Después de varios años, la relación entre Mimi y Tai será puesta a prueba por el mayor desafío de todos: ¿Seguirán siendo "sólo amigos" o serán "algo más"?
Tai Kamiya y Mimi Tachikawa fueron al "Otaku Bar" para poder pasar un buen rato y recordando nuevamente todos los hermosos momentos que ambos vivieron en sus infancias, cuando ambos llegaron al Mundo Digital. En ésta ronda, que comenzó al comienzo del anochecer, Mimi y Tai bailaron al ritmo de la música, luego comieron grandes cantidades de comida; más al rato, Mimi comenzó a entrar a cantar en la hora de karaoke, dejando a Tai algo sonrojado al escuchar la dulce voz de Mimi.
Después, Tai se sube también a cantar una que otra canción y, aunque eso parezca una cursilería, Mimi y Tai también hicieron varios duetos cantando canciones, algunas alocadas, otras más romanticas, y uno que otro opening de ciertos animes que ciertas gentes conocen y que son populares por las fanaticadas.
En ese momento, aparece uno de los "maestros de ceremonias" del lugar (o MC para abreviarlo) para dirigirse al público que estaba en el recinto en ésta noche.
- ¡Buenas noches a todos aquí en "Otaku Bar"! - exclamó el MC en altavoz - ¡Dentro de treinta minutos daremos inicio al concurso de Cosplay, cualquiera que muestra interés en participar, que levante la mano! -
Al escuchar ésto, Tai contesta: - Espera, no traigo disfraz, es que... -
Las palabras de Tai quedaron interrumpidas cuando éste se percató de que Mimi le levantó la mano por él; éste, al ver a ella, vio que Mimi tenía ambas manos levantadas, dejando sorprendido a Tai.
- ¡Vamos, Tai! - le dijo Mimi en su oído - ¡Participemos en el concurso de Cosplay! -
- ¡Pero si no traigo disfraz! - le aclaró Tai.
- ¡Descuida, tengo dos disfraces, e hice uno para tí! - le suplica una muy sonriente Mimi - ¡Vamos, Tai, anímate! -
Tai suspira un poco y le responde: - Bueno, si tanto insistes en ello... -
- Bien, pues no se hable mas, hagamos sorprender al público. - dijo decidida Mimi.
Antes de marcharse, escucha una voz femenina que les saluda: - ¡Hola Tai, hola Mimi, me sorprende verlos en éste lugar! - aquella voz era de nadie más y nadie menos que de Menoa Bellucci, quien había venido desde Estados Unidos para tomarse unas dos semanas de vacaciones en Japón y conocer un poco más de la enigmática cultura nipona.
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- Espera, tú eres... - dijo Mimi.
- ¡Menoa! - exclama Tai, quien corre a saludarla - ¡¿Qué haces aquí en Japón?! ¡¿No se suponía que estabas en Norteamérica?! -
- Es que me dieron quince días de vacaciones. - le responde Menoa.
- ¿Y cómo nos encontraste justo en éste lugar? - le pregunta Mimi.
- ¿Conocen a Yamato Ishida? - pregunta Menoa.
- ¡Por su puesto que lo conocemos! - responde Tai - ¿Qué relación tiene con ésto?
