BNHA - One Shots.

❛ - ̗̀あ🐙♡┊𝓣𝓪𝓶𝓪𝓴𝓲 𝓐𝓶𝓪𝓳𝓲𝓴𝓲

In the Name of Love - Martin Garrix & Bebe Rexha

"¿Me dejarías guiarte incluso cuando estás ciego?
En la oscuridad, en mitad de la noche,
en el silencio, cuando no hay nadie a tu lado,
¿(me) llamarías, en nombre del amor?"

Pedido por: escandalosa_owo

Pov. ___ Ichiki

-Me estas escuchando? -Cuando escuche la fuerte voz de Aizawa sensei me sobre salte-

-Eh? Si -Mentira eso era, me encontraba pensando en como hacer que mi novio dejara de sentirse insuficiente.-

Aizawa Sensei soltó un suspiro antes de correr me de su salón, iba caminando mirando a el piso cuando choque con alguien al alzar la vista era Tamaki.

-Oh! Cariño, lo siento, lo siento, lo siento tanto. -sobe su barbilla, ya que fue donde lo golpee.-

-No....no te preocupes, fui yo quien no debió atravesar se en tú camino. —Agachó la cabeza. —

Negué levemente, tome su mano y comenzamos a caminar en silencio rumbo a la cafetería.

Al finalizar la hora del almuerzo volvimos a nuestras clases aunque íbamos en diferentes grupos eso no impedía que nos pudiéramos ver de vez en cuando.

Después de ese día, nuestra relación iba de lo más normal no habían peleas por ninguna de nuestra parte. Pero un día en mi pasantía me hirieron los ojos con un gas altamente peligroso.

Desde aquel día, no había vuelto a ser la misma, ni en la escuela, ni con mi familia y ni siquiera con Tamaki.

•|Flashback|•

-Tamaki...mejor que esto termine aquí. -Mis ojos estaban vendados así que no sabía cual era su rostro en ese momento. -

-Yo..te amo, no quiero dejarte cuando más me necesitas. –Tomó una de mis manos para acariciar la pero quité rápidamente mi mano.–

-No, está más que claro que estaré ciega para toda la vida y no quiero detenerte con esto. –Quería llorar o más bien quería decirle que no quería dejarlo. –

•|Fin del Flashback|•

Desde aquel momento no volví a hablar con el, cada día me acostumbraba menos a mi ceguera, me odiaba, me decía que como pude ser tan estúpida para no darme cuenta que aquel gas podría dañar me.

-Ichiki-Senpai, ¿esta ocupada? -Escuche la voz de aquel peli verde con pecas. –

-No, para que me necesitas? –Voltee a donde había escuchado aquella voz. –

–Bueno, quería ver si me podía acompañar a la Sala de maestros, Aizawa-Sensei quiere verla. – Asenti y con su ayuda fuimos a la Sala de maestros. –

Al menos eso me había dicho, porque no contaba con que me traería a el patio de la escuela.

Sentí que alguien se acercó a mi, tomó mis manos aquel olor a lavanda llegó a mis fosas nasales, sabía perfectamente de quien se trataba y mi corazón dio un vuelco enorme al saber que era Tamaki.

- Quiero que me dejes estar a tu lado en todo momento, no importa si tú vista no funciona, no importa si no tienes pelo, entre otras cosas. – Acarició una de mis mejillas con algo de timidez. –

- Yo te amo por quien eres y como eres ante mi eres la chica más preciosa, así que dejame estar a tú lado en todo momento. –Limpio una lágrima que cayó de mi ojo derecho. –

- Tamaki...Lo siento por alejarte de mí, es solo que no quería que estuvieras con alguien como yo. –Beso mi frente. –

- Para nada eres una carga, a partir de ahora dejame ser feliz a tú lado. –Me dio un pequeño beso. –

|3 Años después|

-Muy bien, quitare la venda de tus ojos Ichiki, no los abras hasta que diga. –Asentí levemente. –

Tamaki estaba sosteniendo mi mano con algo de nervios y como no, si me encontraba en el hospital a punto de saber si la operación había sido un exito para la fin poder ver.

Sentía como retiraban la venda y aquellos parches de mis ojos los cuales estaban cerrados por órdenes del doctor.

-Abre los lentamente para que te acostumbres aa luz. – Hice caso a sus indicaciones. –

Mi vista estaba borrosa pero con forma pasaron los minutos se iba acoplando más y más. Lo primero que hice fue mirar a Tamaki y al verlo después de tanto tiempo no pude evitar llorar.

-Tama... Yo...Yo al fin veo, te veo a tí. –Agarre su rostro acercando lo a mi. –

Su cabello había crecido un poco y estaba completamente lacio, su porte se hizo un poco más grande, era más alto, observe todo su rostro sin perderme cada milímetro detalle.

- Dije que te apoyaría siempre y aquí estoy contigo, cariño. –Sonrió para después darme un beso. –