Rose
Todos pensaríamos que la primera reacción de alguien al conocer a alguien nuevo es saludarlo u observarlo con detenimiento para tratar de conocerlo, pero ese no es el caso con mis padres, ellos voltearon a verme con una sonrisa, pero en sus ojos ya veía el cuestionario que tenían para que responda, al menos mi mamá.
- Hola Joshua, es un placer conocer al hijo mayor de Clara.
- Hola Joshua – saluda mamá con el típico abrazo y beso – un gusto.
- Ellas son nuestras hijas, Sofy y Rose.
- Hola
Es todo lo que dice mi hermana, qué les digo, no es muy sociable, necesita tiempo para ganar confianza y mostrar su locura, también lo saludo fingiendo no conocerlo para que no me interroguen después o creen historias raras en sus mentes.
- Joshua acaba de regresar a casa, estuvo fuera por tres años.
- Qué bueno que haya regresado, siempre es una alegría tener a los hijos de regreso en casa.
- Sí – le responde a mi padre con una sonrisa – es tan triste cuando crecen y se van.
- Tantos años cuidándolos para que un día sigan su camino, es la ley de la vida.
- Tienes razón Eliza pero duele cuando se van. Pero yo creo que ellas se quedarán en la ciudad ¿Verdad?
- No – ríe papá – ellas quieren salir, viajar para conocer nuevos países ¿No es así?
- Sí, quiero viajar por el mundo antes de establecerme en un lugar.
- Opino igual, me gustaría conocer Inglaterra – comento al tomar mi taza.
- Londres es una hermosa ciudad.
- ¿Conoces Londres?
- Claro – le responde a mi hermana – Joshua y yo nacimos allá, así que legalmente somos ingleses.
- Así que tienen doble nacionalidad, es una gran oportunidad para ambos.
- Sí Señor Williams, aunque no hemos ido en mucho tiempo, tendríamos que renovar papeles.
- ¿O sea que no viviste allá? – inquiero a la respuesta de Joshua
- Solo hasta mis nueve años, después nos mudamos y no regresamos.
- Fueron nueve años maravillosos, les comenté que Joshua estaba...
- Mamá – le interrumpe antes que termine su oración – no creo que sea necesario.
- Mi hermano canta – termina Cris mordiendo su pan – tomaba clases allá y las continuó aquí, pero las abandonó.
- ¡Cris! No hables con la boca llena – le regaña terminando con una sonrisa – ¿y a sus hijas les gusta cantar?
- A Sofy sí – comenta mamá – pero a Rose no le gusta cantar.
- Ni bailar, no me gusta ninguna de esas dos cosas.
- Podría asegurar que es lo contrario, ya que a gran parte de las chicas les gusta.
- No – sonrío falsamente – lo detesto para ser sinceros.
Después de eso el té continuó normal, charla entre los adultos mientras nosotras conocíamos un poco más a Cris, Joshua también participaba, incluso noté que le comenzaba a agradar a mi hermana porque empezó a hablar cada vez más y con más soltura.
ESTÁS LEYENDO
El Resurgir de los Guardianes
Fantasy"El sufrimiento de unos puede ser provocado por la ambición de otros" Dos hermanas que no son del todo normales, verdades que deben salir a la luz, un mundo nuevo por conocer y muchos amigos que hacer ¿Qué puede salir mal? Entre la lucha por el pode...