Un Amor que Durará Para Siempre (Tai x Mimi) - Digimon Adventure

Capítulo 12.- ¡Un giro del destino! ¡Juntos para siempre!

Aeropuerto Internacional de Haneda.

Tai se prepara para viajar a Nueva York con el propósito de conseguir un doctorado gracias a que su Tesis sobre la Coexistencia entre Humanos y Digimon fue aprobada por la Universidad de Harvard.

- Bueno, dentro de algunos minutos, el destino de mi vida se definirá, en cuanto tenga mi boleto a Nueva York, no habrá marcha atrás. - se dijo así mismo Tai, quien estaba vestido con un reluciente traje de gala.

Tai toma una fila, la cuál se tardó un poco más de lo que aparentaba. Cuando Tai finalmente tuvo su turno, se preparó para pagar su boleto.

- Saludos. - saluda Tai a la recepcionista - ¿Me da un boleto de ida para la ciudad de Nueva York? -

- Gracias, pero los boletos para el vuelo de los próximos cinco minutos ya quedaron totalmente agotados. - respondió la recepcionista, quien continuó - Si gustas, puedes esperar al siguiente vuelo, el cuál llegará dentro de unas... Cinco horas y media. -

- De acuerdo, esperaré. - dijo Tai con recelo.

Tai se sentó en una silla mientras estaba esperando al siguiente vuelo a Nueva York; sin embargo, le pareció demasiado aburrido esperar que, después de cinco minutos, mejor decidió salir de la terminal del Aeropuerto.

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En otro lugar, Mimi se encontraba en la parte trasera del auto, mirando la iglesia que tenia enfrente.

- Bueno, llegará el momento de la verdad. - dijo Mimi.

La Sra. Tachikawa, al ver a su hija arreglarse un poco, le dice: - Hija, ¿aún no vas a entrar? -

A lo que Mimi le responde: - Si, sólo dame 5 minutos más mamá, y enseguida bajaré del auto. -

El Sr. Tachikawa le contesta:  - De acuerdo hija, te esperaremos afuera. -

Los padres de Mimi se bajan del auto mientras esperaban a que su hija bajara también del auto, pero bastaron solo dos minutos de espera para que la novia, es decir, Sora, saliera del auto en el que estaba. Cuando Mimi la vio, bajó rápidamente del carro para saludarla.

- ¡¡¡Sora!!! - exclamó Mimi.

Al escuchar la voz, Sora dice: - ¿Qué?, ¿Acaso es...? - ella voltea.

Mimi le saluda - ¡¡¡Espérame Sora!!! -

Sora rápidamente la reconoció: - ¡¿Mimi?! -

Mimi se detiene y dice: - Al fin te encontré. -

Sora le replica: - Mimi... ¡Me alegra mucho verte de nuevo, creí que ya no me hablarías jamás! - Sora y Mimi se abrazan - ¿Estás lista para ser la madrina en mi boda? -

- Por supuesto. - responde Mimi.

- Me alegra mucho. - Sora prosigue - ¿Están todos los invitados? -

- Claro. - dijo Mimi.

- Por cierto, tengo una duda... - Sora continúa con curiosidad - ¿De casualidad vendrá Tai? -

Mimi, al escuchar el nombre de quién alguna vez fuera su amigo, sintió algo de indignación y contestó: - Lo siento, pero él y yo ya no somos amigos; él ahora forma parte de un oscuro pasado que quiero borrar de manera definitiva, por que... - Mimi se ríe - me insultó de la forma más denigrante que jamás hizo. -

Sora al escuchar esto sintió como se aceleró un poco su corazón, no podía ocultar el miedo que sentía al imaginar dicho escenario en que dos de sus grandes amigos, Tai y Mimi, llegaran a discutir con insultos.