Nozomi Kamihana era brillante.
Incluso en la peor oscuridad, ella era capaz de iluminar la vida de cualquiera.
"Si tan sólo te hubiera dicho lo mucho que te quería"
Kazutora Hanemiya X fem OC
Ninguno de los personajes me pertenece (excepto el OC)
Co...
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Kazutora POV
El día en que te conocí fue el más extraño de mi vida.
Fue el mismo día en que conocí a Baji.
— ¿Entonces? ¿Tú eras el “árbol de dinero” de estos patéticos?
— ¡Estás equivocado!
Al principio ni siquiera le presté mucha atención a tu presencia; sólo estabas al lado de Baji, quien había golpeado a la persona que alguna vez consideré mi amigo.
— Esos 100 yenes de justo ahora... siempre has sido usado de ese modo ¿no?
— ¡Estás equivocado! ¡Lo de ahora fue sólo una coincidencia! ¡Es una coincidencia! ¡Usualmente no traigo dinero!
— Hmmm.... que amigos tienes ahí.
— ¡Cállate! ¿Qué demonios saben ustedes acerca de mí?
— ¡Tu verdadero rostro se está mostrando!
— ¡No deberían recurrir a la violencia en una situación como ésta!
Fue la primera vez que escuché tu voz; tan suave y dulce... incluso me atrevería a decir que melódica.
— No sabemos nada acerca de ti; eres un extraño después de todo. Y estúpido... una basura en el zapato; aunque es gracioso.
— Estúpido...
— No odio a alguien que se dejó golpear por sus amigos. ¡Ese es el por qué debemos ser amigos sin ningún tipo de intereses!
— Realmente no quería hacerlo, pero.... ellos me preguntaron entonces, le robé algo de dinero a mi mamá. Como sea, Junpeke.... él me dejó atrás y se fue por su cuenta; siempre me he considerado sólo el “árbol de dinero”. Éste es el peor cumpleaños de todos.
— El peor cumpleaños, ¿uh? Entonces... ¡vamos a alborotarnos hasta el cansancio! Iremos a tu lado, ¿está bien? ¡Somos amigos de pelea!
— Pero antes de eso, ¿te sientes bien? — me hablaste de nuevo; no supe qué responder. — ¿Esas personas te sacaron mucho dinero? Dijiste que no querías pero que se lo robaste a tu mamá, ¿cierto? Si quieres puedo darte del mío.
— ¡Vamos Nozomi! Acabo de decir que seremos amigos sin intereses y ya le andas ofreciendo dinero.
— Es que si era de su mamá podría sentirse mal después.
— ¿De qué hablas? — me atreví a preguntarte.
— Además te quedó la cara toda golpeada, ¿no te duele? Te ayudo a levantarte. — me ofreciste tu mano; dudé un momento pero terminé tomándola.
