Capitulo 3: El camino a la felicidad

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–¿Estás seguro que no quieres unirte?– preguntó Sarv una vez mas a un joven que estaba rezando

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–¿Estás seguro que no quieres unirte?– preguntó Sarv una vez mas a un joven que estaba rezando.

–no, por ahora no, pero estaré viniendo– respondió mientras yo veía todo desde lejos, me mantenía oculto, ya que se sospechaba que estaba aquí gracias a los ladrones de la otra noche.

–por supuesto– le regaló una sonrisa y lo dejo solo para que continuará.

Se acercó hasta donde yo estaba, la sacristía.

–no creo que sea un policía– se cruzó de brazos -sino se hubiera unido-

–pero es raro que desde esa noche vengan a la misma hora– susurré.

–lo se y me ilusionan– dice alzando un poco la voz, yo solo hago la señal que guarde silencio –perdon– susurro

–como sea ya quiero que se vaya–

Ella se asoma y ve como este sale, yo solo escucho los pasos alejándose, ambos soltamos un suspiro aliviado al escuchar la puerta cerrarse.

–¿Estás segura que no quieres entregarme?– pregunté de nuevo

-no voy a iniciar está discusión- dice algo disgustada, ya se iba pero la acorrale antes de pasará la puerta, tenía que saber la verdad

-te lo estoy preguntando bien, hoy no quiero pelear contigo- dije algo serio

-esta bien- se recarga en la puerta -es que no pienso que seas alguien malo o un asesino, yo puedo ver en ti algo bueno- ella toca mi mejilla suavemente para después abrazarme, sinceramente no sabía que hacer así que solo la dejé.

Pase toda mi vida huyendo de la "justicia" ya que para todos era el malo del cuento y no los culpo ya que perdí ese sentimiento que le llaman humanidad, en cierta forma disfruté de matar a esa gente rica con tal de buscar esa justicia que se perdió y que ahora todos llaman corrupción.

Aunque nadie me crea estar con ella me a traído cierta felicidad pero ya no quería traerle problemas ni preocupaciones.

–bueno ya es hora de cerrar– me suelta muy feliz.

Me quedo mirando un poco a sarv y está se quita su Toca junto el velo para dejar caer su largo cabello rosado, sigo pensando como cabe todo eso.

Me puse a limpiar el lugar, si bien no vienen muchas personas eran las suficientes para dejar algo de basura, de la nada comienzo a escuchar a Sarvente cantando con una dulce voz.

–Porque dios está aqui~ y es el es bueno todo el tiempo– ella me voltea a ver así que rápido me pongo a barrer, creo que se dió cuenta.

No quería incomodarla pero era la primera vez que canta y era algo dulce.

–¿Tú no cantas?– pregunto dejando a un lado lo que hacía.

–no creo tener la voz para eso– respondí

Too Clergy [Sarv X Ruv]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora