Kaminari Week //Pausada//

Con cuernos [Kirikami]

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Corre con velocidad tratando de llegar a clases, se levanto tarde-como siempre-pero si se apuraba tal vez llegaba antes de que Aisawa-sensei entrara al salón. Al doblar por uno de los pasillos, choca con un chico provocando que ambos cayeran al piso.

- ¡Mierda! -se queja sobando su trasero, para levantarse y ayudar al chico.- ¡Perdona amigo! ¡Tengo prisa! -corre antes de que el muchacho pudiera siquiera hablar.-

Unos pequeños tirones aparecen en su cabeza por la parte de arriba, se queja un poco pero no deja de correr.

- ¡Aisawa-sensei no entreeee! -obliga a sus piernas a correr mas de lo que ya corren.-

- Kaminari Denki. -suspira al ver que el chico logro entrar antes que él.- Te salvaste esta vez, vete a sentar. -el rubio asiente, camina hacia su lugar mientras se rasca la cabeza, le duele un poco.-

Las clases pasan con normalidad para todos, menos para Kaminari, quien se había rascado la cabeza soltando leves quejidos de dolor, porque aunque le picara, le dolía como el infierno. El sonido de la campana para salir al recreo/receso sonó, los alumnos se levantan de sus lugares ya para salir.

- ¿Tienes piojos o que? Te estuviste rascando la cabeza desde toda la clase. -Jiro se acerca a el con los brazos cruzados.-

- No es eso... -vuelve a rascarse, pero apenas toca con las yemas de sus dedos y hace una mueca de dolor.- Mierda... 

- ¿Qué te hiciste ahora? Te abras lastimado por rascarte todo el día. -se posiciona frente a el.- Agáchate, déjame ver. -el rubio obedece sentándose en la silla. Corre sus cabellos, sonriendo de manera leve al sentir tan suave aquellas hebras amarillas.- ¡¿Que carajos, Kaminari?!. -se sorprende al encontrar pequeños cuernitos.-

- ¡¿Q-Que?! ¡¿Que tengo?! ¡¿Tengo piojos?! -pregunto preocupado, aun con la cabella baja a la vista de la chica.- ¡Pero dime! 

- ¡Tienes cuernitos! -grito con ternura y algo de sorpresa, eran cuernitos color blanco.- ¡Son pequeñitos y apenas se notan! -los toca con su dedo, siente el ligero pinchacito. Kaminari suelta un quejido sobresaltando a la peli violeta.- Woah, te duele? 

- Algo así... -sacude su cabeza para acomodar su pelo.- ¿Cómo que tengo cuernitos? ¿Qué pedo con eso? -se levanta de su silla, Kirishima se acerca a el junto con Sero.-

- ¿Quién tiene cuernitos? -pregunta el pelinegro con esa sonrisa de siempre.- 

- Kaminari. -contesta apuntando a la cabeza del chico, quien suspira rascando su nuca.-

- ¡¿Comooo?! -el pelinegro lo obliga a bajar la cabeza, el rubio se queja al sentir las manos en su cabeza.- ¡Mira que si! ¡Son pequeñitos y blancos! -vuelve a tocarlos, Kaminari muerde sus labios para retener los sonidos que quieren salir de el.- Hombre, por que tienes cuernitos? 

- Déjale su espacio, bro. -Kirishima aparta con amabilidad a Sero de Kaminari, tenia algo de celos al verlos tan juntos.- ¡Hermano, que varonil se ven! -mira aquellos pequeños cuernitos, los cuales van creciendo de apoco.-

- ¡Ay yaa! -aparta a sus tres amigos lejos de el.- No se porque carajos tengo cuernos, maldita sea. -un leve sonrojo decora su cara.- Me voy al baño. -murmuro saliendo del salón.-

- ¡Kamibro, te acompaño! -el pelirrojo sigue al rubio, quien asintió con una sonrisa aceptando su hermosa compañía.- ¿Tienes alguna idea de como te salieron cuernitos de la nada? -pregunta agachando un poco la vista para verlo.-