Un Amor que Durará Para Siempre (Tai x Mimi) - Digimon Adventure

Capitulo 8.- Volviendo a ser Niños

Tai vuelve a su casa después de ser rechazado por Mimi tras haber comido una gran porción de comida china; al volver a casa, Tai comenzó a sentir una feroz confusión ¿Estaba feliz porque sigue siendo amigo de Mimi? ¿O estaba triste porque Mimi no quiere ser su novia? ¿O acaso estará enojado por no declararse a ella antes de que ella le dijera precisamente "eso"? Parecía que esos pequeños personajillos de "Intensamente" entraran en una feroz discusión en su cerebro sobre quién tomaría el control de Tai.

En ese momento, Tai mismo comenzó a tomar las riendas de su propia mente, cómo si estuviera irrumpiendo en la pelea de los personajillos y les dijera "YA BASTA", y haciéndolos tranquilizar de inmediato.

Después de un suspiro, Tai se desvanece y se avienta a su cama, y comienza a tener una siesta reparadora; acto seguido, comienza a ser despertado por Kari.

- ¡Tai, hermano! - dijo Kari con un megáfono, despertandolo rápidamente - ¡No es momento de dormir todavía! -

Tai comienza a despertar de sopetón y comienza a asustarse con algo de miedo - ¡¿Qué pasó?! ¡¿Dónde diablos estoy?! -

- Estás en tu casa. - dijo Kari - Por cierto, Yolei y Ken me hablaron sobre lo de tu reunión con Mimi y cómo ella te rechazó. -

Tai, sorprendido, le responde: - ¿Ella, rechazarme a mi? ¡No, ¿Cómo crees?! Para comenzar, ella y yo sólo somos buenos amigos. - Tai comienza a sonreír - Nada ni nadie podrá impedir que sigamos siendo amigos. -

- Admítelo, hermano - insiste Kari - sigues enamorado de Mimi. -

- Bueno, si tú lo dices... - afirmó Tai.

- Bien, creo que necesitarás tomar un buen descanso y tal vez una ducha. - dijo Kari al ver que la ropa de su hermano está algo manchada de sudor - Descuida, buscaré ropa fresca para que la pongas. -

Tai se percata de que su ropa tiene rastros de sudor y dice - Diablos, ¿Cómo lo pude haber olvidado? -

Tras echarse una ducha y después de una cena ligera, Tai vuelve a su cuarto y comienza a dormir para recuperar fuerzas y reparar sus sentidos después de un agitado día.

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Al amanecer, Tai deja su cuarto y hace lo que es habitual en todos los días, ya saben, el desayuno y esas cosas. Pero aparte de eso, prendió el ordenador para checar en el correo algunas novedades con respecto a su Tesis sobre la Coexistencia entre Humanos y Digimon, con el que se tituló en la Universidad de Soumei, y con el que espera ser aceptado para recibir un doctorado en la Universidad de Harvard.

Tras revisar los correos, Tai suspiró un poco y se dio cuenta de que aún lo habían novedades por el momento.

De repente, empezó a escuchar una serie de golpes en la puerta, por lo que Tai comienza a correr rápidamente.

- ¡Oye, ¿Quien toca?! - Tai baja hacia donde está la puerta, y al abrir la puerta, comenzó a ver un rostro que le era familiar.

- Hola, Tai - exclamó Mimi dándole un abrazo - Me da mucho gusto verte de nuevo. -

- Yo también, Mimi. - dijo Tai un poco pensativo.

Mimi, al ver la cara de Tai, piensa que aún no supera el que ella le "rechazó".

- Oye Tai, ¿Por qué tienes la mirada triste? - le pregunta Mimi - ¿Acaso aún sigues dolido por lo que te dije ayer? -

- ¿Yo, dolido? - dice Tai con una gran sonrisa - No, para nada, al contrario, me alegra mucho ser tu mejor amigo en todo el mundo. -

- Bien, por ser mi más grande amigo, voy a darte una recompensa por aceptarlo. - declara Mimi.

- ¿Lo dices en serio? - pregunta Tai con curiosidad.