Kisses [noren]

tummy kisses

-mpreg

-Quisiera que vieras esto, es un plano tan difícil, cuando fui a la universidad nunca me dijeron que debía ser tan preciso, la universidad es una basura, en serio...-Jeno resopló mirando al mayor.-Ya, no se que más decirle, solo... Estoy diciéndole a nuestro hijo que no ha nacido que deje la universidad y ni siquiera ha ido al kínder.

Renjun continuó con su helado antes de hacer una mueca negando.

-Inventa un idioma, canta si quieres, has algo porque odia cuando hablo y ama cuando tu lo haces así que has algo porque es tu hijo.-hablo con rapidez el mayor.

Jeno lo miró con los ojos entrecerrados antes de apoyar su nariz sobre el abultado vientre de Renjun.

-No se que más decirle.

-Voy a ponerle el helado encima para ver si deja de moverse, ¿Si?

Jeno lo miró como si fuera un monstruo y alejó el tarro de su vientre cuando vio que lo haría en serio.

-Estás loco, te harás daño también.

-Vale la pena si deja de pensar que está jugando fútbol dentro de mi. Ni siquiera me gusta el fútbol.

Jeno hizo una mueca y miró su vientre de nuevo, siempre era divertido ver la marca exacta del pie del bebé cuando se deslizaba en el vientre de Renjun pero cuando veía a su novio hacer muecas de dolor se arrepentía al instante de que le pareciera tierno.

-Bien. Hola bebé, es papá de nuevo. Creo que ya te elegimos nombre. Juno, ¿cierto?

-Juno.-susurro Renjun asintiendo.

-Si, te llamas Juno.-sonrió.-Y serás el bebé más lindo del vecindario, del país, del continente y del mundo. Además te compraré muchas cosas, tú papi dice que no.-Renjun negó sin mirarlo, muy concentrado en la televisión frente a él que aún si estaba en mute lo entretenía.-Pero lo haré de todos modos en secreto. Tal vez una bicicleta.

-Sigue soñando.-el bebé le dio una patada, hizo una mueca.-Que lindo, no puedo hablar.

Jeno soltó una risa pero Renjun lo seguía mirando y presionando para que hablara con el bebé.

-Bueno, ¿Te gusta el fútbol?

Renjun lo fulminó con la mirada el momento justo que su celular sonó, hizo una mueca al ver que era su jefe y no podría ignorarlo.

-¿Si, señor? Huang Renjun le habla.-el bebé le dio una gran patada haciendo soltar un jadeo silencioso.-No señor, no estoy trabajando, usted dijo que sacara mi rostro cansado de la oficina.-otra patada y soltó un gemido.-No, no señor. Por supuesto que no hago cosas indebidas mientras hablo con usted, es solo que...-tomó una respiración.-Mi bebé me odia y quiere matarme, digo, me da muchas patadas.-Renjun lo miró, rogándole porque hiciera algo así que hizo lo único que se le ocurrió, colocó una de sus manos sobre su vientre y comenzó a dejar besos en donde su piecito hacía presión.-Si, ¿En serio? Oh señor, no es necesario.-sonrió levantándole el pulgar, Jeno continuó dejando besos suaves en su panza.-¿Un bono de cinco mil dólares para comprarle cosas al bebé? Pero si no es necesario.-sonrió acariciando el cabello de Jeno.-Oh Dios, cuanta molestia para usted pero gracias, si, muchas gracias señor, adiós.

Colgó el celular y miró al menor con una gran sonrisa, Jeno levantó su cabeza de su panza y lo miró curioso.

-¿Qué pasa?

-No, sigue.-movió su cabeza hacía su vientre y sus labios quedaron presionados.-El jefe me dará un bono para comprarle cosas al bebé, dice que es uno de sus regalos.

-¿Uno de ellos?-dejó otro beso cuando al Renjun hablar dio otra patada.-Es un buen jefe.

-Comparemos otra cuna.

-La que tenemos es buena.

-Ya se pero podemos comprar otra solo porque si.-se encogió de hombros.

-O ahorrar el dinero para la universidad.

-Es un cupo Jeno, y el jardín es más caro que la universidad según estadísticas.-hizo una mueca.-Sigue dejando besos.

Jeno soltó una risa.

-Creo que el bebé está ansioso de conocerte y por eso se mueve tanto cada vez que hablas.

Renjun le ofreció una sonrisa antes de hacerlo incorporarse y besar sus labios.

-Solo tú puedes pensar en algo tan lindo cuando lo único que se me ocurre es que mi bebé quiere huir de mi panza porque me odia.

Jeno negó pero bajo de nuevo y continuó dejando dulces besos para su bebé porque eso los hacía felices a ambos.