Castigo

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Esa noche, el inframundo fue testigo de la masacre más grande en la historia del bajo mundo.

Muchas famiglias fueron aniquiladas en un parpadeo, consolidando el miedo de cada mafioso hacia los Vongola. Nade se atrevió a interponerse en el camino de esas bestias incontroladas que vestían pieles humanas.

Mientras tanto, los civiles ignoraban felizmente los horrores mientras dormían toda la noche, protegidos por un delgado velo de ilusiones hechas por los ilusionistas.

Aquellos que estuvieron involucrados en la 'limpieza', como les gusta llamarla, se complacieron mucho en golpear a sus oponentes.

Sin embargo, la mañana siguiente fue un día que nunca esperaron. Cuando Tsuna se despertó y se entero de su pequeño viaje nocturno, estaba lívido.

"¡¿Hicieron QUÉ?!".-Grito el castaño. Apretando los dientes, enfurecido con la gente frente a él.

"Pensé que les había dicho que no hicieras este tipo de cosas".-Gruño el castaño.-"No es que sea su culpa ni nada. ¡Eso no siquiera ha sucedido todavía!".-Gritaba Tsuna frotándose las sienes.

"Es mejor cortar el problema de raíz. Conocimiento común, Dame-Tsuna".-Comento Reborn, lo que se gano una mirada de Tsuna.

"Sí, lo sé muy bien. Tú me enseñaste eso, pero eso no justifica tus acciones Reborn".-Se inclino el Décimo, su aura intimidante demandaba completa atención.

"Lo que hicieron causo pánico en el inframundo. Esto puede conducir a problemas más desastrosos. No sé por qué ustedes y -Dios no lo quiera- incluso los mismos Vindice pensaron que era una buena idea hacer esto. Y déjenme recordarles, No fue un buen plan".-Los ojos del Joven jefe brillaban en naranja neón, mostrando su ira.

"La única razón por la que no estoy tratando de matarlos a todos es por el hecho de que protegieron a los civiles y les impidieron ver el caos que ustedes, sabios y civilizados , han causado".-Comento Tsuna con sarcasmo.

"Por eso no cocinare postres o comida durante tres meses como castigo."

Un grito de indignación estallo cuando Tsuna emitió el veredicto.

"Silencio".-La intención asesina de Tsuna se elevo y los abrumo, cerrándoles la boca.

"Considérense afortunados de que no decidiera golpear personalmente a todos y cada uno de ustedes".-Les dio una mirada mordaz a todos, el castaño.

"Tu castigo se hará cumplir a partir de hoy. Sin objeciones".-Hablo con firmeza antes de levantarse para salir de la habitación.

"Oh, y una cosa más".-Tsuna les mostro el libro negro.-"No les diré nada sobre mis sueños durante tres meses. Considérenlo como otro castigo por actuar sin mi consentimiento".-Dijo antes de salir de la habitación, ignorando el desacuerdo de todos.

Y así, durante tres meses sufrieron, privados de la comida celestial de Tsuna, plagados de preocupación y curiosidad por los sueños de Tsuna. Y durante esos tres meses, también juraron no volver a incurrir en la ira del Cielo, no sea que los queme hasta dejarlos crujientes.

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Espero que les haya gustado la historia y si lo hizo agradezco su voto y también el voto a la historia original, para que la autora vea que también amaron mucho su historia.

Noches de Insomnio.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora