Ella o Yo.

Una Carta Mejor.

- Sett, no creo que sea una buena idea. – dijo Jayce -

Después de la pelea de ayer, Sett tenía el derecho de poder acercarse a Aphelios, entre comillas pues para hablar con él a solas es citarlo con una carta que llame su atención así que, antes de que empezarán las clases y el chico llegara estaban en el casillero del ya mencionado.

Sett al regresar del colegio, se puso manos a la obra para hacer una tarjeta adecuada toda la noche para poder hablar con él dichoso Lunari quien le ayudaría en las olimpiadas del estudiante.

- Mira.. Se que te dijimos que Aphelios - San es de los más amables del consejo.. Pero deberías.. No se.. Buscar otra opción. – dijo Garen rascando su nuca y mirando al vastaya con preocupación.

- No estoy pidiendo una segunda opinión chicos, además; si ustedes no me van a ayudar nadie lo hará así que el es mi única esperanza.

Decía Sett viendo la tarjeta que había escrito con entusiasmo y esfuerzo especialmente para el chico que lo ayudaría a ascender.

El vastaya metió la carta al casillero por las rejillas y miró a los lados mientras que sus compañeros estaban nerviosos.

- Ya lo hiciste, ya nos vamos; no deberíamos permanecer aquí. – replicó Wukong quién se fue de largo del pasillo junto con Jayce.

Garen se quedó viendo a Sett y alzó ligeramente la voz. – Sett ¿no vienes?

- Ya los alcanzaré, yo me quedaré a ver el casillero a lo lejos. – Sett avanzó al otro extremo de la otra fila de casilleros y se recargo sobre estos sin quitarle el ojo al Locker en donde había dejado la carta.

Garen miró al pelirrojo y se dio la vuelta para irse con Jayce y Wukong, que iban al club de luchadores.

💥

Aphelios y Alune iban saliendo de su casa que era algo discreta, del tipo moderna sin llamar la atención.

Miraban que todavía se veía el manto de la oscuridad en el cielo y la luna se escondía.

Alune miraba su teléfono mientras que cargaba su bolsa donde llevaba libretas, lapicera organizada y su bento que estaba envuelta en un pañuelo blanco con corazones grises.

Y Aphelios al igual que su hermana cargaba con su bolsa del colegio que llevaba lo mismo solo que el pañuelo que envolvía el bento era negro con lunas blancas.

Mientras esperaban su transporte, Aphelios miraba el logo de la escuela que se encontraba enmarcada en la maleta que cargaban los mellizos.

Pensaba en la complejidad de estudiar.. Como todo tu futuro depende de esto y que aún así un título no te respalda completamente, no te promete nada, un título no quiere decir que te ganaste el cielo y aun así, si logras algo; la cima es solitaria y poco a poco dejaras de sentir lo que es la soledad.

- Aphelios.. ¿Estas bien? – dijo Alune posando su mano sobre el brazo de su hermano quien estaba viendo la calle sin expresión alguna.

El chico solo hizo un sonido de sorpresa y asintió con su cabeza ligeramente con tranquilidad.

Alune sonrió ligeramente y de pronto vieron luces de un auto que los iluminaba a ambos.

La limusina que los venía a recoger para dejarlos en la academia había llegado, el chófer ya lo conocían llamado Shen, un amigo de la familia de hace mucho quien los cuidaba como un tío.