"rises the moon" yoonmin

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capítulo dieciséis: "save me"

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04 de septiembre 1968

Sábado por la la mañana Jimin se levantó como habitualmente lo hacia en su casa, el no poder dormir por las mañanas le molestaba demasiado desde que era un niño.

Como no tenia nada que hacer, le ayudaba a su madre o a las sirvientas con los deberes de la casa, Jeon siempre despertaba tarde y no tenia con quien jugar.

Siempre habia sido solitario y apegado a sus padres, su único amigo fue Jungkook y un gato que vivio en su patio por dos semanas, luego se fue cuando lo descubrieron por su alergia al pelaje de éste.

Incluso en la escuela no hablaban con el por ser de clase alta y tener mucho dinero, si lo hacian era por interés, algo que nunca sintió de Jeon.

Luego de que Min le contó que cuando pequeño lo habia visto varias veces empezó a indagar en los documentos de su padre y sin duda aparecía la firma del padre de Yoongi.

¿Acaso el padre de Yoongi era ese hombre tan serio que siempre le dio una paleta sabor fresa?

Siempre le dio miedo porque tenia un rostro muy serio y ojos pequeños pero solia ser amable.

¿Y donde estaba Yoongi?

Nunca lo vio, ¿cómo pasó desapercibido  o él era muy despistado de pequeño?
La historia del pastel lo confirma.

Buscó en fotos y preguntó a las confiables sirvientas de su hogar, ella confirmaban que la familia Min visitaba la casa para hacer acuerdos y negocios.

Realmente se sentia frustrado por no haber visto o recordar al azabache de ojos agatunados.

"Buen dia."

Jimin se sobresaltó cuando la grave de voz de Yoongi al despertar resonó en la cocina.

"Me asustas." Dijo con uns mano en el pecho haciendo al azabache sonreir.

Él miró su ropa de dormir color celeste con rayas, la misma de su estancia en Francia.

"Esa pijama me trae recuerdos." Murmuró para que solo escuchara el rubio que abrió su boca sintiendo la sangre subir a sus mejillas.

"No sé de que hablas, Yoongi."

"Uhm, ¿tendré que recordartelo?" Preguntó con coquetería.

"No te atreverias..." Jimin le sonrió mirando aquellos orbes oscuros de forma desafiante.

Acto seguido, Min deslizó su mano por la cálida mejilla del menor atrayendo su rostro al suyo y lamer su carnoso labios inferior antes de juntar sus labios en un fogoso beso.

Jimin soltó un bajo quejido cuando en el movimiento de labios el azabache mordió su labio jalandolo entre sus dientes separandose lentamente.

"Al parecer si lo recuerdas, Minnie." Dijo sobre los labios del menor que anhelaba otro beso de él.

Dejó una de sus grandes manos en la cadera del rubio apegando sus pechos antes de volver a tener contacto con sus labios.