Escena 1

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Escena 1

Una zorra con reglas

El aire me enfriaba la piel al descubierto y me hacia temblar un poco, movi mi cuerpo perezosamente mientras me acomodaba mas pero el crujido de mi ventana definitivamente no me dejaría tranquila. Me desperté entre mis suaves y frescas sabanas con diseño de cebra, las adoraba, eran sexys y...

—Otra vez con tus sabanas de puta— 

Andrew entro a mi habitación a su antojo, como siempre, privilegios de ser una de las "Triple A". La segui con la mirada  soñolienta mientras ella camina hacia mi ventana ruidosa, abrió las cortinas con fuerza y sentí como mis pupilas se dilataban por la luz que emanaba desde su lugar, chille como un gato al que le habían pisado la cola y me tape la cara con la sabana

—¿puedes cerrar las putas cortinas?— oí una voz masculina

Uhmm, rico. A mi costado un chico de cabellos castaños y piel blanca trataba de hundirse entre las sabanas y almohadas, durante un segundo me quede viendo las constelaciones que podía formar uniendo los lunares de su hombro derecho, quería ser astronauta otra vez, como anoche, y poder tocar esas manchitas en su piel con mis afiladas uñas

— ¿Se acostaron otra vez? — me dijo mi mejor amiga indignada

Y sí, había caído de nuevo en las redes de Declan pero tenía una razón esta vez

— Una mujer tiene sus necesidades— le dije sonriendo y me levante para poder abrazarla y darle de besitos

— Aléjate, bicho sexual— me alejo riendo — y levántate Declan, falta una hora para que empiecen las clases y debiste irte anoche— susurro rodando los ojos

Mi víctima se levanto de la cama dejándonos verlo completamente desnudo y recordándome porque había caído en sus redes otra vez. Declan era ardiente, sexy, guapo, atlético y un dulce de chico. Tenía el cabello algo largo, pero con la piel dulcemente blanca y cremosa, ya lo había probado. También tenía unos ojazos azules que te derretían cuando te miraban con cara de cachorro;  y ese cuerpazo que le permitía ser modelo en sus ratos libres. Yo era muy exigente con mis victimas y él me daba justo lo que yo pedía.

— ¿Eso... te metió?—

Andrew era algo así como un unicornio, al menos para mí, tenía mi edad y era virgen, cosa rara considerando que era una "Triple A" pero era algo por lo que me sentía orgullosa. Tener una amiga virgen era el equivalente a tener un mejor amigo gay, al menos para mí que soñaba con tener un mejor amigo gay más que nada en el mundo.

—SIP, todo entro— dije con un silbido apoyándome en mi cama con mis codos

Adoraba admitirlo, Declan era grande, pero lo que más me gustaba era lo grueso que era, hacia que sintieras el orgasmo solo con unos cuantos embistes semi circulados, o tal vez era porque ya sabía cómo controlar la situación con él.

— ¿Quieren que las lleve? — se ofreció colocándose sus bóxer y tuve que cerrarle la boca a Andrew antes de que inundara mi habitación con su baba

— Si, por favor— contesto And mientras yo bostezaba

Entre al baño de mi habitación casi como un zombi y algo molesta, quería un round en la mañana ya que se había quedado Declan pero dudaba que And me dejara, me quite la pijama y rápidamente me di una ducha, a diferencia de Declan yo si tenía pudor y me quite la ropa en el baño.

Salí y empecé a buscar que ponerme mientras And y Declan hablaban de que poses eran mejores cuando él tenía el pene así de grueso, no pude evitar reir, ni siquiera yo preguntaba eso y yo era la impúdica en esta amistad ya que Aldrix no estaba presente para hacerme competencia. Me di cuenta de que el clima había cambiado misteriosamente y ahora hacia demasiado calor, elegí un nuevo atuendo en mi armario, un short en este calor que pasaba los 29° ,según mi celular, y me derretía, un polo ligero y volado , unas zapatillas converse y maquillaje. Perfecto.

I'm a Bitch.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora