Entre tú y yo

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Estoy nerviosa son las 7:20 la cena en casa de los padres de Rett es a las 8:00 y no sé que ponerme odio los vestidos pero no creo que a sus padres les agrede mi ropa de vagabunda, escucho mi celular vibrar con una notificación en la mesita de noche por lo que lo agarro viendo que es un mensaje de un número desconocido, lo abro y veo que es de Rett asegurado que pasara por mí en unos minutos a lo que le respondo con un simple "okey" aunque ahora que lo pienso ¿Cómo consiguió mi número? me pregunto en voz baja, luego le preguntaré.

Mi ropa se encuentra esparcida por toda la cama, estoy sentada en el suelo con Zeus a mi lado pensando en lo que debería usar, por más que mamá insistió está tarde en ir a comprar un vestido le dije que no, un rotundo no haciendo que no insistiera más. Después de unos segundos pensando me decido por un pantalón de cuero que use una vez en navidad lo combinó con un jersey rosa y mis hermosos botines negros con tacón que me regaló la abuela en mi cumpleaños. Termino de atarme el cabello en una cola de caballo y contempló mi reflejo por unos largos segundos, en mi familia siempre me han dicho que soy hermosa, más yo no lo veo así siempre he sido insegura conmigo misma y nunca me he mirado al espejo sintiéndome completamente segura de mi físico.

Salgo de mi habitación no sin antes agarrar mi móvil y despedirme de Zeus, es un perrito muy dormilón. Cuando llegó a la sala encuentro a mamá hablando con papá mientras ven un programa de cocina, me despido de ellos cuando siento mi celular vibrar por un nuevo mensaje de Rett asegurado que ya está aqui por lo que sin más salgo encontrandolo recostado en una motocicleta Yamaha R6 con un casco en su mano.

- Hola- murmuró por lo bajó llegando a su lado.

- esperó que no te den miedo las motocicletas- es lo único que dice mirándome de pies a cabeza mientras me tiende el casco que tenía hace unos minutos.

- Para nada- digo segura mientras subo y me coloco el casco ganándome una mirada de asombro de su parte- ¿Qué? me gustan- digo de último haciendo que me mire sin creerme nada de lo que digo, rodando los ojos decido agregar algo más.

- Si no me equivoco, esta es una Yamaha R6 ¿Cierto?- pregunto a Rett con una ceja enarcada, quien asiente.

- Sigues sorprendiendome- dice con una sonrisa ladeada mientras me pide que me sujeté lo cual hago sin protestar.

Mientras nos dirigimos a la casa de sus padres me dedico a observar su perfil tiene algunos lunares esparcidos por su rostro, sus pestañas son incluso más largas que las mías y siempre tiene el ceño fruncido justo como ahora, me pierdo en mis pensamientos hasta que se detiene junto a una gran casa de color beige con grandes ventanales que dejan ver hacia el interior.

-Dios, es realmente hermosa- me digo a mi misma en un susurro a penas perceptible mientras nos dirigimos a la entrada.

El interior de la casa es incluso más hermoso, las paredes son blancas con detalles en negro y beige que combinan con los muebles y la escalera en forma de caracol, admirando cada rincón llegamos a lo que supongo es el comedor en donde se encuentran sus padres junto a una niña pequeña igual a Rett solo con la diferencia de que sus ojos son más claros. Está última es la primera en darse cuenta de nuestra presencia.

- ¡RETT! - grita con emoción mientras se dirige hacia sus brazos.

- miren nada más, sí es la princesa Biel- dice este dejando un beso en su mejilla, mientras la pequeña sonríe.

Es curioso ver como Rett un chico de contestaciones cortas y bordes que siempre muestra desinterés hacia los demás, sea tan diferente con las personas que ama. Pienso mirándolo fijamente.

- ¿Quien es ella?- pregunta la pequeña que ya se que su nombre es Biel mirando en mi dirección- es hermosa- susurra no tan bajo logrando que en segundos tenga cuatro pares de ojos puestos en mi y que mis mejillas se enciendan, genial.