Nozomi Kamihana era brillante.
Incluso en la peor oscuridad, ella era capaz de iluminar la vida de cualquiera.
"Si tan sólo te hubiera dicho lo mucho que te quería"
Kazutora Hanemiya X fem OC
Ninguno de los personajes me pertenece (excepto el OC)
Co...
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Es gracioso como siempre me apoyabas en lo que decidía; sin importar qué fuera.... siempre respetabas mis decisiones.
— DJAJAJAJAJAJA ¿POR QUÉ TIENES EL CABELLO ESTILO PANCHI? — Baji se burló del corte que me había hecho. — ¡No te queda bien! ¡A pesar de que ya eras guapo entonces!
— ¡Cállate! ¡Tú sabes que no me gusta mi cara!
— A mí me gusta como te queda, Kazutora. — me dijiste. — Además, lo importante es que a ti te guste. — no pude evitarlo, me sonrojé.
Creo que fue la primera que me ponía nervioso por una chica.
— Gracias, Nozomi.
— ¡¿Y qué es eso?! ¡Es un tatuaje en el cuello! — volvió a decir Baji. — JAJAJA ¡me muero!
— ¡Maldito ruidoso! ¡No es de tu incumbencia, ¿bien?!
— ¿Puedo ver de cerca? — me preguntaste con una mirada curiosa.
Jamás supe cómo decirte “no” porque me encantaba verte feliz.
— Está bien. — entré en pánico por un momento mientras te veía acercarte.
— ¡Es realmente genial! ¿Puedo tocarlo?
— Claro. — pusiste tu mano sobre mi cuello y lo empezaste a acariciar suavemente, admirando el tatuaje que me había hecho.
Tu mirada curiosa y dulce me cautivaba; en ese momento tus ojos me parecieron hermosos.
— Bueno, dejen de coquetearse. ¡Te presentaré con nuestros amigos de la secundaria, Kazutora!
Me volviste a mirar; eras realmente encantadora cuando me dabas esa mirada gentil.
— ¡Wow! ¡¿Un estilo de peinado en puño y un tatuaje de tigre en su cuello? Tan genial.
— Él es Ryuguji Ken. — Baji lo presentó.
— ¡Encantado de conocerte!
— ¡Está bien, Kazutora! — una voz externa me llamó. — ¡Hoy jugarás conmigo! ¡Ven!
— Él es de quien siempre te hablamos. — me dijiste. — Es Mikey.
— De ninguna manera... — no me lo podía creer.
Durante esa época, siempre me pregunté cómo podías juntarte con gente como Mikey; tú eras muy diferente a él.
— ¿Qué pasa, Kazutora? — me preguntó Baji mientras iba conduciendo. No había espacio para los tres ahí, así que para mi desgracia, Mikey se ofreció a llevarte.
