Sonrisas falsas

1.7K 135 36
                                    

- ¡Hola de nuevo Tomioka! - otra noche mas, menos fría que la anterior al menos, esos momentos parecían ser perfectos para reunirse.

- Hola Kamado - a diferencia de las veces pasadas, esta vez usaba ropa un poco mas abrigadora, conservando la chaqueta que Tanjiro le dio la primera vez.

Se la quiso devolver varias veces, pero nunca la acepto devuelta.

- ¿Cómo te fue en el trabajo? - le pregunto mientras el menor se sentó junto a ella. 

- Bien, hubo pocos clientes el día de hoy - le sonrió - ¿Qué tal te fue a ti?¿Regresaste?

- Si, tenias razón, era momento de volver - la azabache acababa de regresar a su trabajo, después de que el peli-burdeo le alentara a hacerlo - Ya estaba preocupando a las demás.

- Me alegra que regresaras - respondió y después de eso, se quedaron en silencio.

Habían pasado dos semanas desde que hablaron por primera vez esa noche lluviosa, se veían cada noche y se platicaban como les había ido en el día, formando una amistad simple, pero muy hermosa.

Aun no llegaban al grado de contar cosas mas personales o de llamarse por sus nombres, pero hasta eso, les gustaba la presencia del otro y convivir.

- Las noches están comenzando a ser cálidas - sonrió, pero, había algo extraño en su sonrisa - Eso me gusta...

- Si, a mi también me gusta eso - respondió, mientras que por dentro se preguntaba porque a pesar de que la oji-azul sonreía, no parecía ser verdadera.

Al día siguiente, el Kamado se encontraba en el trabajo junto a sus tres amigos, Zenitsu, Inosuke y Kanao, los cuatro trabajaban en la cafetería "Kimetsu", un local demasiado popular en la zona, aunque ese día no hubiera mucha gente ahí. Durante todo el rato estuvo demasiado distraído, se podría decir que su mente estaba por las nubes.

- Tanjiro, ¿Te encuentras bien? - le pregunto Kanao mientras tocaba su hombro, sacándolo de sus pensamientos - Estas muy distraído el día de hoy.

- No es nada Kanao, solo pensaba - dijo mientras terminaba de lavar unas tazas.

- Si, todos lo notamos - dijo Zenitsu mientras dejaba una bandeja en el mostrador, la cual tenia mas tazas y platos sucios - ¿Estas así por la chica con la que te reúnes?

- Algo así - tomo la charola - Estoy algo preocupado por ella.

- Una chica que se la pasa sentada en el mismo lugar y con la mirada perdida - Inosuke se unió a la conversación - Se nota que debe de tener algún trauma.

- ¡Inosuke! - los tres le gritaron.

- ¿Que? - pregunto, parece que no se dio cuenta de su error.

El día siguió con su curso normal, el de ojos granate siguió de distraído pero podía seguir con su trabajo sin ningún contratiempo. Cuando ya estaban cerrado el local y apunto de retirarse, Tsuyuri detuvo un momento a Tanjiro.

- ¿Puedo acompañarte? - pregunto y asintió, ambos comenzaron a caminar - ¿Te reunirás hoy con ella?

- Si, la veré donde siempre - vio el cielo, estaba algo nublado - ¿Por que decidiste venir conmigo?

- Quería darte unos consejos, ¿Qué es lo que te preocupa de Tomioka?

- Su sonrisa es falsa, es fácil de notar - suspiro - Cuando la vi las primeras veces, aprecia que nada le importaba, como si su alma estuviera perdida - volteo a ver a su amiga - No le quiero preguntar directamente para no incomodarla, pero me gustaría al menos consolarla.

- Mmm, te preocupa que su sonrisa sea falsa - repitió las palabras apara si misma - Entonces has que sonrió de verdad.

- ¿Eh? - pregunto extrañado.

- Eres bueno en eso, seguro lo logaras - avanzo las rápido, dejándolo solo.

  - Hacerla sonreír, espero logarlo - se dijo a si mismo y siguió caminando para llegar rápidamente al lugar de siempre.

En el parque Gina lo estaba esperando, se encontraba leyendo un pequeño libro, agradecía que el lugar tuviera faroles que lo iluminaban. Escucho la voz de Tanjiro de lejos y cerro su libro, poniéndolo sobre sus piernas.

- Buenas noches Kamado.

- Buenas noches Tomioka - se sentó junto a el -¿Que leías esta vez?

- Estaba leyendo otra vez "El esclavo", me gusta demasiado - respondió.

- Se ve, parece que nunca te cansas de el - centro su visita en los ojos de la chica, eran muy hermosos, pero lucían algo opacos.

Como si las nubes opacaran a la hermosa luna.

- ¿Pasa algo? - Tomioka pregunto al darse cuenta que solo la estuvo viendo por un rato.

- N-Nada - respondió algo apenado - Solo, estaba comparandote con algo.

- ¿A que te refieres? - claramente no entendía a que se refería.

- Siento que eres como la luna - su vista quedó fija en dicho astro - Reservaba y fría, pero a la vez demasiado hermosa y elegante - sonrío y la volteó a ver - Aunque sea oculta por las nubes, aún se puede ver su brillo, al menos un poco - sus mejillas fueron teñidas de un lindo tono carmesí - Justo como tus ojos - quiso acariciar su mejilla, pero se contuvo - Y como tú sonrisa.

- ... - no dijo nada, estaba sorprendida, solo se sonrojó y sonrió de manera apenada - Que bonitas palabras Kamado.

- Es justo lo que pienso - también sonrío, la sonrisa que la chica le brindó era de verdad.

- Ya me debo de retirar - se levanto y abrazo su libro - Te veo mañana, Tanjiro - dijo antes de comenzar a caminar.

- "Me dijo por mi nombre..." - pensó mientras se ponía más feliz - ¡Hasta mañana Gina!

La azache lo escuchó y su sonrisa creció un poco más mientras su pecho se sentía más cálido, pero a la vez le comenzaba a doler un poco.

Una sonrisa falsa, puede volverse verdadera...

>>---▷♡>>---▷♡>>---▷♡>>---▷♡>>---▷♡

Solo una cosa más, cOsaSLokAsdeEmos, eres una adivina o que chinchados?

La mujer fría como el hielo (Tangiyuu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora