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˗ ˏˋ 𝖨 𝗌𝖾𝖾 𝗒𝗈𝗎𝗋 𝗌𝗂𝗅𝗄𝗒 𝗁𝖺𝗂𝗋 𝗐𝖺𝗏𝗂𝗇𝗀.
𝖶𝗂𝗅𝗅 𝗂𝗍 𝖻𝖾 𝖺𝗌 𝗌𝗆𝗈𝗈𝗍𝗁
𝖺𝗌 𝗂𝗍 𝗅𝗈𝗈𝗄𝗌? ˎˊ -


El sonido de la alarma llegó a los oídos del pelinegro, tapado hasta la cabeza tiro aquel aparato al suelo apagandolo

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El sonido de la alarma llegó a los oídos del pelinegro, tapado hasta la cabeza tiro aquel aparato al suelo apagandolo. Algunos maullidos si hicieron notar en su ventana, los gatitos buscaban despertar al dueño de aquella habitación para ser alimentados como todas las mañanas y noches, el golpe de su puerta como si fuera a ser tirada junto con el grito de su madre lo hizo gruñir en respuesta, a la única persona que le acataria cada orden era solamente a su madre.
Los golpes volvieron a resonar.

━ ¡Keisuke, tienes 5 minutos para levantarte de esa cama antes de que te saque yo agarrado de los pelos y te corte esas greñas! ━ ahí estaba de quién había sacado ese carácter tan impredecible, se destapó para despertarse por el frío que se colaba por su ventana mientras miraba su techo beige.
Nuevamente estaba ahí pensando en la pálida, habían pasado dos días desde que la vio irse con Mitsuya ¿por qué ayer no fue a clase?, sólo se la cruzó al día siguiente por la noche cuando él volvía de golpear a otros débiles según el, y allí estaba. Parada enfrente suyo mirando como su uniforme estaba ensuciado con manchas de sangre, respondiendo sólo un ━ Sal, bicarbonato y limón para quitar la sangre de la ropa.━ y se marchó dando su espalda a la figura del chico con ojos caobas.

Otros golpes lo hicieron reaccionar, sabía que su madre entraría así que se levantó y se puso la parte inferior de su uniforme justo en el momento que sintió su puerta abrirse por su madre.

Desayuno, ahora.━ Con la camiseta en sus manos se dirigió a higenizarse para luego desayunar obligado, dándole un beso por encima del cabello negro a su madre se dirigió a corridas hasta el tercer piso escaleras abajo, ahí vivía la dueña de sus pensamientos justo cuando llegaba a su puerta esta se abrió dejando ver que poseía la falda del uniforme sin la necesidad de sus medias largas mostrando por primera vez la piel de sus piernas.

Buenos días, Mimi. ━ Saludó burlón ante el apodo que el amigo rubio de ambos le había puesto, sólo escucho un bufido y paso por su lado ignorado nuevamente su presencia. ━ No me ignores y vayamos juntos, rubí. ━ ¿Había dicho aquel apodo en voz alta? no daba más de imbécil, solo en sus más recónditos pensamientos la llamaba así.

La fémina paró su andar para mirarlo con sorpresa en su rostro, resignada volvió a suspirar por décima vez desde que se despertaba y le hizo una seña con la cabeza indicando que la siga.

El masculino se emocionó siguiendo los pasos de su compañera desde cerca.

Un silencio sepulcral era lo había entre ambos, no iba a negarlo le gustaba su compañía silenciosa pero lo hacía poner nervioso el saber que con los demás dedicaba bonitas sonrisa junto con su suave voz pero a él solamente bufidos y silencio, carraspeo su garganta al ver la pequeña gatita que siempre iba a visitar al parque cerca de su manzana escolar, sin previo aviso tomó la mano delicada de la chicha y la tironeo con delicadeza hasta llegar al parque.

𝗘𝗱𝗶𝘁𝘂𝗺 𝗙𝗶𝗰𝘁𝗮. ━ Baji Keisuke.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora