C3. "I've been talking to the dead..."

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Narrador omnisciente:

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Narrador omnisciente:

Los delgados dedos de la chica de 16 años estaban alrededor de aquel utensilio de cocina, era el almuerzo y como siempre su padre aún no llegaba. Luego de la explicación que aquella rubia le había dado se había sentido feliz, como si de alguna u otra manera aquel castaño ya le hubiera contestado y eso que ni siquiera le había mandando un DM como aquella chica le había explicado.

-Supongo que debo tener paciencia... debo ser buena y no rara como muchas veces lo soy.- susurró moviendo el brocolí en su platillo.

Un fuerte chirrido fue oído por ella en la parte de la sala, mordiendo su labio miró hacia al frente para encontrarse a su padre quitandose el gran saco que portaba siempre para irse a trabajar.

Los pasos se dirigieron hacia a ella para depositar un suave beso en la frente de su hija quien no lo miró por nada del mundo.

-Pensé que me esperarías para comer.- susurró con aquella voz gruesa que lo caracterizaba. La chica solo tragó saliva.

-No pensé qu-que lleg-llegarías temprano...- susurró mirando hacia a su platillo. Sintió la mano de su padre posarse en su hombro haciendola sentir pequeña. Tan pequeña en esa casa promedio en la que vivían.

-Bueno... llegue o no temprano, debes esperarme, no es así?.- preguntó apretando su hombro un poco.

La pequeña miró hacia al lado contrario para evitar el mirar directo de su padre al perfil de ella.

-S-si...- susurró.

-Si qué?.- dijo devuelta aquel hombre.

‐Si, papi...- dijo para recibir un besito de parte de el en su coronilla.

-Asi es... tu sabes que siempre seré papi, el cual va a protegerte, va a amarte y a... respetarte.- el agarre en su hombro disminuyó para luego sentir la mano de aquel apretar con fuerza su brazo haciendola parar de su lugar.

Este la empujó un poco para tomar asiento en donde antiguamente ella estaba, la chica solo pudo quedarse quieta mirando los movimientos de su padre.

Su mano fue a parar en el utensilio para probar aquellos vegetales que estaban en el plato de la niña. De inmediato lo escupió con fuerza hacia a ella quien retrocedió de inmediato.

-QUE NO PUEDES HACER NADA BIEN EN ESTA MALDITA CASA?!.- gritó hacia a ella, tomó el plato para dejarlo caer con fuerza hacia al suelo.

La chica solo pudo temblar al notar que su padre se dirigia a ella, su gruesa mano tomó su delicado cuello apretando con fuerza. La aventó contra la pared y aun con la mano en su cuello la miró con furia.

-Estoy harto de que no puedas hacer ni una puta cosa bien, alyssa! no sirves ni para hacer un maldito plato de comida!.- le dije, ella solo sollozó intentando quitar las manos de su cuello, este la apretaba con fuerza y casi no podía respirar.

-Y-ya...- intentó decir, gruesas lágrimas bajaban por sus mejillas.

-Ya? YA?.- gritó volviendola a estrellar en la pared, sin pensarselo más, una bofetada con fuerza fue a parar a la mejilla de la chica provocando ardor y una cortada gracias al anillo en su dedo.

Su cuerpo aterrizó en el suelo, su mano intentaba apaciguar el dolor en su mejilla, sentía un liquido caliente en esta pero no le importaba, no ahora.

-Espero que con esto aprendas a ser útil...- las palabras de su padre la hicieron cerrar sus ojos con dolor. Toda aquella palabra que le decía, eran verdades que ella más que nunca sabía.

Los pasos del hombre se oyeron salir de casa, un portazo luego y el ruido de la camioneta siendo prendida para acelerar e irse.

Sollozó en silencio y se levantó de a poco, miró los pedazos de cristal en el suelo junto a los vegetales y la carne esparcida. Suspiró derrotada y sin más fue a la cocina por bolsas para recoger todo.

Una vez listo, se retiró de ahí hacia a su habitación.

A pesar de sus golpes recientes le emocionaba la idea de mandarle un mensaje a su principe, a aquel que la amaba y la respetaba en sus historias que escribía a veces.

Sacó su celular, era algo viejo pero servía.

Hoy, 8:07 pm
Alyssa A:)
Hola:3

Miró su mensaje muchas veces, suspiró nerviosa y cerrando sus ojitos apretó el botón de Enter para enviar.

Varios minutos pasaron, el no contestaba por lo que apagó su celular y lo dejó en su escritorio. Haciendo una mueca se levantó de la silla y entró a su cuarto de baño, se aseó y se puso su pijama amarilla.

Alyssa amaba el color amarillo, era un bonito color para alguien como ella.

Una vez afuera se acercó a la ventana, la luz estaba encendida y el chico estaba en su escritorio escribiendo unas cosas. Se sintió mal, su estómago daba vueltas y no sabía si era por los nervios o por no haber comido nada.

Agarró su celular para ir hacia a su cama, lo checó una última vez y el mensaje aparecía como no leído. Sus ojitos se llenaron de lagrimas, es que acaso el tampoco iba a salvarla de ese castillo tan alto en el que vivía presa y con ganas de aventarse de el?.

-Ay no.- susurró entre su almohada, se sentía desilusionada pero desanimada. Ya llevaba un buen tiempo, tiempo en el que debía ya haber contestado. -I don't feel safe in this bed...- su vocesita empezó. -There are voices in my head...- sorbió su nariz. -I've been talking to the dead...- su labio se frunció, era un vago intento de alejar el lloriqueo que tenía. -And the fear baptised me...- sus ojos se cerraron por completo.

Su cuerpo se relajó y solo así pudo dejarse llevar.

Aquella canción la relajaba en los malos momentos pero no la alejaba de su tristeza, era como alejarse de todo su tormento, alejarse de sus molestias, su timidez... alejarse de su monstruo.

Entre aquella oscuridad en la vida real, un tintineo suave parecido al de una vibración se sintió.

La pantalla de su celular prendió.

Hoy, 11:11
Aidan G.
Hola.

















































¿Crees que ellos empiecen a hablar?

¿Bien o mal?

¿Crees que alyssa está obsesionada?

Meta: 10 votos y muchos comentarios >.<

Sé que está empezando algo aburrido pero prometo que en unos 2 o 4 capitulos se pone re bueno🤧💃.

Cheers💃
-Mar H.

𝑯𝒐𝒘 𝒕𝒐 𝒃𝒆 𝒎𝒆 [𝑨𝒊𝒅𝒂𝒏 𝑮𝒂𝒍𝒍𝒂𝒈𝒉𝒆𝒓 & 𝑻ú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora