismo.
-Angy, puedo hablar contigo- dijo Will muy serio, mi sonrisa se borró de inmediato, tenía un mal presentimiento por sus fracciones.
-Ok- dije- que pasa- pregunte.
-Por favor puedes acompañarme a recepción, para estar más cómodos, o su no el despacho de Jim, ahora él no está de turno asique podemos utilizarlo - dijo aún serio.
-Sobre que se trata- dije evitando sus palabras anteriores.
-De algo serio, es por eso que quiero que estés cómoda.
-Es sobre mamá- dije al borde del llanto.
-Me temo que no puedo responderte hasta que estemos en un lugar más tranquilo- dijo y señaló con su mano para que avance, resignada la seguí a una puerta, en ella estaba escrita "Dr. Jim Daniels ", Will abrió la puerta y me dijo que pasará, yo solo asentí y entre, el encendió la luz y pude divisar mejor la habitación, era blanca, obvio, había recuadros del Dr. Jim y por lo que visto supongo que su familia, lo que me extraño fue ver en una a Will.
-Él es tu padre- no pude evitar preguntar.
-No, no lo es- sonrió sin gracia, parecía triste, oh seguro dije algo que no tuve que preguntar - él es mi suegro- y ahí el motivo, en la foto estaba Jim, Will, y una joven rubia, muy bella para ser realista.
-Oh lo siento, no pude evitar preguntar, lo siento- dije apenada.
-No hay porque - ahora se puso de nuevo serio- toma asiento- me señaló una silla al lado del escritorio, yo me senté, al igual que él se sentó en frente mío.
-Bueno Angy, te llame para decirte algo, más bien preguntarte algo- dijo Will juntando sus manos en el escritorio, la pregunta me extraño.
-Se puede saber que es- cuestione.
-Si-suspiro - hoy vino un señor, de hecho ahora está con tu madre- me quede shockeada, quien señor?, no sabía quién.
-Como se llama- cuestione de nuevo.
-Guillermo Fernández - y ahí una estocada paso por mi corazón y caí del sillón - Angy que sucede- grito Will, se arrodilló al lado mío- donde te duele- cuestionó, yo señale a mi pecho, al lado de mi corazón- oh mierda Angy, tranquila ya viene- Will agarró su teléfono y dijo- por favor una camilla al consultorio de Daniels, ahora, rápido, creo que debemos llevarla a UCI(Unidad de Cuidados Intensivos), rápido- sin darme cuenta solo veía como Will movía sus labios, yo solo escuchaba a mi corazón, latiendo cada vez más lento, hasta que cerré los ojos.
