Believe in Love (Pausada hasta nuevo aviso)

Alfa interno.

Perdón si parece salirse un poco del canon, de por si es difícil hacer que así permanezca en un AU, pero bueno, espero les guste la lectura.-
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Su raciocinio volvió un poco al ver el collar obligatorio que tenían puestos todos los alumnos en caso de cualquier cosa. Es cierto, los Alfas no los necesitaban, pero últimamente estaban saliendo nuevos derivados de Alfas como el suyo que podrían convertir a cualquiera.

Ese chico que tenía en su poder no era Alfa, de hecho, no estaba seguro de lo que era, solo quería marcarlo y su lado más dominante casi le hace sacar un sonido de gruñido casi gutural debido a su frustración.

Sabía perfectamente que podía cortar ese maldito collar que impedía morderlo, pero no lo haría, se controlaría, pero era terriblemente difícil no ceder a los impulsos que le pedían, no, prácticamente le exigían marcar a esa persona. Su propio miembro tenía una erección presionada contra la erección ajena que había reaccionado a las feromonas del Alfa por encima de los pantalones.

Trato de aguantar la respiración, aunque su delicioso olor ya estaba casi dentro de su olfato. Basta, esto tenia que parar, no podía comportarse como un maldito Alfa cavernícola. El no era así, no podía ser así y no quería ser así.

Con un esfuerzo sobre humano se separo de esa persona...

Por favor, aléjate, no quiero hacerte daño.

Le dijo intentando ser lo más calmado posible en ese estado, aunque sabía que un gruñido se le había escapado. Sus dientes querían reclamar a ese joven como su pertenencia en ese mismo instante.

La persona huyo, por supuesto, aunque algo en su olor Saiki alcanzó a detectar, que el joven en cierto modo deseaba conectarse con él, claro en otras circunstancias.

Seguramente porque creía que eran "destinados" o al menos eso leyó en los inocentes pensamientos de esa persona.

Saiki tomo aire porque le costaba demasiado relajarse, aunque el aire estaba lleno de aquel olor que le atraía tanto. Nunca le dominó su Alfa interno como hasta ahora y lo odio completamente. Era una bestia salvaje, completamente a como era él normalmente.

Sentía que podría perder completamente el control si dejaba que esa parte de él le dominase. Casi viola a un compañero cerca de los baños de la escuela ¿Qué demonios tenía en la cabeza?

Incluso aunque el chico que había atacado era un poco más alto que su persona, su cuerpo al querer dominarlo incluso había ganado altura en un instinto de demostrar su superioridad a su pertenencia. Era como una especie de monstruo a punto de devorar una presa indefensa.

Un olor a Alfa se sintió cerca, estuvo a punto de dejarse dominar por su ira ciega otra vez, en una absurda competencia de Alfas por ver cual era el mejor, pero esta vez se controlo completamente, al menos ese olor le hacía olvidar un poco el olor que lo tentaba tanto.

Oi colega ¿Estas bien? Pareces algo enfermo.

Estoy bien, solo debo irme a casa.

Nendō en general era un fastidio porque parecía a simple vista tener una barrera mental que impedía saber que piensa o ser demasiado estúpido para tener pensamientos, pero su olor tan fuerte de Alfa y un poco desagradable a su nariz le ayudo un poco a olvidarse de aquel joven, aunque dudaba sinceramente que pudiera olvidar ese olor tan característico de aquella persona, estaba por todos lados.

―Yo planeaba que fuéramos por un poco de ramen. Encontré una tienda muy buena.

Saiki solo lo ignoraba mientras caminaba por el pasillo. Debía ir rápido a explicarle a algún profesor que tenia que ir urgentemente a casa a tomar algún tipo de supresores para Alfa, aunque dudaba que sirvieran con él.

―Saiki-kun, es bueno verte. ―Apareció Teruhashi Kokomi delante de él con unas libretas en la mano que decían Romeo y Julieta. ― Dijeron hay un puesto para Romeo en la obra que se interpretará y la verdad la mayoría de los alumnos varones se están peleando y no se deciden ¿Me preguntaba si tu...?

Oh, no, para variar otro grano en el trasero. Teruhashi, aunque se hacia la inocente mandaba señales de olor hacia él. La mayoría de Alfas se volverían locos con solo la más mínima porción que le estaba enviando hacia él. Era una Omega sumamente poderosa.

Por suerte a él no le causaba nada, pero la persona que venía tras él estaba mirando a Teruhashi como si no existiera nada más en la vida.

―Offu, Teruhashi...―La mirada del de barbilla era extraña y la asustó bastante.

Al ver lo que provocó en Nendō la chica trató de cambiar su aroma, porque el otro Alfa parecía dispuesto a lanzarse sobre ella, el mismo Saiki tuvo que interferir con hipnosis para que viera algo que no tenía nada que ver con lo que tenía en frente.

Ten cuidado con tus hormonas. Mejor toma supresores. Por más buena que sea una persona puede enloquecer si la provocas demasiado.

―Lo sé Saiki-kun, solo que los supresores no funcionan mucho conmigo y ¿Saiki-kun?

Tuvo que irse de aquel lugar de alguna manera teletransportándose antes de que se dieran cuenta, pero ¿Ahora como lo hacia para sacar sus cosas? La gente en este lugar era demasiado problemática.

Estaba en la terraza de la escuela, tenia miedo de bajar y toparse de nuevo con esa persona, aunque iban a diferente clase era un peligro constante. Suspiró y trató de ir a enfermería, aunque al parecer no había ninguna enfermera de momento, de todos modos, se acostaría fingiendo que se sentía muy enfermo hasta la hora de la salida. 

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Durmió un poco después que una enfermera le trató quien le miraba de manera muy interesada hasta que Saiki se quedó dormido. Odiaba tanto llamar la atención, aunque no hiciera absolutamente nada.

―...Ese Alfa parecía dispuesto a morderme hasta que vio que no podía por el collar que tenemos que usar por obligación. Nunca creí que alguien se interesaría en mi de esa manera. No suelo ser muy atractivo en mi olor para los Alfas y la mayoría dice que parezco Beta.

Saiki abrió los ojos al escuchar esa voz, era la voz de su persona especial.

― ¿Eras Omega? Yo también creí que eras un Beta, pareces un chico muy común.

―Yo también lo pensé. Eres más similar a un Beta que a un Omega Satou-kun.

―Idiotas, claro que soy un Omega. ―Aunque no lo dice con verdadero enojo. ― En cierto modo me hubiera gustado que me hubiese mordido, así no dirían que parezco Beta. Me pregunto dónde estará ese Alfa, me gustaría conocerlo.

―No creo que sea adecuado. Si es tan agresivo sin que tengas tu celo podría hacerte daño. No andas en celo ¿Oh sí?

―No. Pero al parecer es mi destinado. Son los únicos que reaccionan aun cuando no hay celo.

Saiki estaba escuchando las voces que se iban alejando cada vez más, le molestaba a su Alfa interno demasiado que hubiera otras personas con su Omega. Ese chico es solo suyo. Controlo con todo su ser ese lado que no se parecía en nada a su yo normal, aunque estaba loco por seguirlos.

Salió de la enfermería y trató de buscar sus cosas para salir de allí como fuera.

Algo tenia que hacer, aun había demasiado olor a ese chico Satou en el ambiente, en toda la escuela, incluso cerca de su casa cuando llegó. Tendría que encerrarse de por vida.

La única forma en que no dañaría a esa persona es manteniéndose lo más lejos de ella.