Legado

VI.- Gerard

Stiles había estado practicando bastante sus poderes y se había concentrado en eso así que no había tenido mucho tiempo de hacer otras cosas como socializarse o buscar arreglar las cosas que Derek, el lobo se la vivía detrás del castaño, quería hablar con él pero Stiles tenía cosas más importantes que pensar, solo quería acabar con Gerard y vengar la muerte de su familia, su clan. Los amigos de Stiles, la mayoría se habían apiadado de Derek y de vez en cuando le hablaban de lo que había hecho Stiles en eso años, los únicos que parecían no quererlo cerca del castaño eran Jackson y Scott, quienes parecían siempre estar a la defensiva cuando él estaba cerca.

Las cosas estaban extrañas en la mansión Hale por todo eso pero más porque los hermanos Stilinski estaban siempre entrenando y llegaban a sus límites pero no se detenían a hí, ellos seguían y seguían pero los demás no podían entenderlos, no sabían que era esa perdida por completo, ellos habían logrado salvarse de los ataques que habían tenido pero no podía imaginar el dolor que tenían Stiles y Jordan, no lo que pasaba por sus mentes.

- ¡Stiles! – le llamó Scott caminando hacia los hermanos, Stiles no se había convertido por completo pero sus ojos brillaban y estaban rasgados al igual que algunas escamas habían cubierto su rostro y manos

- ¿Qué paso Scotty? – le preguntó el castaño volviendo a su forma humana

- Necesitan tomar un descanso además de que Thalia ya tiene la comida lista

- Vamos Jor – le dijo Stiles viendo a su hermano con una pequeña sonrisa

El mayor suspiró pero después paso sus brazos por los hombros del menor y camino junto con Scott a la mansión donde todos los esperaban con sonrisas, desde que les habían dicho la verdad las cosas habían mejorado en la manada, se sentían mucho más unidos, la confianza había crecido bastante. Solo estaba la cuestión de Derek y Stiles pero fuera de eso todo parecía ir bien pero ellos no sabían lo que ocurría en la frontera del bosque, donde entraban un grupo de cazadores liderados por el mismísimo Gerard Argent.

Stiles sentía todo su cuerpo en llamas, algo venía y sabía que era peligroso, el dragón de alguna manera estaba conectado al nemeton y podía sentir que le avisaba de la llegada de alguien pero su conexión no era tan fuerte para saber con exactitud que sucedía y quien había entrado al territorio Hale.

- ¿Estás bien? – preguntó Derek asustando un poco la castaño que estaba en el pequeño balcón de la mansión viendo al bosque

- Creo, algo entró al bosque

- ¿De qué hablas? ¿Es peligroso? Deberíamos ir

- No Derek, debemos de quedarnos aquí. Algo me dice que sí es peligroso pero podremos con eso, otra cosas además de esos entro al bosque pero esto es puro solo puedo sentir amabilidad y cariño

- Confío en ti

- Lo sé

- He tratado de hablar contigo en estos días- comentó Derek recargándose en el barandal

Stiles suspiró, tal vez era el momento de hablar un poco, en unos minutos no iban a solucionar cosas de años.

- Lo sé, de cierto modo te estaba evitando y me empecé a concentrar en los entrenamientos

- Lo noté, quería darte tu espacio pero creo que no podemos estar evitándonos todo el tiempo y más cuando somo compañeros

Stiles alzó una ceja sorprendido, él no sabía eso y Derek se dio cuenta de que la había cagado y lo había dicho antes.

- ¿Así qué somos compañeros? ¿Desde cuándo los sabes? – le pregunto Stiles tratando de que no se viera su emoción

- Desde el primer momento que te vi

Stiles sintió como el aire abandonaba sus pulmones y sentía un hoy en el estómago.

- No me quieres como compañero, por eso nunca me lo dijiste, ¿no?

- ¡Que! Claro que te quiero como compañero, siempre te quise como uno. Hace seis años salí con Paige porque quería que fueras libre, eras un niño y no podía atarte a mí, sí fue mi error un año después meterme con Kate. No hice las cosas bien y por eso te lastimé más de una vez pero tenía miedo a que no me quisieras o atarte y que al final decidieras que no quieres una vida conmigo. Soy un idiota pero este idiota siempre te ha querido y estos cinco años te extrañe como nunca había extrañado a nadie pero necesitábamos este tiempo separados para crecer y madurar sobre todo yo y también porque me siento culpable de tus cicatrices, si yo no hubiera estado con Kate el incendio jamás habría sucedido.

Stiles suspiró y tomó las manos de Derek entre las suyas.

- Estoy enojado porque pensarás todo eso, es mi decisión si quiero estar contigo o no, no puedes tomar esa decisión tú y necesitaré tiempo para perdonarte y debes de ganártelo. – sonrió con cariño – Lo de Kate no fue tu culpa, esa mujer se aprovechó de ti, eras un niño Derek y ella una mujer adulta así que de eso no hay discusión además no hay nadie aquí que te culpe

- ¿Podemos intentar ser pareja? – le pregunto Derek con temor

- Lo podemos hacer pero tienes que enmendar muchas cosas y te deseo suerte con mi hermano, Scott y Jackson

Stiles soltó las manos del lobo y entró de nuevo a la mansión dejando a Derek con una gran sonrisa en sus rostro.

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En la noche todos se encontraban durmiendo cuando Stiles se levantó y corrió fuera de la mansión seguido por todo encontrándose con Gerard y sus cazadores.

- El príncipe dragón, la verdad pensé que habías muerto hace años pero ahora eres todo un dragón adulto – dijo Gerard con burla

Los cazadores comenzaron a disparar y la manada atacó junto con Stiles, las cosas no estaban a su favor o eso creían pero cuando vieron la sonrisa en el rostro de Stiles y como llamas de fuego salían de lo oscuro del bosque se relajaron, unas figuras se podían ver además de ojos brillantes, ellos lanzaban el fuego.

Stiles se transformó por completo corriendo hacía Gerard que trataba de huir pero fue en vano cuando el dragón lo tomó con su mano y después se lo tragó por completo.

- Si luego tienes dolor de estomago yo no me hago responsable – dijo Jordan viendo a su hermano con una mueca de asco haciendo reír a la manada, solo esos dos podían ser de esa manera después de acabar con unos cazadores

- Veo que han crecido bastante – dijo una voz desde el bosque

Un hombre rubio castaño de ojos azules, con una cicatriz cubriendo su rostro salió del bosque, atrás de él había más hombres y mujeres que sonreían con cariño.

Stiles volvió a su forma humana mientras las lágrimas corrían por su rostro.

- ¡Papá!