Somos más que cómplices | Midna x Link 🔞

#6 Obligaciones reales

Estabas organizando un papeleo en tu oficina, no parecías muy concentrado, inquieto, noté cómo querías terminar con tal aburrida obligación.

Interrumpí tu tensión, balanceé mis caderas hasta el escritorio en donde estabas. 

-Midna, estoy muy ocupado ahora. 

-¿No quieres que te ayude a apresurar el trabajo? -sonreí mostrando uno de mis colmillos. 

-¡Por favor! -rogaste como cachorro, giré la silla donde estabas sentado y posé mis muslos sobre tus piernas. 

-Mira, primero tienes que acabar con esta urgencia de acá y después esto será pan comido. 

Te escuché tragar saliva, nervioso, tu respiración chocaba contra mi cuello. Tomé tu mano y la llevé a la zona interna de mi pelvis. 

-¡Que estoy ocupado! -dijiste. Pero tu mano quería otra cosa. 

-No te aguantes, Link. Me levanté de tus piernas y me escondí bajo el escritorio -Continúa tu trabajo, te ayudaré desde aquí. 

-¡Midna! -reaccionaste. Tu bulto ya palpitaba entre mis manos. 

-Te atrasarás si te concentras en mí ¡trabaja!

-Me las pagarás después -contesté a tu demanda con una risa ahogada debido a tu miembro entre mis labios. 

-Te pagaré eso y más, Link. Concéntrate. 

-¡No me puedo concentrar si la mujer de mis sueños está en mi entrepierna jugando conmigo! 

-¡Que te concentres, dije!

Gruñiste e intentaste seguir con lo tuyo, pero tus quejidos eran abundantes, tu mano libre quería agarrar mi cabeza, pero sólo te dignabas a sostener mi hombro. 

-Mid... -susurraste, te tenía al límite, tal y como quería. En un instante escuché como soltaste la pluma y sin darme cuenta, ya estabas eufórico con tu cadera y tus manos sobre mi cabeza. Mis ojos soltaban lágrimas y sentía que me ahogaba, pero estaba en éxtasis.

Algo tibio y ácido inundó mi boca. Escuché un gruñido ahogado y una respiración agitada.

Reí una última vez y desaparecí de tu oficina. Pude escuchar a lo lejos. 

-¡Midnaaaa! -sonó a la distancia.

Sonreí conforme e hice como si nada hubiera pasado.