My strange addiction

CAPÍTULO 6

Capítulo 6: "I'm a mess"

¿Qué coño podría estar haciendo esta chica para no contestar mis mensajes? Seguro que estaría hablando con el buenazo de Louis.
Me encontraba en la puerta de la casa de mi mejor amiga, con la intención de prepararme junto a ella para ir a una fiesta en casa de unos colegas de Rocky.
Después de llamar por quinta vez al timbre y escribirle una infinidad de mensajes, decidí recurrir a mi última opción:

Belle: Eddie! Podrías abrirme la puerta de tú casa porfavor?? Tu hermana está sorda.

Su respuesta llegó rápidamente.

Eddie Teddie: Perdona, no sé quien eres.

Creo que me decepcioné más de la cuenta al ver que Edward no me tenía agregada en sus contactos.

Belle: Soy Belle :)

Edward Blue: Ah! Dame un segundo y te abro.

Pasaron unos segundos hasta que la puerta se abrió y una agradable imagen llegó a mis ojos: Ahí estaba Eddie, con una camiseta sin mangas, unos pantalones cortos de algodón y el pelo revuelto. Tenía las mejillas enrojecidas así que estaba claro que lo había pillado haciendo deporte.

Interesante imagen...

-¿Vas a pasar o...-Mierda, me había quedado mirándolo demasiado tiempo.
Asentí con la cabeza e intenté mantener el menor contacto visual posible y entré en la casa para ir a la habitación de Lav, siendo consciente de unos ojos verdosos posados en mi nuca.

Al llegar, me adentré en la habitación sin llamar a la puerta con mucha indignación. -Me has tenido casi diez minutos esperando en la puerta y me has hecho cagarla delante de tu hermano espero que tengas una buena excu...- Divisé a mi amiga con una cara de estúpida al tiempo que hablaba por teléfono y me hacía señas para que me callara.

-¡Sí, me parece muy buen plan!- dijo al tiempo que yo le miraba y gesticulaba un ¿Louis? Con los labios. Ella asintió mientras escuchaba lo que decía.

-Yo también tengo muchas ganas- mi amiga se ruborizó y yo empecé a tener náuseas de la patética situación que estaba viendo.

-Bueno, hablamos luego- pausa.- Yo también.- Lavender cogió aire y se estampó una de las almohadas de su cama en la cara- Ahhhhhh.- gritó contra la pobre almohada.

-Pero bueno chica, si que te tiene enamorada el tal Louis.-dije mientras enarcaba una ceja.

-¡Me ha pedido una cita!

-¡Vivaa!- grité yo con un tono más que sarcástico.

-¡Eh! Que tú quedes con los tios solo para enrollarte con ellos no quiere decir que yo no pueda tener algo más serio, alégrate por mi.

En el fondo, me alegraba mucho por ella, pues todos los chicos con lo que ha estado, han acabado haciéndole daño y he sido yo la que ha tenido que tragar largas noches de lloreras, helados y comedias románticas. Aún así, estaba alerta por si a Louis se le ocurría algo que no debería de hacer.

-Que si, que si que me alegro.- dije quitándole hierro al asunto.- ¿Me dejas el vestido rojo?-dije mientras ponía mi cara más inocente.

Y así mi mejor amiga y yo empezamos a prepararnos para la fiesta de mi colega.

Después de media hora de vestidos, pintalabios y tenacillas para el pelo, Lav y yo estábamos listas para irnos a la fiesta.

Al bajar las escaleras, nos encontramos a los padres de mi mejor amiga charlando en el salón. -¡Tened cuidado!- nos dijo Holly. Los padres de Lav, solo dejaban salir a su hija los fines de semana, de ahí la razón por la que alguna que otra vez Bratt y yo la recogieramos a hurtadillas.