Detrás De Tí (TodoBakuTodo) +18

CAPITULO 10 "Enséñame"

NARRADOR

   Al cabo de unos minutos decidieron separarse.

“¿Qué me está pasando?” Fué en lo único que pudieron pensar ambos.

– ¡Joder! No sabes ni besar, idiota - si antes de comenzar estaban ruborizados, ahora sus caras se asimilaban al color de ojos del rubio.

– Lo siento - se disculpó, alejándose hasta donde estaba la silla.

– Bien, me voy a compadecer de tí y te ayudaré con esto. - volvió a sentarse sobre su cama.

– Ya te lo dije, no necesito que me tengas lástima. Además, pensé que me odiabas.

– Yo pensaba lo mismo, hasta que intentaste besarme en los vestidores.

– Eso... eso fué un accidente. - desvió la mirada apenado.

– Ajá claro, bastardo ¿Quieres que te ayude o no? - se mostraba indiferente, pero deseaba escuchar un sí.

– ¿Ni siquiera te interesa saber quién me gusta? - preguntó el mitad albino, con la esperanza de que preguntará, para así reunir todo su valor y decirle que se trataba de él.

– No me interesa - por supuesto que sí, pero no lo diría. - además, esto es para que tú me ayudes a mí.

– ¿A tí?

– Así es idiota, necesito a alguien fuerte para entrenar y tú no pareces tan débil como los demás extras. - no, esa no era la razón.

– Uhh... - debía pensarlo, estar cerca de él quizás no resultará muy bien.

"Era eso" se dijo Shoto.
Al parecer, no compartían el mismo interés, pero quizás podría hacer que aquello cambiará si aceptaba ese trato.

– De acuerdo - dijo al fin.

   Bakugou celebraba internamente, porque, aunque ahora confirmaba que el chico que le atraía sí sentía algo por alguien, y eso le molestaba, por lo menos podría pasar más tiempo con él e incluso lo ayudaría a entrenar, y él podría "enseñarle" a besar hasta que aprendiera.
Aunque ninguno tenía experiencia.

Irónico ¿no? Sí tan sólo fuesen sinceros...

– Eso es todo bastardo, fuera de mi habitación - señaló la puerta con su dedo índice.

– ¿Me enseñarás a besar entonces? - quería estar seguro de que había entendido bien.

– ¡¡Maldición!! No tienes porqué repetirlo, sí. - afirmó

– ¿Cuándo?

– ¿Tantas ansias tienes por aprender?

– Me gusta esa persona... - soltó en voz baja - “tú” - afirmó en su mente.

– Tsk. - así es, le molestaba bastante - bien, si quieres comenzar no tengo ningún problema - dijo un poco molesto.

pero no se rendiría así de fácil, si algo le gustaba era ganar.

Y se ganaría ese corazón.

  Sin saber que aquel órgano vital de Todoroki se aceleraba de sólo tenerlo cerca a él.

   A Shoto pareció que le dijeron "ven, puedes entrar al cielo" porque sus ojos brillaron con tanta intensidad que Bakugou se preguntó a sí mismo si acaso era la gran cosa para el heterocromático.
Porque para él sí lo era.