Transmigrar a un CLICHÉ

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Mi nombre era Jazmín Ortellado, vivía en un hermoso país lastimosamente manchado por la corrupción, la delicuencia y el narcotráfico.

Pero era mi país y yo lo amaba, también lo criticaba y me dolía, pero era mi basura, y yo la defendía como la rata del meme ¡No toques mi basura!

Hasta que me convertí en una víctima más, me atropelló un borracho y mi muerte quedó impune porque ese borracho era hijo de un político corrupto.

Como si eso no fuera suficiente, debido a la injusticia mi alma casi queda encadenada a esa ruta, pero un sistema de transmigración me ofreció una nueva oportunidad.

Y tu pendeja dijo sí.

De haber sabido no lo aceptaba.

Esos hijos de puta me mandaron a vivir a una estúpida historia cliché de adolescentes gringos que solo piensan en bullying, amores y la maldita fiesta de graduación.

Y acá tu pendeja se convirtió en la amiga de la villana.



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