Nos vas a brindar honor

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"A su familia gran honor la chica va a brindar si un buen partido es, el rey podría ganar"

Sakura y sasori había recorrido un par de calles en silencio. La arquitectura de la aldea de la arena era muy al estilo antiguo, era como caminar por esos bellos paisajes de cuento de hadas descritos en los libros de ficción que la pelirrosa solía leer en sus tiempos libres.

Llegaron en silencio hasta la plaza principal de la aldea donde el pelirrojo detuvo su andar.

-Bien creo que han dejado de seguirnos- comento él mirando con apatía por sobre sus hombros

La pelirrosa lo miro con confusión

-¿Que pasa muñequita?, no me dirás qué¿ no te diste cuenta?- comento con cinismo

Ella solo lo miro sin hacer ningún comentario

-Uchiha- dijo solamente cambiando a una mueca de fastidio.

-Ese idiota- dijo al fin ella con saña entre sus labios. Recordar es volver a vivir. Y ella recordaba muy bien su desprecio por el pelinegro.

-Bueno, ya he cumplido mi papel- dijo el pelirrojo sacándola de su ensoñación

- ¿Te retiras?- pregunto ella mirándolo de reojo

-Solo que quieras que me quedé, "Cariño"- dijo con burla

-Pierdete- dijo ella con fastidio, se estaba poniendo de muy mal humor

Para cuando terminó de decirlo el pelirrojo había desaparecido de su lado, completamente sola con sus pensamientos.

Tenía que admitir que la irritante presencia de Sasori ya no era tan irritante.

Recordó cuando momentos atrás había estado en el despacho de Gaara para la autorización de su compromiso con el pelirrojo y se sintió particularmente extraña

Kiara la vio con confusión, su instinto le indicaba que su ama se encontraba en un debate interno más sentimental que racional y únicamente pudo acercarse y frotarse contra su persona en muestra de apoyo.

-Bien, creo que debemos ir a prepararnos para la boda, no crees?- comento mientras acariciaba las suaves orejas de la felina y está volvía a transformarse en una enorme pantera para emprender vuelo rumbo a la torre del Kazekage nuevamente.

Los vientos gélidos característicos del invierno comenzaban a sentirse aun en el desierto.

La noche comenzaba a caer y con ella la temperatura reconfortable y cálida comenzaba a tornarse fría y escabrosa.

Llegó en un santiamén a la torre y se adentró nuevamente por los pasillos sombríos del lugar.

Llegó hasta la gran puerta de madera que guardaba el despacho del líder de la aldea y tocó 3 veces.

Desde adentro la voz grave del Kazekage le indico permiso para entrar

Sakura abrió de par en par y se adentró en la estancia observando al pelirrojo de ojos aguamarinas leer un par de pergaminos

Este al sentir la presencia de la chica en su estancia detuvo su lectura y levantó la mirada.

-Haruno-san- dijo con respeto

-Solo, Sakura- menciono está

-Sakura, que ocurre?- pregunto confundido

-Lamente usted la intromisión, el motivo de mi visita es para preguntar por los detalles para la ceremonia de mañana- dijo ella

-Entiendo- mencionó gaara tomando una pose más firme y rectificando su espalda el par del respaldo de su silla - No debes preocuparte por nada, he pedido que se atienda cada detalle, Matsuri, ha partido hoy al país del mar a conseguir los ropajes para la ceremonia estilo occidental como ha sido solicitado y estará llegando mañana al amanecer-

Sakura suspiro con tranquilidad, un problema menos del que preocuparse

-Debo mencionar- comento gaara rompiendo el silencio que se había comenzado a formar e interrumpiendo los pensamientos de la pelirrosa - que sería prudente, que fueras a descansar, la autorización de su matrimonio ya ha llegado, el consejo está sumamente... sorprendido por la noticia y ya se han enviado las invitaciones al señor feudal y a sus familiares para la ceremonia de mañana-

-comprendo- menciono la pelirrosa bajando un poco la mirada

-No deberías sentirte mal, solo es una misión- mención gaara mirándola a los ojos

-Si, lo se, agradecería Gaara-sama que me indicara donde podría descansar- menciono tratando de evadir más preguntas o comentarios como esos

-Baja hasta el segundo piso y ahí encontrarás las habitaciones asignadas para su visista- dijo seriamente.

Sakura hizo una reverencia y se giro para salir del despacho

-Y... Sakura...- dijo llamando nuevamente su atención -Agradezco lo que estás haciendo por mi aldea- la miro con sinceridad plasmada en sus ojos

-Es un placer ayudar- dijo ella con una pequeña sonrisa y retomando así si camino hacia las habitaciones.

Camino con paso lento hasta llegar al segundo piso como el Kazekage lo había indicado. Miro 3 puertas de color caoba finamente talladas con lo que parecía ser un exquisito diseño contemporáneo de la aldea.

Sintió el chackra de Deidara detras de la primera puerta y el Sasori en la segunda por lo que dedujo que la tercera sería su habitación.

Abrió con tranquilidad la puerta esperando no hacer demasiado ruido, por alguna extraña razón le incomodaba ser molesta para sus "vecinos" de habitación. Sin embargo grande fue su sorpresa al sentir la firma de chackra de sasori en sus aposentos.

-Debo agregar acosador y pervertido a mi lista de adjetivos para ti- mencionó Sakura con algo de altivez pero sumamente confundida, justamente acaba de sentir el chackra de Sasori en la segunda puerta, ahora ¿se teletransporta?.

-Puedes agregar lo que te venga en gana, me es indiferente- menciono con aburrimiento.

Sakura cerro la puerta tras de si cuando se aseguró de que la pequeña felina haya entrado a la habitación.

**Lo siento tengo un bloqueo creativo, tengo la idea de lo que quiero hacer pero no sé cómo expresarla, este es mi avance cuando salga de todo esto actualizaré un capítulo mejor**

El son del escorpión y la rosa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora